Me irrita, con carácter general, ver a gente con poder manifestándose. Los ciudadanos tenemos un poder ocasional, el de votar cada cuatro años, y otro de libre uso: los actos de protesta. No tengo nada que objetar a los ciudadanos que acudieron el sábado a la manifestación de Madrid, pero considero bochornoso el papel desempeñado por el PP. En un sistema democrático la oposición dispone de un inmenso poder cotidiano: los medios recogen sus mensajes; el Parlamento debate sus propuestas; puede negociar con otros partidos: sus votos cuentan. Poder no equivale a Gobierno y a menudo olvidamos que la oposición también puede legislar, y con un gobierno en minoría, si es hábil negociando puede lograr la aprobación de leyes: ése es su poder.
Sin embargo, Dolores de Cospedal, Federico Trillo, Gallardón, Mayor Oreja, acudieron a la manifestación del sábado, como si no tuvieran otros instrumentos políticos a su alcance, lo cual no sólo desvirtúa el sentido de esa protesta, sino que devalúa la actividad parlamentaria. ¿Es que no sirven las iniciativas planteadas en el Congreso y por eso se ven obligados a manifestarse? ¿Es que no creen en la democracia representativa y sí en la asamblearia? ¿Es que el Gobierno no escucha sus quejas parlamentarias contra la complicidad del Gobierno y ETA? ¡No! Es que oficialmente no mantienen ese discurso, aunque dejan sueltos a un par de versos para que lo recuerden constantemente.
Las relaciones del PP con el Gobierno en materia antiterrorista van en sentido contrario al expresado por los manifestantes, que corearon más consignas contra Zapatero que contra ETA y sus mandados políticos. Incluso consideraría legítimo que el PP cambiara de opinión y se desvinculara del pacto antiterrorista. Lo que juzgo tramposo es quebrarlo y sostenerlo al mismo tiempo. O se cree que el Gobierno está equivocado o se cree que acierta; o se confía en el Gobierno o se desconfía; pero resulta desleal, tanto con el Gobierno como con los manifestantes, hacer las dos cosas al tiempo.
Mandar una nutrida representación a la manifestación mientras se sigue colaborando con el Gobierno resulta, sencillamente, absurdo. Y no se puede justificar asegurando que siempre están con las víctimas, pues también entre las víctimas hay quienes confían en el Gobierno y quienes no lo hacen. El sábado, claramente se manifestaron quienes repudian la política gubernamental. Tienen una posición política legítima, más o menos discutible, pero que en todo caso excluye la posición contraria.
La estrategia electoral del PP pasa por aglutinar todos los votos posibles: los más ultras y los centristas, los desengañados del PSOE y los nostálgicos de Franco. Se trata de una quimera y, con el tiempo, va revelando también el nulo valor que el PP concede al parlamento: o la calle o el Gobierno, parece ser su lema. Este doble maximalismo puede acabar convirtiéndose en la gran trampa que Rajoy se tendió a sí mismo. Cuando se quiere contentar a todos, pero no se sabe negociar con nadie, se corre el riesgo de despertar la desconfianza de todo el mundo.
Hay que diferenciar entre la lucha contra el terrorismo, y particularmente contra ETA, que exige, entre otras cosas, de la movilización ciudadana, y el intento de crear un «tea party» aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid. Los dirigentes del PP deberían ver el aprendiz de brujo.
Yo estoy tan de acuerdo con usted que me adelanté y lo dije en el anterior comentario. Esto de las algaradas callejeras del PP es una estrategia publicitaria que según gente que sabe del tema da resultado. Por ejemplo nadie tiene menos necesidad de manifestarse que los regímenes dictatoriales y en cambio son los que mas gente sacan a la calle, Plaza de Oriente, Plaza de la Revolución, Plaza Roja etc, así que alguna consecuencia electoral buena tiene que tener cuando el PP sigue erre que erre con las manifestaciones.
