Ahora que Israel ha vuelto a bostezar sangre en Palestina, sustituyendo el “Plomo fundido” por el “Pilar defensivo” y vuelve la muerte a la franja de Gaza, puede ser un buen momento para ver en España cine del país de nunca jamás. El Cine Doré de la Filmoteca Española y la Casa Árabe acogen desde mañana hasta el 9 de diciembre la III Muestra de Cine Palestino en Madrid.
En esta ocasión el ciclo está dedicado a la ficción y se proyectan ocho largometrajes y siete cortos, entre los que hay varios estrenos de temática variada, aunque, evidentemente, en la mayor parte de ellos esté presente de alguna forma el conflicto con Israel.
Entre las películas programadas, destacan Últimos días de Jerasulén, de Tawfiq Abu Wael, presentada en el último festival de Locarno; El Último viernes, de Yahya Alabdallah, estrenada en San Sebastián; o dos premiadas en su día en Cannes: Amerrika (2009), de Cherien Dabis, e Intervención Divina (2002), de Elia Suleiman, del que hace poco hablamos aquí a propósito de su intervención en 7 Dias en La Habana.
El ciclo, que coincide con el Día de la Solidaridad con el Pueblo Palestino que estableció la ONU el 29 de noviembre de 1977 , ha supuesto la proyección en España en anteriores ediciones de casi un centenar de películas de un cine con muchas dificultades que se abre camino a través de coproducciones y que no quiere perder su identidad.
En la muestra colaboran la Asociación Handala –dedicada la promoción de la cultura palestina a través del audiovisual-, la Filmoteca Española y la Casa Árabe, entre otras entidades, y supone la mayor exhibición de cine palestino en el mundo hispanohablante y una oportunidad para conocer un cine y una cultura trufados de tópicos, intereses y maledicencias.
Para terminar, y aprovechando la terrible ocasión de la guerra en Gaza -cuando se escribe este post se esboza una tímida tregua-, permítanme que suba un breve vídeo que considero interesante porque creo que resume algunas de las paradojas, contradicciones y tópicos alrededor del conflicto Palestino-Israelí. Es una interpelación de una joven al politólogo Norman Finkelstein al final de una conferencia.
¿Hay peli de Hamas y sus cohetes?