Tania Sánchez: “Si IU hubiera hecho primarias en las europeas, a lo mejor no existiría Podemos”

Ha sido una de las protagonistas políticas de este año 2014 dentro de la izquierda madrileña y también estatal. Sus apariciones en medios de comunicación masivos, su candidatura para representar a IU en la Comunidad de Madrid y, por qué no decirlo, su vida personal, han hecho que la diputada regional Tania Sánchez (Madrid, 1979) esté cada vez más bajo la mirada pública. Cuartopoder.es ha entrevistado a Sánchez en dos ocasiones durante los últimos 6 meses. Hoy, al comenzar 2015, vuelve a atendernos en una cafetería del centro de Madrid. Repasamos lo ocurrido el pasado año, las expectativas para el próximo y algunos temas de actualidad.

— ¿Qué balance político hace del año 2014? ¿Con qué se queda? ¿Qué ha sido lo mejor y qué lo peor?

— La palabra que define este año es intenso. Creo que lo mejor ha sido el proceso de primarias de IUCM, que han abierto una puerta política muy importante para Madrid y una alternativa al PP muy potente. Lo peor fue la noche de las elecciones europeas, ese sabor agridulce que se quedó. Fue una mezcla de todo, yo sobre todo quería que Javier Couso fuera eurodiputado más que nada. Todo esto desde el punto de vista de la organización. Desde el punto de vista más de la política en general o de la gente, creo que el año empezó con una enorme alegría con la dimisión de Lasquetty (exconsejero de Sanidad) y se ha cerrado con una cosa absolutamente lamentable como son los enfermos de hepatitis C muriendo porque no se les da una medicación.

— ¿Y cómo ha sido el año en lo personal? ¿Está satisfecha con el trabajo hecho?

Sí, estoy contenta. Está más cerca que nunca cambiar el país y eso es motivo de alegría. El cambio que viene es imparable. Llevábamos desde hace varios años planteando la necesidad de un cambio profundo y creo que está más cerca que nunca. En términos generales, con la situación que vive el país es muy difícil decir que uno está contento, pero el nivel de implicación de la gente, de respuesta política, de movilización, etc, hace que crea que estamos en el buen camino.

— ¿Qué expectativas tiene para 2015 tanto en el ámbito madrileño, con las elecciones de mayo, como en el ámbito estatal?

"El cambio político en Madrid será el primer paso del cambio en todo el país"

— 2014 cierra un ciclo político y 2015 abre uno nuevo para todo el país. Va a acabar con la hegemonía del PP en Madrid. Eso va a suponer un cambio radical para la gente que vive en la región y la ciudad. Ese será un primer paso para el cambio en todo el país. Por lo tanto creo que será el inicio de una nueva época política llena de ilusiones y esperanza.

— ¿Qué papel jugará IU en este cambio?

— Vamos a ser parte del cambio histórico sí o sí. Eso no lo para nadie. En el proceso de primarias se ha visto que hay una mayoría de militantes y simpatizantes que quieren converger con otros, participar en el proceso de cambio y que no quieren que se celebre una fiesta y sus papás no les dejen ir. Nosotros vamos a ir a la fiesta.

— ¿Cómo se va a ir a esa fiesta? En agosto decía en una entrevista con este medio que no se puede cambiar Madrid sin cambiar también la Comunidad. Todavía no está claro que se forme un proceso de convergencia como Ganemos en la Comunidad. ¿Va a impulsarlo IU? ¿Qué se va a hacer?

— El proceso no puede ser similar, porque Ganemos tiene una filosofía de construcción desde abajo. Es evidente que ni los activistas vinculados a Ganemos ni los tiempos permitirían que el Ganemos autonómico sea una suma de los Ganemos territoriales. Pero yo creo que todo el mundo ha expresado que es una necesidad que haya un espacio de confluencia a nivel autonómico que sea un correlato de lo que quiere ser Ganemos Madrid para el Ayuntamiento. Hay que hacer un esfuerzo para que los que tenemos una estructura seamos capaces de impulsarlo con otros. Ahora empieza un agenda maratoniana para conseguir eso. Desde luego IU ha dicho que los Ganemos son una buena herramienta. No tengo duda que lo impulsaremos también para la Comunidad.

— Podemos ha decidido presentarse a las elecciones autonómicas con su marca y en solitario. Con las encuestas como están, ¿le da algo de respeto o miedo tener que competir con ellos en las elecciones? ¿Es posible que puedan confluir aún?

— Para el año 2015 a lo único que le tengo miedo es a que vuelva a ganar el PP. Si todos compartimos ese miedo, creo que hay que llegar con los procesos electorales que garanticen una alternativa al PP. Si hay alternativas al PP con programas comunes o elementos similares, nadie entendería que alguien se empeñara en llevar su propia marca. Impulsaremos proyectos de convergencia y lo que hagan otras organizaciones políticas lo tendrán que decidir ellas. Pero hablaremos con todas las fuerzas.

