La ministra Pastor promete no descansar “hasta que las víctimas conozcan la verdad”

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La ministra de Fomento, Ana Pastor, esta mañana, durante la sesión de control del Congreso. / J. J. Guillén (Efe)

En tono compungido y sin embargo solemne, la ministra de Fomento, Ana Pastor Julián, ha prometido ante la comisión correspondiente del Congreso: “No descansaré hasta que se conozca la verdad (del accidente ferroviario de Compostela, que ha segado la vida de 79 personas y mantiene hospitalizadas con heridas graves a otras 22); las víctimas merecen toda nuestra atención y, sobre todo, la verdad; ellas son el principal motivo para aclarar lo ocurrido”.

Pastor empleó una hora y media en sus explicaciones y repitió muchos datos aportados por los presidentes de Renfe y de Adif el día anterior. Ambos estuvieron presentes en la comparecencia de la ministra. Ésta no reconoció expresamente ningún fallo técnico, como la falta de balizas del sistema de frenado automático ASFA en el tramo previo a la reducción de la velocidad de200 a 60 kilómetrospor hora, antes de la curva de A Gandeira, o como la no aplicación del sistema ERTMS en los trenes mixtos de Talgo y Bombardier en el tramo desde Orense hasta Santiago de Compostela.

No obstante, como ya quedó patente en las explicaciones de los presidentes de Renfe, Julio Gómez-Pomar, y de Adif, Gonzalo Ferre, todo apunta a que cuatro kilómetros antes de llegar a la fatídica curva, la reducción de la velocidad dependía exclusivamente del factor humano, en este caso, del maquinista Francisco José Garzón Amo, al que el portavoz del PP, Andrés Ayala Sánchez, volvió a culpar con todo el énfasis y la gestualidad de la que fue capaz.

La ministra recordó que la falta de balizas ASFA fue subsanada por Adif antes incluso de que la Comisión Investigadora de Accidentes Ferroviarias (CIAF) recomendara su implantación para reducir la velocidad a 60 y a 30 kilómetros por hora en el lugar del accidente. Pero matizó que eso se debía a la necesidad de reducir la velocidad por el estado de las vías tras el accidente.

El sistema ASFA de balizas analógicas en las vías funciona en 10.925 kilómetros de línea ferroviaria y es complementario en las del Ave. En el tramo desde Ourense hasta Compostela era el principal mecanismo de alerta y frenado automático de los Alvia hasta 8 kilómetros antes de la estación de Santiago, precisamente, donde se registró el accidente. Las señales que oyó el conductor antes de descarrilar no eran preavisos de reducción de velocidad sino de vía libre. Si el tren podía circular y de hecho circulaba a 200 kilómetrospor hora, ¿cómo es posible que redujera a 80 kilómetros sin un aviso previo ni una señal de frenado automático en los cuatro kilómetros anteriores y que todo dependiera del maquinista que, como en este caso, se distrajo al contestar a una del interventor por el teléfono móvil?

Sobre la falta del sistema automático europeo de frenado del tren, conocido como ERTMS, que está implantado hasta en el Metro de Madrid, quedó claro que no estaba operativo para los Alvia aunque, según reconoció la ministra, está instalado y funciona en los trenes Avant de media distancia entre las estaciones de Ourense y Santiago de Compostela. Aunque la señora Pastor evitó mencionarlo, ahora sabemos que fue desactivado en junio de 2012 en los trenes de alta velocidad Alvia a petición de Renfe y con el visto bueno de Adif. En su réplica a la intervención gelatinosa del socialista Rafael Simancas, la ministra reconoció que, en efecto, el ERTMS había sido suprimido en estos trenes “porque les daba interacciones”. No aclaró a qué "interacciones" se refería.

