La APM insta a Interior y a Cifuentes a no poner trabas al ejercicio del periodismo

Las identificaciones y agresiones a periodistas en las manifestaciones Rodea el Congreso, que han sido denunciadas desde cuartopoder.es y el intento de evitar la retransmisión de la manifestación del 29 de septiembre por televisión, que también reflejamos en nuestro medio,  han provocado que la Asociación de la Prensa de Madrid (APM) emita un comunicado de apoyo a los profesionales y de rechazo a cualquier vulneración del derecho a la información. La APM, a través de las redes sociales, había sido requerida para que se manifestara contra las trabas que, especialmente el día 29 de septiembre, se pusieron a los medios por parte de la Policía. Una vez investigadas las informaciones, que le han llegado por diversos canales, su Junta Directiva condena las agresiones a periodistas y rechaza cualquier restricción al ejercicio de la profesión.

La asociación insta al Ministerio del Interior y a la Delegación de Gobierno "a que eliminen las barreras al ejercicio del periodismo, faciliten el trabajo a los periodistas, garanticen su seguridad, habilitando si fuera necesario espacios en los que puedan desarrollar su tarea sin problemas, y respeten sus acreditaciones".  La asociación recomienda a los periodistas llevar, para mayor seguridad, chalecos que les identifiquen como prensa.

A pesar de los días transcurridos, la delegada del Gobierno, Cristina Cifuentes, no ha hecho ninguna manifestación, para justificar que no se permitiera instalar los practicables a las televisiones en la Plaza de Neptuno o que se les amenazara con sanciones si las unidades móviles no salían del  aparcamiento. Tampoco ha habido ninguna manifestación en relación con los periodistas agredidos. Este periódico se ha puesto en contacto con Delegación de Gobierno para conocer cual fue la orden concreta que se dio, en relación con la cobertura de la manifestación, y no ha conseguido ninguna respuesta.

Desde el Ayuntamiento de Madrid se nos ha informado que el operativo de seguridad de este tipo de concentraciones corresponde a la Policía Nacional, que depende de la Delegación de Gobierno y que el Ayuntamiento y la Policía Municipal colaboran con ellos. Sí les consta que se dio la orden de retirar los practicables, por motivos de orden público, pero no que se pretendiera multar a los equipos que estaban aparcados en la plaza para retransmitir la manifestación desde los techos de las unidades móviles.

Por su parte, Dardo Gómez, secretario general de la Federación de Sindicatos de Periodistas (FESP), nos ha manifestado su preocupación por las reiteradas agresiones contra periodistas en los últimos tiempos. Considera una pantomima el hecho de llevar un chaleco que les identifique. El chaleco sólo se les facilita a afiliados de distintas organizaciones y no existe un registro profesional de periodistas ni un carnet profesional, lo que deja más indefensos a los que trabajan en medios alternativos.

Gómez considera una vergüenza que sólo las organizaciones periodísticas salgan en defensa de los informadores y que desde los medios en los que trabajan no se haga una denuncia. El periodista, que ha sido enviado por un medio, representa a éste, que resulta golpeado a través de su trabajador.

La federación, con motivo de su junta ejecutiva federal, el próximo 6 de octubre, también se manifestará colegiadamente sobre las trabas que se ponen a los informadores con motivo de manifestaciones y concentraciones.