— La situación de IUCM tras las primarias sigue estancada y vuestro sector ha realizado una serie de reivindicaciones. ¿Cuáles son los próximos pasos a seguir? ¿Qué más se puede hacer si no se cumplen las exigencias de IU a nivel federal?

— Hay tres elementos que no hay que mezclar. Uno es el cumplimiento de una resolución federal. No es interpretable. Cuando alguien ha teorizado su interpretación, ha habido dirigentes federales que han expresado públicamente que la resolución dice lo que dice. Que hay una responsabilidad política vinculada a todo el entramado de CajaMadrid por el que se tienen que asumir responsabilidades. Y que la forma en que eso se exprese debe ser dejando las portavocías. Si unos señores no cumplen lo que dice su dirección, se tendrán que entender con la dirección federal. El segundo tema es el de la Ejecutiva regional. No es que nosotros digamos que no tiene legitimidad por las primarias, sino que es un órgano que propone un coordinador general, que ahora ha dimitido. Que dimita un coordinador cinco meses antes de unas elecciones es una situación política que hay que resolver. Proponemos un espacio compartido que responda a la lógica de la tarea que hay que hacer estos meses: campaña de los candidatos, proceso de convergencia política y llegar en las mejores condiciones para garantizar la estabilidad de la organización. Esto no lo puede hacer una Ejecutiva de un coordinador dimitido. Por último, el asunto de las primarias. Se hizo un eje de discusión entre candidaturas que defendían la convergencia política como eje fundamental en todo el proceso y otras candidaturas que decidieron envolverse en las siglas. Ha ganado una posición, por lo que los siguientes pasos son trabajar para que se produzca esta convergencia, para que Ganemos sea un éxito y para que quienes estén en esos espacios sean los que ha decidido la militancia y simpatizantes. Lo que vamos a hacer es seguir haciendo política sin esperar a que ningún órgano decrete no sabemos muy bien qué. Vamos a evitar que quienes no asumen un resultado secuestren la voluntad de los simpatizantes y militantes.

— Raquel López señaló en este medio que no entendía las prisas porque fueras ratificada como candidata. Además acusaban a vuestro sector de ser los que habían impedido la celebración de la última Presidencia Regional. ¿Están las posiciones tan tensionadas y enfrentadas como parece por las declaraciones de unos y otros?

"No nos vamos a entretener en dimes y diretes de pasillo, de tertulianos, de editoriales..."

— Nosotros tenemos como objetivo recuperar Madrid para la gente. Ese va a ser el eje sobre el que vamos a trabajar. No nos vamos a entretener en dimes y diretes de pasillo, de tertulianos, de editoriales, etc. Vamos a hacer política hacia afuera e identificar los problemas de la gente para construir alternativa. La gente puede construir los relatos y los titulares que quiera, pero no tiene que ver con la verdad. No tengo ninguna prisa en que me ratifiquen ni ninguna necesidad. Creo que el resultado de las primarias es tan evidente que la ratificación es un proceso meramente burocrático. Para lo que tenemos prisa, y es por lo que no se celebró la Presidencia Regional, es para que haya una dirección política que se crea la construcción de una alternativa en Madrid que hay que hacer de la mano de militancia y simpatizantes y no desde una cúpula enrocada.

— Entiendo entonces que la actual dirección no se cree esto.

— En el proceso de campaña desde luego marcaron distancias con esta posición, que es posición de IU. No es la postura de Mauricio y mía, es de IU. Nosotros vamos a garantizar que eso sigue adelante.

— ¿Hay posibilidad de escisión?

— (Niega con la cabeza) IU no es la suma de coordinadores u órganos. IU es la suma de sus militantes en cada uno de los territorios. Han dicho que hay unos candidatos, una apuesta por la convergencia y que se incorporen los simpatizantes al proceso. Eso es IU. Si alguien considera que esto no es IU, allá ellos.

— Sobre el asunto de Rivas Vaciamadrid y la comisión de investigación quería preguntarle si toda esta situación puede perjudicarla al sembrar dudas sobre su actuación independientemente de lo que ocurra judicialmente.

— A mi en lo personal no me preocupa en absoluto. En lo político me preocupa si supone algún tipo de obstáculo para la construcción de una alternativa en Madrid. Creo que eso no está pasando. La semana antes de las primarias esto ya estaba en movimiento y el respaldo y la ratificación ha sido clara y contundente. Desde ese tiempo la cosa ha ido aclarándose más. La gente entiende que uno pueda cometer errores. Lo que no entiende es que uno se apropie de lo que no es suyo o que utilice su cargo para beneficiar a otros en contra de los intereses de la mayoría. No somos perfectos y la gente puede entender que podemos cometer errores. La mayoría de la gente lo entiende. El fenómeno de las redes o cosas así magnifica posiciones. Mucha de la gente que me insulta jamás ha pensado que soy una alternativa, ni tiene mis posiciones ni ideas.

— También hay cierto pensamiento sobre que con usted la intención es que IU se disuelva y se integre en Podemos.

