Nace Movimiento por la Democracia “para convertir en leyes los deseos colectivos”

“Sobre la espuma de las mareas y a partir del aprendizaje de miles de iniciativas, desahucios, peleas y movilizaciones” nace Movimiento por la Democracia, con el objetivo de impulsar un proceso político que concluya en noviembre de 2015 con la formación de una Asamblea constituyente ciudadana que convierta en “leyes de nuevas instituciones los deseos colectivos”. La plataforma difundió ayer, lunes, a través de las redes sociales su Carta por la Democracia, que recoge las líneas generales de la propuesta, y el próximo jueves se presentará públicamente en una rueda de prensa en Madrid.

“Entendemos que es necesario un cambio en las reglas del juego y del marco político institucional actual. Por ello, nuestro objetivo es impulsar un proceso constituyente y de transformación democrática que derive en la formación de una Asamblea ciudadana que redacte una nueva Constitución”, explica a cuartopoder.es Jazmin Beirak, portavoz de Movimiento por la Democracia.

El proyecto, que tiene su germen en Enred, comenzó a fraguarse en 2012 por un grupo de 15 personas que elaboraron el esqueleto inicial y lo pusieron en discusión con la asamblea de enRed, primer grupo promotor del Movimiento por la Democracia. Tras esta fase inicial, se celebraron talleres en 29 ciudades diferentes con la participación de alrededor de 200 personas que han continuado enmendando, desarrollando y comentando la Carta que este lunes se ha hecho pública.

Con la finalidad confesa de “tomar la democracia” con las manos y “defenderla de las amenazas del presente”, el movimiento se ha marcado una hoja de ruta con cuatro fases bien diferenciadas que deben concluir en, como ya se ha mencionado, la formación de una Asamblea constituyente ciudadana para noviembre de 2015.

La primera fase de esta hoja de ruta arrancará el próximo 1 de abril con la intención de “difundir y compartir la Carta por la Democracia” entre los ciudadanos y movimientos sociales para “poder recoger ideas y críticas a los diferentes aspectos”. Esta fase concluirá en septiembre de 2014 cuando la plataforma espera poder hacer pública una nueva versión de la Carta con las aportaciones de todos los ciudadanos que hayan querido sumarse a la iniciativa.

Una vez finalizado el proceso de discusión y mejora de la Carta, Movimiento por la Democracia dará comienzo el 15 de octubre del presente año a la segunda fase del proyecto: Consulta por la democracia. “En esta fase queremos desarrollar una consulta que siente las bases de un nuevo acuerdo ciudadano que pueda plasmarse en términos constituyentes”, señala el Movimiento en su página web. Esta fase de consulta ciudadana concluirá el 6 de diciembre.

La tercera fase de esta iniciativa consiste en “desarrollar declinaciones territoriales de la carta”. “Nuestra intención es ponernos al servicio de iniciativas territoriales y ayudar a que nazcan candidaturas municipales para la democracia. No pretendemos presentarnos directamente a estas elecciones sino que las candidaturas ciudadanas que se están creando hicieran la carta suya”, explica Beirak a este medio. Esta fase comenzaría en enero de 2015 y se daría por concluida el 24 de mayo de 2015.

Por último, en noviembre de 2015, fecha en la que está prevista la celebración de las elecciones generales, el Movimiento por la Democracia quiere poner en marcha, “si todo va bien”, la Asamblea constituyente ciudadana. Si bien reconoce que todo dependerá “del resultado y las fuerzas que como movimiento” hayan sido capaces de poner en marcha. “Si hemos sido capaces de articular una fuerza social importante y los políticos no han escuchado nuestras propuestas el único paso que nos quedaría sería proponer una Asamblea constituyente formada por los ciudadanos y que tenga como tarea la redacción de una nueva Constitución que sí nos represente”, concluye Beirak.

Puntos clave de la Carta

La Carta por la Democracia hecha pública ayer, lunes, por el colectivo Movimiento por la Democracia tiene una serie de puntos clave que estructuran su contenido. Este es un breve resumen de las patas que sostienen el proyecto:

Derechos y garantías. “Esta Carta propone unas bases comunes para la definición del nuevo sistema de derechos. Tales derechos surgen hoy de las demandas y luchas de la propia sociedad, a través de sus múltiples formas de organización y participación y son la mejor expresión del ejercicio de la democracia. (…) La garantía de estos derechos requiere de un marco institucional que ha de reconocer y promover el acceso a una vida política activa y democrática, el reconocimiento de un deseo ciudadano para poder decidir sobe todo aquello que afecte de forma significativa a la comunidad”.

Democracia política. “La presente Carta apuesta por una democracia capaz de devolver el poder de decisión a la población sobre los aspectos fundamentales de la vida. Una democracia basada en la participación en la vida social y política, que permita decidir en común cómo queremos vivir. (...) La construcción de esta democracia requiere de una serie de mecanismos ágiles, eficaces y transparentes articulados en distintos niveles y dirigidos tanto a profundizar en la participación directa como en el control de la delegación, vía representación, según se considere oportuno”.

Democracia económica. “Esta Carta se propone recuperar los recursos sociales privatizados y concentrados en pocas manos con el fin de ponerlos a disposición de un proceso democrático real. (…) Es por ello que se requiere una completa reconsideración de las funciones de las políticas económicas, a fin de implantar el principio de bienestar del reconocimiento real y no sólo formal de que las leyes del mercado han de quedar supeditadas a la función social de la economía”.

Democracia territorial. “Esta Carta propone a discusión un nuevo acuerdo territorial a todas las escalas basado en un modelo radicalmente democrático. Parte del presupuesto de que las decisiones y la gestión de los recursos y servicios se deben desarrollar en el nivel mínimo de unidad territorial, pero también que las formas de reparto de la riqueza han de estar organizadas de forma común para garantizar la equidad entre todos los territorios”.