A su foto de Cospedal, Trillo, Gallardón y Oreja le falta la de Rosa Diez que también fue para pescar votos en el ala derecha del río revuelto. Rosa Diez esa señora que dirige el partido que usted tanto alabó la semana pasada. ¿Y que dicen los GRAMÁTICOS de todo esto? ¿sabrán los de la manifestación que la legalización de un partido depende del Supremo y que algunos jueces votaron a favor de la legalización de Sortu?
Serán jueces prevaricadores como Garzón señor Ricardo. Acaso cree que es posible que haya un solo juez en España que no tenga «hombría de bien» y no esté por la ilegalización de eso llamado «entorno de ETA», de indudable y certera precisión jurídica. Y aplicando esa misma ley ahora que sabemos que el PSOE de Rubalcaba hizo lo que hizo en el Faisán, tal vez sea el momento para ilegalizar al mismísimo PSOE. Si por mucho menos no se permite ir en la lista a ciudadanos vascos del «entorno», lo del caso Faisán hace posible la inclusión del partido de Rubalcaba en el asunto. El futuro de la alternancia política será entre PP y UPyD, el resto de partidos podrían ser ilegalizados aplicando esta hermosa ley ¿ o es que PNV;CIU, IU, etc,etc no han justificado alguna vez que HB pudiera presentarse a las elecciones?
cómo no me di cuenta de que tipo de diario digital era este…. decir qu los del PP están con las víctimas es pura ignorancia. Lo que quiere son votos, y eso q la mayoría de víctimas son afines a la derecha… a partir de aquí, cuarto poder tiene un lector menos. Para leer esto, leo el mundo, la razón, abc, o escucho la cope, o veo libertad digital o intereconomía o antena 3. Pero en internet, prefiero leer opiniones diferentes…..adios cuarto poder.
Si yo tuviera un familiar asesinado por ETA y en esa manifestación asomara la nariz cualquier politicucho al olisque del voto, le sonaría los mocos. La clase política esta desposeída de toda humanidad (los de la foto ni te cuento). Son capaces de darle la mano al diablo para conseguir el voto de los empadronados en el infierno y si no son suficientes se empadronan allí y punto.
Alejandro, hace falta tener longitud de miopía para no darse cuenta que Irene lo explica claramente, es puro oportunismo electoral. La próxima vez manda a alguien que te lo explique, si es que hay próxima.
Omar, te olvidas que Garzón ha enjaulado a muchos terroristas y de la presunción de inocencia del JUEZ, la misma presunción que gozan todos los de Correa que van en las listas del PP (se le llenó la boca a Cospedal de presunción). Tu ya le condenas. Que la derecha de toda la vida (la del pequeño de Cuelgamuros), no hay otra, dió órdenes al falso sindicato y a los infiltraos cavernícolas de la judicatura para iniciar el linchamiento del JUEZ por atreverse con GÜRTEL ( y con el acomplejao del Valle por sus crímenes de guerra). Él ha sido el primero en sentarse en el banquillo por instruir el caso, curioso. También las fuerzas y cuerpos de seguridad del estado se juegan la vida y hasta la pierden en la lucha contra el terrorismo. Son familiares, amigos y agradecidos por tan alto sacrificio profesional y personal, (según Álvarez Cascos «una camarilla de la Policía Judicial dedicada a preconstituir pruebas») los que se manifiestan y dejan que caminen a su lado personas que a la mínima insultan y humillan el trabajo y sacrificio de SUS víctimas y las instituciones que representan. Que me pellizquen.
Un saludo Irene y ánimo.
Absolutamente de acuerdo, como casi siempre. El oportunismo del PP se delata solo, pero como dice Ricardo tienen que tener claro que es más positivo que negativo electoralmente, pues ningún movimiento de ningun partido, y menos un movimiento público, es casual, todo está medido y analizado minuciosamente. Y la doble postura de la que hablas la están manteniendo en casi todo, es algo que veremos gratis cuando lleguen a Moncloa y tengan que hacer políticas similares a las de ahora, pero entonces ya se encargará la derecha mediática de alabarla y repetir una y otra vez que es distinta y muy buena aunque sea calcada.
Saludos
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