Dirigentes de Podemos reprocharán a Iglesias su forma de gestionar la crisis

Podemos celebra el sábado el primer Consejo Ciudadano estatal tras la destitución de Sergio Pascual como secretario de organización. En este encuentro los miembros de la dirección del partido deberán ratificar la propuesta realizada por el secretario general, Pablo Iglesias, para que Pablo Echenique asuma las funciones que realizaba Pascual. En principio, salvo sorpresa mayúscula, el diputado aragonés será apoyado con un amplio consenso interno según las diferentes fuentes consultadas por cuartopoder.es. Pero varios dirigentes, sobre todo los más afines al secretario político, Íñigo Errejón, criticarán tanto las formas utilizadas por Iglesias al cesar a Pascual como la propia decisión en sí, según varias fuentes consultadas. Una posición que el propio Errejón ya destacó el martes en su primera aparición pública tras varios días de silencio mediático. En cualquier caso, las mismas fuentes destacan que el debate profundo sobre el modelo de partido no debe producirse en estos momentos sino cuando se aclare la situación de gobernabilidad, ya sea con una investidura o con unas nuevas elecciones. “Es la hora de la lealtad”, resumen fuentes próximas a Errejón.

Los estatutos de Podemos aprobados en la Asamblea de Vistalegre fijan los poderes especiales del secretario general para que sea él mismo el que pueda nombrar o cesar a personas con cargos en el Consejo de Coordinación. Un modelo que además defendieron y ayudaron a crear tanto Iglesias como Errejón. Es por eso por lo que algunos dirigentes con más afinidad a Iglesias consideran que las críticas pueden ser legítimas pero no tener mucho más recorrido que mostrar un malestar patente en varios consejeros. “No hay unanimidad respecto a que la decisión tomada fuera la correcta. Eso es más que evidente y así lo dejó claro públicamente Errejón”, afirma un dirigente. De todos modos, desde las diferentes fuentes consultadas se insiste en la idea de que a pesar de estas discrepancias puntuales, el partido debe salir reforzado de la reunión del sábado.

Así mismo insisten desde todas las posiciones que las posturas políticas son bastante similares y que hay una coincidencia en la propuesta sobre la investidura del PSOE. Nadie plantea una hipotética abstención para dejar gobernar a los socialistas. El estado de las negociaciones con el PSOE será otro de los puntos troncales a nivel político en la reunión del sábado. Las diferencias, más allá de la decisión puntual de achacar o no responsabilidades a Pascual, se basan más en una cuestión de “tácticas y estilos que siempre han estado ahí” y no son nuevas, según las fuentes consultadas.

Por otra parte, Errejón ya ha ido avanzando la necesidad de dar el paso para que Podemos se encamine más a convertirse en un partido-movimiento popular y traspasar la concepción actual de “maquinaria de guerra electoral”. Un punto en el que también los más afines a Iglesias coinciden plenamente y recuerdan que fue el propio Errejón uno de los más firmes defensores de esas teorías. En cualquier caso, este cambio de concepto además ya fue anticipado por él mismo en la Universidad de Verano realizada por Podemos. El secretario político de Podemos ya ha puesto además sobre la mesa un aspecto concreto que defenderá y sobre el que las fuentes consultadas también creen que habrá coincidencia generalizada. Es la “federalidad” del partido. Es decir, dar mayor protagonismo a la “plurinacionalidad” de Podemos y los territorios reduciendo el papel de la dirección estatal. Curiosamente esta apuesta más federal ha sido también una de las reivindicaciones más utilizadas por corrientes como la de Anticapitalistas.