— Hay dos intereses cruzados en ese relato de que algunos queremos disolver el partido. Por un lado hay un interés de los poderes fácticos del país que no quieren que se construya una alternativa. Identifican todos los proyectos alternativos al bipartidismo como locos, inviables, izquierdistas, etc. Hay una reacción de miedo. Por otra parte hay una parte nada despreciable de miembros de IU que saben que un proceso de convergencia su capacidad de control sobre diferentes elementos burocráticos es menor. Entonces están asustados. Se combinan dos intereses muy contrapuestos pero que disparan contra lo más importante para nosotros, que haya una alternativa al bipartidismo en este país.

— A diferencia de Podemos sí que reivindican el concepto “izquierda” como válido y actual. ¿Por qué?

"La izquierda para nosotros es el posicionamiento político para interpretar lo que sucede... Para otros eso no significa nada"

— La izquierda para nosotros es el posicionamiento político por el que se interpreta desde un determinado marco de posición lo que sucede y se aspira a un determinado modelo de sociedad basado en la justicia social, redistribución de la riqueza, fiscalidad justa, igualdad de género y toda una serie de valores. Esto para nosotros significa mucho. Para otros no significa nada. Lo importante no es la palabra, ni el significado, ni el significante. Lo importante es ser capaces de construir una mayoría social en torno a esas ideas fuerza.

— Pero viéndolo en perspectiva y a tenor del panorama político, ¿ha podido perjudicarles esa etiqueta de alguna forma? ¿O qué es lo que ha hecho frenarse a IU?

— En Madrid hubo gente que con unas primarias pensaba que se apuntarían 100 o 200 personas. Ha habido 8.000 simpatizantes participando. Eso es lo que nos ha frenado, no entender que es momento de protagonismo de la gente, de abrir puertas y ventanas. IU llevaba teorizando en sus documentos ya años que había un cambio de tiempo político y que había que reabrir la política a la participación de la gente. No lo hemos practicado, pero cuando lo hemos hecho ha ido bien. Si hubiésemos hecho unas primarias abiertas en las europeas a lo mejor no existiría Podemos.

— ¿Es Alberto Garzón una persona que pueda representar a IU de forma idónea en este nuevo escenario?

"Alberto Garzón es la ruptura democrática que necesita IU para ser parte de la del país"

— Sí. Hay un elemento de crisis generacional. Los protagonistas de la Transición han bloqueado la incorporación de otras personas a la vida política. Si sólo viviésemos una crisis generacional, el mero cambio de viejos por jóvenes resolvería el problema. Pero es que además vivimos una crisis económica, política, social, territorial e institucional. Es decir, vivimos una crisis de régimen. Cuando esto pasa, hay dos formas de salir de la misma, con una reforma del régimen o con una ruptura democrática. Alberto Garzón representa la ruptura democrática que necesita IU para ser parte de la del país.

— Usted es una persona que ha salido mucho en televisión, más que otros dirigentes de IU. Hay quien puede rechazar ese tipo de presencia en medios de comunicación masivos ¿Cómo ha influido eso en su carrera política?

— Es imposible hacer política sin dialogar. Y en el siglo XXI es muy difícil llegar a masas sin pasar por los grandes medios. No encuentro una forma para llegar a un número suficiente de gente para construir una alternativa de mayorías en Madrid sino es utilizando la televisión como herramienta. Estar en la TV significa estar expuesto. Y uno corre riesgos.

— ¿Por qué IU no había estado tanto en las grandes televisiones como hasta ahora? ¿Son los grandes empresarios los que se lo plantean o la propia IU?

— Hay dos ejes. Primero, asumir desde determinadas personas que esto es una herramienta política que no desmerece y que no genera una contradicción ideológica de ningún tipo formar parte de ello. Es una herramienta. Hay que asumir que eso es útil para tu proyecto político. Hay mucha gente en IU que no compartía esto y que no creía que tenía que ir a las televisiones más que a los debates. Hay un cambio que genera también que resultemos más interesantes. Luego hay una realidad, en el momento de la crisis política hay más gente interesada en tener relatos alternativos, múltiples y dispares de lo que le pasa al país.

— Sobre la línea programática que defiende IU en Madrid, siempre ha insistido en que lo más importante es revertir los procesos privatizadores. ¿Se puede hacer?

— La eficiencia de las empresas privadas es un mantra que parece una verdad y no lo es. En el Ayuntamiento de Madrid hay una pelea entre dos empresas por el servicio de basuras. Ya ha provocado una huelga de barrenderos. El coste de la basura en Madrid son 59 euros al día. En Rivas hay una empresa pública que gestiona todos estos servicios. Cuesta 20 euros al día, nunca ha habido una huelga y las condiciones son dignas. Es falso que lo privado sea más eficiente. Por ello, lo lógico en un momento en el que tienes menos dinero es que elimines la parte de quien se está llevando un dinero por algo que puedes hacer tú de manera directa. Igual que hubo una voluntad política de vender determinadas cosas, como la funeraria de Madrid que se vendió por un euro, las decisiones a la inversa se pueden tomar de la misma forma. No va a bastar sólo con un gobierno con voluntad, sino que va a tener que haber respaldo ciudadano.