Por qué es tan importante la foto de perfil en LinkedIn
El 80% de los responsables de Recursos Humanos reconoce que utiliza LinkedIn a la hora de buscar candidatos para sus procesos de selección y que, si recibe un currículum vitae de manera tradicional, acude a la red profesional por excelencia para confirmar la información que se le ha hecho llegar.
De la misma manera, según un estudio publicado por la Universidad Carlos III de Madrid, el 23% de los técnicos de selección asegura que ya descarta por completo la solicitud de empleo de un candidato si no tiene un perfil abierto en LinkedIn.
Pero no vale solo con estar presente en la plataforma. Es necesario hacerlo de una manera coherente y cuidada, dedicando tiempo a completar cada una de las partes de las que consta el perfil de LinkedIn y enriquecerlas con todo tipo de elementos audiovisuales que puedan justificar aquellos logros profesionales que se están comentando.
Junto a esto, también se suele recomendar participar de manera activa en los grupos de LinkedIn y lograr recomendaciones de otros profesionales que puedan hablar bien de nuestro trabajo. Sin embargo, se suele descuidar un elemento que parece mínimo pero que es fundamental a la hora de buscar una oportunidad laboral o de colaboración profesional a través de LinkedIn: la fotografía de perfil.
En realidad, esta pequeña imagen es el primer escaparate que se presenta a los ojos de un posible empleador, y seleccionarla de la mejor manera posible aumenta exponencialmente las posibilidades de tener un primer contacto o una posible oferta de trabajo. De hecho, las cuentas que poseen una buena fotografía de perfil multiplican por siete las posibilidades de ser visitadas por otros usuarios.
A la hora de seleccionar la foto de perfil de LinkedIn más adecuada hay que tener en cuenta una serie de recomendaciones:
- Calidad. Es importante que la imagen que se seleccione no se vea borrosa o tenga una calidad que no sea idónea. Se debe tener en cuenta que el tamaño estándar de la fotografía será sólo de 150 x 150 píxeles, pero es posible que un seleccionador pulse sobre ella para verla a más tamaño. Entonces se mostrará a 500 x 500 píxeles, por lo que es necesario escoger una fotografía con resolución suficiente como para no perder calidad en estas situaciones.
- Enfoque. Debe ser una imagen que transmita una sensación de profesionalidad, por lo que se recomiendan fotos tamaño carnet, en primer plano, centradas en la cara del candidato. Lo más recomendable es mostrar también ligeramente cuello y hombros, pero no pasar a medio cuerpo o una fotografía de cuerpo entero.
- Fondo. Lo importante es destacar tu perfil, por lo que elige un fondo neutro para tu fotografía, sin colores llamativos o partes de un paisaje. Tampoco aparezcas acompañado en la imagen –ni siquiera de tu mascota– y piensa siempre que debes proporcionar una apariencia tan profesional como la que querrías dar en una entrevista de trabajo presencial.
- Vestuario. Vístete de la misma manera que irías a una entrevista de trabajo, respetando las peculiaridades de tu profesión. Por ejemplo, un profesional de la fontanería no necesita vestir de traje y corbata en su perfil de LinkedIn. Pero sí que hay que cuidar la apariencia profesional y los pequeños detalles de una vestimenta formal. Elige colores que te favorezcan pero que no sean muy llamativos. En el caso de las mujeres, se recomienda no usar excesivo maquillaje.
- Actualización. Aunque parece obvio, la fotografía de perfil en LinkedIn debe estar lo más actualizada posible. Debe ser una imagen tomada recientemente, ya que para un responsable de recursos humanos no hay peor sensación que la de conocer a una persona que no tiene nada que ver con la imagen que muestra en la red social.
