José Luis Cuerda en 10 de sus mejores escenas

  • El director de cine José Luis Cuerda falleció a los 72 años. Autor de películas como ‘Amanece que no es poco’ o ‘Los girasoles ciegos’, su legado ha dejado huella
  • Le recordamos con una selección de algunos de sus mejores diálogos, escenas o momentos

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“Todos somos contingentes, tú eres necesario”. Miles de personas se acordaron ayer de esa frase mítica. El director de cine José Luis Cuerda (Albacete, 1947) falleció ayer a los 72 años. Autor de películas tan dispares como El bosque animado o Los girasoles ciegos, su legado ha dejado huella en varias generaciones de seguidores y profesionales. Su Amanece que no es poco se ha ido convirtiendo a lo largo de los años en referencia de culto. Cuerda ha sido el padre del humor surrealista y costumbrista. Y fue también el padre profesional de Alejandro Amenábar produciendo sus primeros filmes.
Es una osadía escribir algo sobre Cuerda en estos momentos. Se fue pero, como se suele decir, nos queda su obra. Por ello, le recordamos con una selección de algunos de sus mejores diálogos, escenas o momentos. Y es inevitable mencionar, en primer lugar, unas frases de Amanece que no es Poco: “Se me está muriendo divinamente (…) Qué irse, qué apagarse, con qué parsimonia”. Así se ha ido Cuerda.

Los exiliados de la política

De la mencionada Amanece que no es poco se puede hacer hasta una tesis doctoral analizando todas y cada de una de sus escenas y diálogos. Todo es aprovechable en el universo que Cuerda creó en los pueblos albaceteños de Molinicos o Ayna. No es fácil quedarse con solo unos pocos momentos y cada persona tiene sus favoritos. Quizás esta escena sea uno de ellos. Los sudamericanos que unos días van en bici y otros huelen bien, dicen en el pueblo. Y la conversación de los guardias civiles ahonda en el tema: “Peor sería que levitasen, como en Ayna (…) allí los exiliados de la política levitaban unos 15 palmos del suelo”. “Pues eso tiene peligro porque pueden caerte encima si se les escacharrase la levitación”. “O cagarte como los pájaros, que ya ha pasado alguna vez”.

La tabarra que me estás dando

La taberna. El tabernero hablando de amor. Gabino Diego de estudiante americano. “Habla usted un pijo de bien”, le dice. Y mientras, el médico sigue escuchando al tabernero, que le habla de poemas de Pedro Salinas o Kavafis. “Me cago en todos tus muertos Tirso. Me cago en todos tus muertos uno a uno. La tabarra que me estás dando, virgen santísima. Pero yo, ¿qué te he hecho a ti, vamos a ver?”. Cualquier seguidor de la película habrá utilizado estas últimas frases alguna vez en la vida real.

Faulkner

Memorable monólogo de José Sazatornill, “Saza”, en alabanza al escritor William Faulkner. “Y ahora, para rematar, me dicen estos amigos que ha escrito usted 'Luz de agosto', la novela de Faulkner, ¡de William Faulkner! y ¿no podía usted haber plagiado a otro? ¿es que no sabe que en este pueblo es verdadera devoción lo que hay por Faulkner?”. No se necesitan muchos más comentarios.

El alcalde

Sin duda alguna es una de las partes más conocidas de la película. Ese recibimiento del pueblo a su alcalde, con el coro de niños de fondo, quedará para la historia. “Viva el munícipe por antonomasia” (…) Queremos que la muchacha sea comunal (…) alcalde, todos somos contingentes pero tú eres necesario”.

El bosque animado

La única película por la que Cuerda ganó un Premio Goya (Mejor película en 1988). Nos dejó actuaciones para el recuerdo como las de Manuel Alexandre o Alfredo Landa en este intento de asalto fallido. “¿Qué haces con la cara llena de barro, es que te has caído?”. ¿Cómo que qué hago? Hago de ladrón”. (…) ¿Qué bandido seria si yo empezara a hacer rebajas?”.

El apocalipsis

Siete años después de Amanece que no es poco, Cuerda realizó Así en el cielo como en la tierra. No es tan conocida en la actualidad como la anterior pero bebe de su espíritu. Y también sale Luis Ciges, intentando entrar a un cielo custodiado por un San Pedro encarnado en Paco Rabal. “Vengo porque el apocalipsis me ha pillado (…) yo estaba borracho cuando escuché en mis adentros….el apocalipsis! Y como ya no tenía un duro para seguir bebiendo, me dejé llevar”.

Total

Más desconocida aún es una de sus primeras películas, Total. En esta surrealista obra, precursora de Amanece que no es poco, nos encontramos, entre otras cosas, a Agustín González contándonos como pastor el fin del mundo. “Hace tres días fue el fin del mundo (…) la verdad es que fue un momento un trago espantoso. Aunque si quieren que les diga la verdad a mi no me pilló de sorpresa”.

La libertad y los maestros

Cuerda también se puso serio en más de una ocasión. Una de las más memorables fue para la adaptación de la obra del escritor Manuel Rivas. En La lengua de las mariposas nos encontramos este legendario alegato de Gregorio, un maestro protagonizado por Fernando Fernán Gómez. De plena actualidad. “En el otoño de mi vida yo debería ser un escéptico y en cierto modo lo soy, el lobo nunca dormirá en la misma cama con el cordero, pero de algo estoy seguro, si conseguimos que una generación, ¡una sola generación! crezca libre en España, ¡ya nunca nadie les podrá arrancar la libertad!, ¡nadie les podrá robar ese tesoro!”.

Tiempo después

Su última película es posible que se convierta en una obra de culto cuando pasen los años. Igual que le pasó a Amanece que no es poco. Estrenada en 2018 gracias al empeño de un grupo de cómicos, la película es un constante goteo del universo Cuerda. Y con una carga política importante. Un ejemplo, esta escena con la presencia de Roberto Álamo, Carlos Areces y Manolo Solo. “No puedes vender porque te desnaturalizas completamente, luego dejas de ser parado y sufres una tremenda merma ontológica”.

 

Los girasoles ciegos

Con esta película Cuerda se metió de lleno en la persecución ideológica durante el franquismo. Un drama con la participación de Javier Cámara, Maribel Verdú o Raúl Arévalo. Inolvidable el grito de “es mi padre, hijo de puta”, en una de las escenas claves. (Alerta: si no la has visto, te recomendamos no ver esta escena)

Bonus: el inspirador de lo chanante

Para terminar, es de rigor mencionar su tremenda influencia, nunca ocultada, de Cuerda sobre otros cómicos. Especialmente lo hizo sobre otros albaceteños ilustres: Joaquín Reyes, Ernesto Sevilla o Raúl Cimas. Con La Hora Chanante, Muchachada Nui y otros proyectos rompieron moldes y en cierto modo volvieron a relanzar el universo Cuerda. Muchos ejemplos hay en la obra de los “chanantes” sobre la influencia del fallecido director. Nos vamos a quedar con un cariñoso homenaje que le realizó Reyes en una de sus secciones más famosas: “Testimonios”. Aunque Cuerda en ese momento fue un “mini testimonio”. “Las dos primeras sí, las otras ya no”, dice sobre la producción de Tesis y Abre los Ojos, de Amenábar. “Cómo le da la vuelta a todo el tío”.

(podéis verlo a partir del minuto 23)

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