Por qué 2017 será el año de las retransmisiones en directo
Al repasar las principales novedades lanzadas por las redes sociales durante el año que acaba de finalizar llama la atención el giro que la mayor parte de ellas ha dado en cuanto a su estrategia de contenidos, pasando de potenciar el contenido en vídeo –tendencia en los últimos ejercicios- a apostar por que los usuarios se lancen a la emisión de imágenes en directo a través de las distintas plataformas.
Se trata de una evolución lógica, que ha supuesto que en 2016 redes sociales como Facebook, Instagram e incluso Twitter tomaran el testigo de la innovación que supuso Periscope, creado en 2015. Fue tal la revolución lograda por esta aplicación, que llegó a sumar 10 millones de usuarios tres meses después de ser lanzada, que ninguna plataforma se quiso quedar atrás, haciendo de la emisión de contenidos en vídeo uno de sus principales retos para el pasado año.
Facebook lanzó Live, su funcionalidad para realizar emisiones en directo, primero restringiéndola sólo para usuarios registrados, pero posteriormente convirtiéndola en universal. A lo largo de 2016 hemos visto cómo la ha dotado de numerosas mejoras, como la posibilidad de interactuar entre usuarios, la inclusión de stickers, la función de emisión en privado y la creación de un mapa interactivo para ubicar las retransmisiones, entre otras.
Instagram, por su parte, permite desde hace unas semanas realizar emisiones de vídeo en directo desde Instagram Stories, su funcionalidad de contenidos efímeros. Las retransmisiones desaparecen tan pronto como dejan de producirse, pero constituyen una forma nueva de comunicación que habrá que aprender a aprovechar en los próximos meses y cuyo uso, sin duda, se generalizará. No en vano Instagram, que acaba de superar los 600 millones de usuarios activos en el mundo, ya se ha convertido en la segunda plataforma social más utilizada en el mundo.
Twitter ha sido la última en apuntarse a la carrera por la retransmisión en vivo. Resulta extraño que no lo hiciera antes, pues la red de microblogging contaba con Periscope dentro de su catálogo de compañías adquiridas. Ahora la integración con esta plataforma es total e incluso se ha anunciado la posibilidad de emitir vídeo en 360 grados en directo en los próximos meses.
Esa será una de las mejoras que está por llegar, pero no será la única. De hecho, la revolución de los contenidos en directo no ha hecho más que comenzar y a lo largo de 2017 asistiremos a un auténtico boom en cuanto a funcionalidades y en cuanto a desarrollos y aplicaciones tanto para los usuarios corrientes como para empresas e instituciones con presencia en redes sociales.
El 91% de los teléfonos que se venden en España ya incorpora conexión a Internet. La capacidad de retransmitir en directo desde el móvil con sólo apretar un botón se generalizará y estará a disposición de más de 9 de cada 10 usuarios de un teléfono móvil, que podrán hacer uso de este nuevo modo de comunicación con las personas que les siguen en las redes sociales gracias a la popularización de las redes móviles de alta velocidad (LTE-4G).
Para las empresas, la retransmisión de vídeo en directo supondrá, además de un nuevo canal de atención al cliente y a potenciales clientes, a los que les podrán realizar demostraciones de producto o compartir el testimonio de un experto en directo, una vía de oro para lograr más interacciones con sus usuarios. El vídeo en directo aumenta el número de “me gusta” y de comentarios hasta en un 50% en comparación con otros contenidos audiovisuales que puedan compartirse en redes sociales.
No sólo las empresas podrán beneficiarse de estas nuevas vías de comunicación, sino también medios de comunicación y políticos, entre otros colectivos, que encontrarán formas de hablarle a su audiencia de manera directa en estas herramientas de fácil uso que, además, favorecen la viralización de los mensajes y que su alcance y difusión crezca considerablemente.
El reto estará este año en saber aprovechar estas nuevas herramientas y sacarles el máximo partido integrando las retransmisiones en las estrategias de comunicación para lograr interacción y conversión. Lo difícil será hacerlo sin caer en errores “de principiante” como descuidar la calidad del mensaje o la relevancia de la transmisión.
Sólo aquellas emisiones frescas, en directo, que permitan a los usuarios “ver la realidad con los ojos de otra persona” lograrán captar la atención de la audiencia. Tratar de ofrecer contenidos demasiado promocionales, forzados o que no reflejen con naturalidad la realidad de la compañía –o del personaje popular- sólo llevará a que los usuarios terminen por ignorar las retransmisiones en directo de ese usuario que no las utiliza de manera planificada ni con sentido común.
El hecho de que ahora tengamos en la palma de nuestra mano muchas herramientas para realizar emisiones en directo y que posiblemente este tipo de contenidos se generalicen a lo largo del nuevo año tampoco quiere decir que haya que emitir en todo momento y desde cualquier lugar.
Otro grave error que habrá que evitar a lo largo de 2017 será el del exceso de contenidos. No todas las marcas necesitarán realizar retransmisiones en directo constantemente y habrá muchas que las lleven a cabo incluso cuando no tengan nada importante que decir a su audiencia potencial, errando considerablemente su estrategia de comunicación. Si es que la tienen, claro, pues uno de los principales fallos que cometen las pequeñas y medianas empresas que se lanzan a comunicar a través de las redes sociales es la falta de planificación en base a unos objetivos marcados.
