La Atención Primaria en Madrid, esencial para pasar a fase 1 pero con “un déficit estructural”

La región de Madrid sigue sin haber pasado a la fase 1 en la desescalada de la crisis de la covid-19, como la zona metropolitana de Barcelona y parte de Castilla y León. Los argumentos por los que el Gobierno central impidió su cambio de fase fueron la necesidad de “consolidar” la Atención Primaria y la ampliación de las pruebas PCR. Desde la Atención Primaria de la Comunidad llevan años denunciando un “déficit estructural” en personal sanitario, que antes de la pandemia ya se traducía en una saturación de pacientes: Madrid es una de las comunidades con mayor número de tarjetas sanitarias asignadas por profesional de los centros de salud. Ahora estos sanitarios vuelven a recordar su papel esencial.

Durante el pico de contagios por la covid-19, cerraron varios centros de salud porque su personal fue derivado a Ifema o a las residencias de ancianos. De hecho, decenas de los 400 centros de la comunidad de Madrid todavía permanecen cerrados. Los profesionales de Atención de Madrid ya advirtieron que su labor era esencial para frenar los contagios. “Somos clave porque estamos a pie de calle, porque diagnosticamos precozmente a la gente antes de que vaya al hospital, antes de que el virus se propague. Tenemos conocimiento de la comunidad y de medicina preventiva”, explica Eduardo Olano, médico de la plataforma que agrupa a profesionales del sector 'AP se Mueve'.

Solo para equiparse al ratio de pacientes por médico de otras comunidades autónomas antes de la covid-19, la Comunidad de Madrid necesitaría 400 médicos de familia y 150 pediatras más, indican desde la agrupación. “La Atención Primaria está infrapresupuestada desde hace tiempo”, añade Mar Nogerol, médica en el centro Cuzco de Fuenlabrada y portavoz también de 'AP se mueve'. La región madrileña es la comunidad autónoma que menos gasta en Atención Primaria por habitante. Este gasto se ha situado entre el 10% y el 11% en los últimos años frente a la media nacional, según la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP).

Un “esfuerzo titánico” y muchos contagios con la covid-19

Antes de la covid-19, la plantilla ya se quedaba corta y daba para dedicarle entre 4 y 7 minutos a cada paciente, a un ritmo vertiginoso. Pero estos meses las jornadas se han vuelto “maratonianas”, resume Olano. “Se requiere tiempo por paciente. Hay gente que está con ansiedad, que le da miedo de salir de casa. Necesitan hablar y que les expliques”, indica Olano para explicar esa labor social y de cercanía con el paciente que implica la Atención Primaria.

El esfuerzo que se ha hecho estos días ha sido “titánico” y los profesionales han llevado “un gran peso sobre sus espaldas”, resume Nogerol. El personal médico y de enfermería de los centros de salud ha seguido la transmisión comunitaria, con visitas domiciliarias, y los casos de los pacientes con neumonía, antes de derivarlos hospital y después de darles el alta de urgencias. También los pediatras reivindican su papel. La Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap) recuerda la importancia de su atención a niños y adolescentes, algo que “seguirá siendo aún si cabe más esencial en los próximos meses de cara al otoño”.

Mientras tanto, estos profesionales han venido denunciando su desprotección en Madrid. La mayoría de los sanitarios fallecidos por covid-19 en la región son profesionales de la Atención Primaria, en primera línea de fuego. La denuncia por la falta de Equipos de Protección Individual (EPI), que han tenido que reutilizar a menudo, o la ausencia de test fiables para los propios profesionales ha sido señalado por sindicatos como la Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid (AMYTS). “Los test más fiables, por extracción de sangre vía venosa, se han realizado a los profesionales de los hospitales, mientras a los centros de salud han llegado los test de dedo, que son mucho menos precisos”, denuncia Alicia Martín, presidenta de AP del sindicato.

Más recursos a Atención Primaria para poder pasar de fase

Los sanitarios de los centros de salud han vivido además días confusos: protocolos del Ministerio de Sanidad que llegan un domingo a las 23.00 de la noche tras ser adaptados por la Comunidad de Madrid y tienen que ponerse en marcha el lunes, o noticias que aparecen antes en la prensa que antes de ser comunicadas oficialmente. Por ejemplo, han surgido las dudas económicas y logísticas con el anuncio del contrato de 400 técnicos sanitarios o rastreadores que el Gobierno regional anunció el miércoles para el seguimiento de los casos. También la contratación de 648 sanitarios, cuyo anuncio temen que se quede en el aire.

Que Madrid no haya pasado de fase es consecuencia, para Isabel Díaz Ayuso, de “un choque ideológico” con el Gobierno central. Sin embargo, Martín quiere recordar que se trata de “un tema sanitario, no político”. La parálisis económica debe ser remendada, pero para ello lo primero es atender “la salud de la población” y todavía queda "un largo recorrido".

En una reunión sostenida este martes por la tarde, AMYTS ha pedido al flamante viceconsejero de Salud Pública y plan covid-19, Antonio Zapatero, recursos que subsanen el déficit de profesionales en la Atención Primaria, además de que se habilite el teletrabajo para los profesionales de los centros de salud que no pueden acudir al mismo por ser población de riesgo, algo que el sindicato tilda de “importantísimo” para descongestionar el sistema a través de atención telefónica a los pacientes.

Las impresiones de la reunión han sido positivas para AMYTS. El viceconsejero ha prometido la incorporación de 330 médicos, entre ellos los nuevos especialistas de Medicina de Familia, el refuerzo del dispositivo que rastreará los casos y dependerá de Salud Pública, la posibilidad de teletrabajo y el apoyo a los residencias. Con esas medidas de refuerzo a la Atención Primaria, si llegan a cumplirse, Martín considera que “Madrid sí estaría preparada para pasar de fase”. De momento, los refuerzos no llegan a los centros sanitarios, aunque esta semana sí fluye el suministro a los centros de salud de pruebas PCR para los pacientes sintomáticos, uno de los recursos que pedía ampliar el ministerio de Salvador Illa para que Madrid avance por fin en la desescalada.