El liderazgo y las primarias marcarán el debate interno del PSOE en 2013

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Griñán felicita a Rubalcaba, el pasado 5 de febrero, en la clausura del 38º Congreso del PSOE, celebrado en Sevilla. / Efe

Todos los dirigentes del PSOE, empezando por Alfredo Pérez Rubalcaba, su secretario general, tienen muy claro que 2013 debe ser el año en que su partido traslade a la sociedad española una alternativa de Gobierno que plante cara a la política de recortes de Mariano Rajoy. De hecho, el Consejo Territorial del pasado 15 de diciembre lo dejó bien sentado aprobando una hoja de ruta que desembocará en la celebración de una gran Conferencia Política para octubre del año que viene. En esa gran convocatoria se fijará un programa socialista ampliamente discutido con anterioridad en cinco miniconferencias sectoriales sobre Europa, el modelo fiscal, las reformas políticas, el crecimiento y el empleo y, por supuesto, el sostenimiento del Estado Social (especialmente en Educación y Sanidad).

Sin embargo, muchos de esos dirigentes (barones territoriales decisivos para la recuperación del PSOE) advierten en privado de que, se quiera o no se quiera, la elaboración de un programa no va a ocultar el debate soterrado sobre el problema que supone tener alternativas que no resultan creíbles por la pérdida de confianza y el mantenimiento de un liderazgo estrechamente vinculado a la gestión de José Luis Rodríguez Zapatero. Los que quieren renovar la cúpula hacen hincapié en que hay que despegarse de la famosa “herencia recibida” que utiliza invariablemente el PP para explicar sus injustificables recortes del Estado de Bienestar, más vinculados a su ideología privatizadora que a la falacia de las “exigencias de la realidad” a las que Rajoy acude una y otra vez.

En consecuencia, la hoja de ruta que ha consensuado el Consejo Territorial, y que debe aprobar (es el único órgano que puede hacerlo) el Comité Federal del 12 de enero próximo, nace marcada por el pulso sobre el liderazgo y las primarias. Eso es tan evidente que el mismísimo José Antonio Griñán, quien declaró durante la celebración del Consejo que hablar ahora de la fecha para celebrar las primarias en el partido es una "frivolidad" a la vista de los "muchísimos problemas" actuales, enviaba tres días después a su segundo y mano derecha, el vicesecretario general del PSOE andaluz, Mario Jiménez, a decir a los periodistas que "no es una cuestión menor" que Rubalcaba "diga si se presenta a las primarias o no" porque “es un dato relevante". Y el pasado día 25, él mismo instó al secretario general a definirse y decir si quiere ser candidato, introduciendo un nuevo elemento de discusión que se añade al que expresó personalmente Griñán en verano de que si se presenta debe renunciar previamente a la secretaría general.

Formalmente, Griñán ha centrado su tarea partidaria en la elaboración de una alternativa federalista al actual modelo constitucional que se apruebe en la Conferencia Política, algo que Rubalcaba acepta con reparos. Es más, el presidente del PSOE incluso ha previsto que  se alcanzará, “sin duda”, un acuerdo con el PSC sobre el nuevo modelo territorial. Incluso ha señalado que la Ejecutiva del PSOE-A trasladará a la dirección nacional del partido un documento encargado a la Fundación Alfonso Perales que se convertirá en "elemento político y documento base" para la Conferencia Política del año que viene. El eje de ese modelo territorial busca  "cerrar el estado autonómico, que no está constitucionalizado". "Esto hay que cerrarlo con el mismo consenso que forjamos la Constitución ", dijo el 15 de diciembre.

El 12 de enero, nadie –salvo Tomás Gómez, el líder del PSOE madrileño– cuestionará en principio la hoja de ruta. Los críticos saben que es un órgano controlado por Rubalcaba y a lo más que aspiran es a evitar una política de hechos consumados que postergue “ad calendas graecas” las primarias e incluso el modo de celebrarlas.

Pero incluso entre los próximos al secretario general como el alcalde de Toledo y líder del socialismo castellano-manchego, Emiliano García Page, tienen prisa. García Page cree que las primarias para elegir al próximo candidato del PSOE a las elecciones generales deben celebrarse en todo caso antes de las autonómicas y municipales de 2015 y, si es posible, incluso antes de los comicios europeos previstos para junio de 2014. Su idea sería hacerlas a finales del próximo año para evitar que la “infantería” se pegue por uno u otro candidato en las locales y regionales del 2015.

El líder del PSOE de Castilla-La Mancha piensa que no se puede dejar que la situación se pudra cuando se habla de varios candidatos, entre ellos él mismo, aunque asegura que lo suyo es ganarle las autonómicas a Dolores Cospedal. Dentro de la dirección del PSOE se barajan tres claros (Carme Chacón, Patxi López y el secretario general del Grupo Socialista en el Congreso, Eduardo Madina, a quien apoyó José Luís Rodríguez Zapatero en el Congreso de Sevilla hasta el punto de convencer a la ex ministra de Defensa de que se retirase en su favor si decidía finalmente presentarse, lo que entonces no hizo).

De momento, a expensas de la aprobación definitiva del Federal el próximo 12 de enero, la hoja de ruta oficial es la decidida por Rubalcaba. Por cierto, incorporando la novedad de que militantes y ciudadanos progresistas participen en la construcción de la alternativa, De hecho, desde el próximo mes de enero podrán participarán en la elaboración de las alternativas del PSOE a las políticas del Gobierno de Rajoy.

La agenda está escrita. Tras la reunión del Comité Federal se celebrarán las cinco miniconferencias citadas entre enero y octubre, período en que también se constituirá y desarrollará una ponencia para promover cambios en la Constitución española.

El PSOE considera que la gestión del PP en su primer año de Gobierno no solo ha agravado la crisis económica sino que ha extendido la crisis rompiendo tres consensos fundamentales: el territorial, el político y el social y que es evidente la desafección ciudadana hacia las instituciones y hacia el propio marco constitucional. “Esta situación de crisis aconseja –afirma Ferraz– reformar algunos aspectos concretos de la Carta Magna, para actualizarla y volver a fortalecerla. Concretamente, consolidar (blindar) en la Constitución derechos sociales como la sanidad; reformar del modelo territorial para hacerlo avanzar en un sentido federal; mejorar la calidad de nuestra democracia propiciando la mayor participación y revisar el sistema electoral”.

La segunda fase de la hoja de ruta es otra reunión del Consejo Territorial (en una especie de Santillana 2, dicen), en la que el PSOE aprobará de manera definitiva el nuevo modelo territorial –con un nivel más avanzado de federalismo– para poder tener una España unida y fuerte que garantice el respeto a nuestra diversidad y la igualdad de los ciudadanos.

Y en octubre, la Conferencia Política del PSOE será la guinda del pastel.

Finalmente, sobre las primarias, la hoja de ruta se limita a señalar que se celebrarán para elegir al candidato a la presidencia. En este punto, Rubalcaba trasmitió al Consejo Territorial su criterio de que las primarias deberían celebrarse después de las elecciones europeas y antes de las autonómicas y municipales. Es decir, entre junio de 2014 y mayo de 2015.

No obstante, dejó claro que es al Comité Federal al que le corresponde decidir sobre el proceso y las fechas de primarias. Y ahí es donde las aguas se vuelven turbias. Veremos quién pesca más en el río revuelto.

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