
El secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, sabe que cualquier posibilidad de hacer variar el rumbo de la política del Gobierno pasa por conseguir que la huelga general del próximo 14 de noviembre sea un éxito rotundo, y está convencido de que así será, entre otras cosas, por la implicación de la sociedad civil en el convocatoria.
- Si la huelga general es un éxito, ¿qué escenario contempla para el día siguiente?
- La vuelta al sentido común, al diálogo y a la negociación. Un punto y aparte para iniciar un nuevo rumbo que sitúe el empleo en el centro de la política económica.
- ¿Y si el Gobierno no rectifica, qué van a hacer los sindicatos?
- Sabe el Gobierno que de persistir por el camino del dogmatismo antidéficit, la desinversión y la destrucción de empleo, el movimiento sindical mantendrá abierto el conflicto y activará un nuevo programa de movilizaciones contra las políticas antisociales del Ejecutivo. Una movilización sostenida que se articulará en convergencia con otras organizaciones sociales, culturales y profesionales a través de la Cumbre Social, y que no olvidemos, tiene en la campaña por la exigencia de un referéndum una tarea muy importante, porque no se puede concurrir a las elecciones con un programa y gobernar con otro.
- ¿Qué importancia le da al carácter de protesta civil que han querido imprimir esta vez a la movilización? ¿Qué esperan en este sentido?
- Es la propia naturaleza de la acción del Gobierno –una inmensa mayoría de la sociedad sufre sus políticas- la que conduce a ensanchar el territorio de la respuesta social. Y cuando las decisiones del Ejecutivo afectan a la población asalariada, a las personas en paro, a los pensionistas, a los jóvenes, a las mujeres, a la inmigración, a la economía social, a las pymes, a las familias, la movilización debe entenderse como una tarea común de toda la ciudadanía. Por eso hemos querido impulsar un marco unitario de actuación, respetando la singularidad de cada uno. De todo ello, esperamos una huelga general con mayor complicidad de la sociedad civil y unas manifestaciones al finalizar la jornada de huelga que serán el mejor catalizador de esta convergencia, con millones de personas en las calles.
- ¿Cómo valora la dimensión internacional de las huelgas y protestas del 14N?
- Un hito en la historia del movimiento sindical europeo. Queda mucho camino por recorrer, pero la Jornada de Acción y Solidaridad del 14N, con manifestaciones en toda Europa, que en Portugal, España e Italia derivará en huelga general, marcará un antes y un después en la trayectoria de la Confederación Europea de Sindicatos. Es la voluntad de 60 millones de afiliados/as y la voz de millones de trabajadores y trabajadoras las que van a rechazar las políticas de austeridad, el paro y la recesión económica en medio de una crisis de la que únicamente se libran las élites económicas y financieras.
- ¿Cuál es su alternativa ante la actual situación?
- Hace falta otra política que haga compatible el equilibrio de las cuentas públicas y la reactivación económica para la creación de empleo. Otra política para cambiar el modelo productivo, dotarnos de una política industrial más sólida, con mayor inversión en I+D+i, una ambiciosa reforma fiscal que aumente los ingresos del Estado para garantizar las políticas públicas, una reforma del sistema financiero que vuelva a hacer circular el crédito, más y mejor vinculación del sistema educativo al sistema productivo y la consolidación de la protección social.
- ¿Qué valoración hace de la gestión –declaraciones incluidas- de la ministra de empleo, Fátima Báñez? ¿Hablan alguna vez con ella?
- No me gusta detenerme en la gestión de un ministerio, aunque sea el mal llamado de Empleo, pero podemos estar ante la gestión más desastrosa de cuantas personas han pasado por el cargo. Le falta amplitud de miras, un diagnóstico certero del mercado de trabajo, un mayor peso en el entramado de poder ministerial, y una mayor sensibilidad con las personas expulsadas del mercado laboral. Hablar, algo hablamos, pero lo que es dialogar y negociar, más bien poco.
La protesta será +IVA con las multas que os va a clavar la Cifuentes