Así las cosas, sólo la portavoz de Izquierda Plural, Ascensión de las Heras, reiteró que el presidente de Adif, Ferre, debe dimitir y si no, ser destituido urgentemente. Pastor no le contestó. Tanto IU-ICV-CHA-La Izquierda Plural, como UPyD, el PNV y la representante del BNG en el Grupo Mixto, Rosana Pérez, insistieron en crear una comisión parlamentaria de investigación. Pero el PP, el PSOE y CiU rechazan la idea. El portavoz de CiU, Pere Macías, estimó suficiente las comparecencias y el representante del PSOE, Simancas, propuso una comisión de estudio, que fue aceptada por la ministra. Como se sabe, el trazado y las obras de la vía de alta velocidad hasta el corazón de Galicia se realizaron entre 1999 y 2011, bajo el mandato de los ministros del PP Francisco Álvarez-Cascos y del PSOE Magdalena Álvarez y José Blanco. La decisión de modificar el proyecto inicial con ancho de vía europeo y tender la línea con ancho ibérico se debió a que el ahorro de tiempo en el trayecto se lo comía la demora del cambio de ejes de los trenes.

La ministra explicó que 24 horas después de la tragedia había ordenado a su secretario de Estado de Planificación e Infraestructuras que pusiera en marcha una “auditoría completa, metro a metro y palmo a palmo de toda la red ferroviaria”. En la réplica aclaró: “No es que no me fíe de la seguridad de la red (13.600 kilómetros), pero he pedido que se revise palmo a palmo porque, después de la tragedia, los ciudadanos necesitan tener las máximas garantías de seguridad”. El secretario de Estado responsable de esa revisión, Rafael Catalá Polo, ha sido en los últimos siete años, antes de ser nombrado para el cargo, secretario general del consejo de administración de Codere, una sociedad del juego que explota casinos, bingos, hipódromos, apuestas online y 56.000 máquinas tragaperras en Italia, España, México y en varios países de América Central y del Sur. 

La ministra Pastor, que ha constituido una comisión de expertos, enumeró hasta 20 medidas que se pondrán en marcha cuanto antes para para que una tragedia similar no vuelva a suceder. Van desde la formación de los maquinistas, hasta la revisión del uso de teléfonos móviles, pasando por la identificación de los viajeros y la revisión completa del sistema de señales en toda la red. El sistema ASFA de aviso y frenado automático es analógico y completamente seguro, aunque los técnicos están trabajando en uno digital y, asimismo, está en fase de investigación en la UE un sistema de satélite complementario en el que participa nuestro país. Las medidas que anunció Pastor coincidieron con el decálogo que exhibió Simancas, cuyas intervenciones sonrojaron a algunos socialistas, Odón Elorza entre ellos.

La titular de Fomento quiso dejar claro que su departamento no abandonará a los familiares de las víctimas ni a los que sufren todavía en los hospitales y a los que han quedado mutilados. En esa idea incidió una y otra vez. Incluso, al comienzo de su intervención hubo un momento en que la emoción le impidió hablar. Al acabar su exposición inicial pidió un minuto de silencio en señal de condolencia y solidaridad. “Cabe esperar que el apoyo prosiga cuando se hayan retirado los focos”, le pidió Carlos Martínez Gorriarán, de UPyD. “Que no ocurra como en el accidente del Metro de Valencia, donde murieron 43 personas y 47 resultaron heridas de gravedad y ustedes echaron la culpa del exceso de velocidad al maquinista y cerraron el caso, aunque había graves responsabilidades técnicas”, le rogó la diputada del BNG al tiempo que deploró que la oficina de atención se haya puesto en Madrid y no en Galicia a pesar de que la mayoría de los muertos y heridos son gallegos. Pastor prometió que la ayuda continuará y evitó mencionar las trampas y engaños destapados años después por el reportero Jordi Evole sobre el accidente ferroviario de 2006 en Valencia.

3 Comments
  1. Piedra says

    Obran mal, pero actúan bien esos cínicos. Papelón vergonzoso el del oponente Simancas. Pepiño se descojona mientras los socialistas se averguenzan.

  2. Piedra says

    ¿Pero el culpable no era el maquinista? ¡Que dimitan ya y dejen de mentir!

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