Estábamos todos confundidos, y seguiríamos en nuestro error de no ser porque Rajoy nos lo acaba de explicar con meridiana claridad. Comprende uno la perplejidad del presidente, quien a los mandos del país se encuentra con que todos los demás circulan en dirección contraria como verdaderos kamikazes. Afortunadamente, ha tenido a bien ilustrarnos antes de irse al fútbol, que es una cita ineludible, y nos ha dado una lección de economía y, al mismo tiempo, otra de conducción.
Empecemos pues por el principio. Que la UE tenga que rescatar al sistema financiero más solvente del mundo con hasta 100.000 millones de euros no es una intervención ni fracaso clamoroso sino un éxito inconmensurable del Ejecutivo que, según nos explicó, “forma parte de un plan global de la economía española”. En otras palabras, que estaba previsto ya que –y esto hay que tenerlo muy claro– el Gobierno sabe lo que hay que hacer en cada momento, aunque sus acciones y declaraciones parecieran demostrar lo contrario.
Europa no facilita esta pasta a cualquiera y, por supuesto, no ha presionado a España para que la acepte. Ha sido justamente al contrario. Fue Rajoy el que presionó para que nuestros socios se rascaran el bolsillo porque, como sabe todo el mundo que ha tratado de pedir un crédito para los alicatados de baño, “no es tan fácil de conseguir” una cantidad semejante en condiciones tan ventajosas. Y no piensen que la cifra de 100.000 millones es caprichosa sino una petición expresa española. Europa come de nuesta mano.
No se trata, por tanto, de una llamada de auxilio atendida sino de una genialidad del gallego, una jugada maestra que ha sido posible tras haber recuperado la confianza de Europa con las sucesivas reformas y la austeridad monacal desplegada en las administraciones públicas. “Si no hubiéramos hecho esto en estos meses, lo que se habría planteado habría sido la intervención de España”, aseguró. Lo ocurrido, en consecuencia, “es un paso más en buena dirección”. ¿Se enterarán estos suicidas del volante de cuál es su derecha?
Gracias al poder de persuasión de nuestro presidente, ha ganado todo el mundo, especialmente el euro y el proyecto europeo, que sale reforzadísimo. Es más, lejos de afectar negativamente a la capacidad de España para financiarse en los mercados, este crédito despejará cualquier duda. No afectará al déficit público ni obligará a tomar nuevas medidas de ajuste. Hemos hecho a la UE el favor de su vida.
Cada vez que Rajoy abre la boca insulta a los españoles con sus mentiras. Como ciudadano estoy harto de mantener una casta de políticos corruptos e insolidarios. La soberanía debe volver al pueblo de una vez. Es a los ciudadanos a los que hay que rescatar, no a los bancos para que sigan especulando con el futuro de la gente y deshauciando a las víctimas del perverso sistema en el que vivimos.
http://abajolascadenas.wordpress.com/2012/06/10/espana-de-rescate-y-rajoy-de-partido-de-futbol/
Tchussss, calle, Escudier; sea como sea, yo ya tengo encendidas las velitas a Santa Rita para ver si la cosa funciona y seguimos adelante. Hoy, lunes, prefiero dejarme invadir por el optimismo, que de lo otro hay días en que ya no puedo más. Con que, a respirar profundamente y a contemplar un bello horizonte de sol y cielo azul. Y que los dioses dispongan, que yo seguiré buscando trabajo.
Quítenme a ese impresentable, su sola presencia constituye un insulto a mi concepto moral y a la inteligencia del soberano