Rajoy liquida la "renta de emancipación" con la conformidad del PSOE

Casi al mismo tiempo que el socialista Alfredo Pérez Rubalcaba daba orden a José Antonio Alonso de que anunciara, entre otras iniciativas parlamentarias, una proposición de ley para establecer la “dación en pago” y liberar del resto de sus hipotecas a unas 400.000 familias embargadas por la banca y desahuciadas por los tribunales de justicia, el próximo presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, confirmaba que no renovará la famosa “renta de emancipación” de 210 euros mensuales de ayuda a los jóvenes para el alquiler de la vivienda.

Concretamente Rajoy escribió en su twitter: “A la Renta Básica de Emancipación le puso fecha de caducidad el Gobierno socialista. A nosotros nos toca gestionar su herencia”. Con esta respuesta sugiere que no renovará la ayuda. Según los cálculos del Consejo de la Juventud de España, unos 280.000 jóvenes entre 22 y 30 años se beneficiaban de esa subvención. Y aunque su derecho perviva hasta que se queden sin empleo o cumplan la edad reglamentada, la partida presupuestaria correspondiente se extinguirá definitivamente.

La noticia no es ninguna novedad, habida cuenta de que ni el PP ni el PSOE incluyeron en sus programas electorales la renovación de las ayuda al alquiler después de las elecciones del 20-N. El olvido no fue casual. El propio Consejo de la Juventud lo hizo notar y ninguno de los partidos con opción de gobierno se comprometió a mantener la ayuda. De este modo irán quedando vacíos miles de pisos a medida que los jóvenes vayan agotando el derecho y tengan que regresar a los hogares familiares. Según el Consejo de la Juventud, se requeriría un sueldo mensual de 2.250 euros para poder comprar una vivienda digna, y esa cantidad supone el 73% más de lo que percibe de media un trabajador con menos de 30 años: entre 800 y 1000 euros mensuales.

Por otra parte, desde que el Gobierno implantó la ayuda en 2008, siendo ministra de Vivienda Carme Chacón, algunas autonomías como la valenciana y la madrileña, con gobiernos del PP, se han mostrado renuentes a tramitar las solicitudes y han dilatado los plazos de tramitación por encima de lo establecido en la norma. Las revisiones de las condiciones para recibir los 210 euros han afectado a unos 100.000 solicitantes. Más de 20.000 han tenido que reintegrar alguna cantidad al perder el empleo o incumplir otros requisitos. Ahora se acabó lo que se daba, lo que se quitaba no.