Las minorías del Grupo Mixto quieren 'divorciarse' de Amaiur

Cuando la mayoría de la mesa del Congreso denegó a Amaiur la posibilidad de formar grupo parlamentario y le obligó a integrarse en el Grupo Mixto empezó la “mala vida” de los partidos más pequeños que comparten ese mismo grupo con los abertzales. Aseguran los representantes minoritarios del Grupo Mixto que los 7 diputados de Amaiur, con el apoyo invariable de los 3 de ERC, pasan continuamente el “rodillo” sobre la minoría, conformada por BNG, CC, UPN, Compromís, Geroa Bai y FAC. Por eso, la minoría del Grupo Mixto pretende dividir el Grupo en dos partes: una “asociación“ de diputados formada por los 10 parlamentarios de Amaiur y ERC, para que los 8 restantes puedan organizarse y repartirse el trabajo cómodamente, como se ha venido trabajando dentro del Grupo Mixto legislatura tras legislatura.

Diputados de la minoría del Grupo Mixto han asegurado a Cuartopoder.es que “cualquier decisión que se tenga que tomar, desde quién interviene en cada uno de los temas que se plantean durante los Plenos, pasando por qué asientos ocupa cada quien en la Cámara Baja, hasta otras cuestiones domésticas, de funcionamiento diario del Grupo, la toma Amaiur, con el respaldo de ERC”.

Uno de los diputados de las minorías del Mixto asegura que “los diputados de Amaiur van a los suyo, a colocar sus temas, a intervenir ellos y a no repartir ningún juego con los demás miembros del Grupo, salvo, ocasionalmente, con ERC”. Otro, lamenta profundamente que ”ERC, que ya había estado anteriormente en el Grupo Mixto y debería conocer el compañerismo y buen ambiente que siempre habíamos mantenido, está permitiendo que Amaiur se imponga siempre con el rodillo de la mayoría”.

Con mucha ironía, otro de los miembros del Mixto recuerda que sólo en una ocasión ERC llevó la contraria a Amaiur, en las primeras reuniones de funcionamiento del Grupo. “Los de Amaiur- asegura este diputado- dijeron que querían renunciar al coche oficial que se le asigna al Grupo Mixto, pero Joan Tardà (diputado de ERC) intervino rápidamente, para decirles que no, que el coche era muy útil, para llegar al aeropuerto, por ejemplo, cuando acaba tarde el Pleno, o para no tener que coger un taxi , cuyo conductor les reconoce y les increpa, porque no gozan de muchas simpatías en Madrid, etc…Es la única vez que le han puesto un ‘pero’ a los de Amaiur. Y los convencieron, por cierto”.

A estas quejas se suman otras, como que Amaiur no deja intervenir al resto de Grupos, ni siquiera cuando su Grupo no tiene especial interés en el tema a tratar. Así, cuando se discutió la ruptura del acuerdo pesquero de la UE con Marruecos, el representante del BNG, Francisco Jorquera, interesado en intervenir, ya que había intereses de pesqueros gallegos en juego, se quedó sin hacerlo, mientras que todos los minoritarios tuvieron que dar una auténtica batalla para que permitiesen intervenir a la representante de CC, Ana Oramas, ya que Canarias es la Comunidad que más barcos tenía faenando en aguas marroquíes.

Tradicionalmente, en el Grupo Mixto, salvo la asignación económica, se repartían tiempos, intervenciones y turnos de palabra breves, de modo que todos pudiesen intervenir, ya que las posturas de sus miembros son muy dispares. Pero, con Amaiur, las cosas han dejado de funcionar así. Los abertzales “usan y abusan”, según lo define uno de sus compañeros de Grupo, “ahora que ejercen la portavocía del grupo, no se ocupan de los temas que nos preocupan a los demás y van a lo suyo en las reuniones de la Junta de Portavoces y, a la hora de repartir tiempos, presencia e intervenciones, nos dejan la escoria a los minoritarios”. Por ello, con el Reglamento en la mano, los minoritarios proponen que se constituya una asociación “de derecho” entre Amaiur y ERC, que ya está funcionando de hecho “y que ellos se queden con su dinero, con su tiempo y sus comisiones y nos dejen organizarnos a los demás como queramos con lo poco que nos quede, que seguro que nos va mejor.

Sin embargo, una vez se plantee formalmente esa posibilidad, la última palabra la tendrá la Mesa del Congreso y, más concretamente, los miembros del PP que la integran y que tienen la mayoría y, por tanto, la capacidad de decidir si procede o no el divorcio de Amaiur y ERC del resto de partidos del Grupo Mixto.