Rajoy y Mato han liquidado en un año 161.638 empleos en la dependencia
A la derecha “popular” se le atragantó desde el primer momento la aplicación de la dependencia que con gran entusiasmo produjo la izquierda para atender a los desvalidos y como fuente, además, de creación de empleo. Se le atragantó porque ese no es su modelo de negocio para el llamado “tercer sector”. Ya recordarán a gobernantes tan avispados como Francisco Camps y Esperanza Aguirre abanderando el sabotaje a los cuidadores personales de las personas dependientes. El modelo neoliberal (residencias de pago) se completaba con el postulado conservador de que las hijas de los desvalidos más pobres se ocuparan de ellos gratis et amore, como había ocurrido toda la vida.
Luego la ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ana Mato –que ni se enteraba de lo que ocurría en su casa cuando su marido ejercía de gurtélido en el Partido Popular–, se descolgó diciendo que el pago de la cuota de la Seguridad Social a los cuidadores de los “grandes dependientes” había impedido reconocer el derecho a la ayuda asistencial a más de 700.000 dependientes, y aunque la ayuda era bien escasa, decretó que los cuidadores se pagaran su cotización si querían derechos.
De ese modo, según los datos que el diputado socialista Miguel Ángel Heredia Díaz ha recabado de la Seguridad Social y facilitado a este diario, desde que la ministra Mato canceló la ayuda a la cotización de la Seguridad Social a los cuidadores familiares de las poco más de 700.000 personas con gran dependencia reconocida, hasta septiembre pasado, se ha cargado de un plumazo 161.638 empleos legales con la cotización correspondiente. ¿Por qué resume el presidente Mariano Rajoy su bienio antisocial, con un millón más de desempleados, diciendo que “ya estamos mejor”?
Sólo el estrago perpetrado directamente al empleo en el sistema de dependencia, con unos salarios que apenas llegan a 500 euros al mes, haría sonrojar a cualquier gobernante con un ápice de sensibilidad hacia las clases “populares”. Las cifras, por autonomías (ver gráfico), del número de cuidadores familiares de personas dependientes que cotizaban a la Seguridad Social el 31 de julio de 2012 y que cotizan en 2013 arrojan un total de 179.829 entonces y 18.191 ahora. Nunca fue tan exacta la expresión “no hay derecho”.
