La izquierda política, social y sindical exige al Govern que afronte la emergencia social

BARCELONA.– Más de 100 organizaciones de la izquierda política, sindical y social convocan una manifestación para mañana en Barcelona con el fin de reclamar al Govern que incluya en los presupuestos para el año que viene partidas que ayuden a hacer frente a la situación de emergencia social. De momento, el ejecutivo liderado por Carles Puigdemont de JxSi, en el que se encuentra el Partit Demócrata, la antigua Convergencia, y ERC, sigue negociando con la CUP para conseguir una mayoría en el Parlament que permita sacar adelante las cuentas del próximo ejercicio político. Ha trascendido a los medios que el Govern aumentará en 1.050 millones de euros, con respecto a las cuentas de 2015, la financiación de los departamentos de Sanidad, Educación y el Trabajo, Asuntos Sociales y Familia, con el objetivo de revertir los recortes realizados durante el periodo de crisis. Sin embargo, esta noticia no convence a las organizaciones convocantes.

La manifestación recorrerá el centro de Barcelona a partir de las 17:30 horas de este sábado y partirá desde la Plaza de Urquinaona, para dirigirse por Vía Laietana y el Barrio Gótico, hasta la Plaza de Sant Jaume, a las puertas de la sede de la Generalitat. El eslogan escogido es Es pot fer ara (Se puede hacer ahora). Entre los convocantes y firmantes del manifiesto se encuentran los sindicatos CCOO y UGT, los partidos PSC, Podem, ICV, EUiA y Barcelona En Comú y movimientos y colectivos sociales como las mareas, Procés Constituent, Poble Lliure que forma parte de la CUP, las federaciones de asociaciones de padres y madres de alumnos y de asociaciones de vecinos, el Frente Cívico, la plataforma Pobreza Cero o SOS Racismo.

Las organizaciones convocantes recuerdan que en Cataluña 603.600 personas se encuentran en situación de paro, de las cuales cerca del 60 por ciento sufre paro de larga duración y menos del 30 por ciento recibe algún tipo de prestación. La población en riesgo de pobreza y exclusión social es el 23,5 por ciento y el número de personas que vive en familias sin ningún receptor de ingresos es de casi 225.000. "La pobreza se cronifica", advierten estas organizaciones. La inversión catalana en protección social sobre el PIB es del 21 por ciento, inferior a la del conjunto del Estado español, donde es del 25,5 por ciento, y de la media de la Unión Europea, del 28,6 por ciento. Por estos motivos, reclaman "recuperar los ingresos fiscales para hacer políticas sociales".

Entre las exigencias concretas para recuperar los ingresos fiscales, se encuentran: recuperar el impuesto de sucesiones, incrementar la fiscalidad de las rentas más altas, reducir el mínimo exento del impuesto de patrimonio, crear un impuesto de pisos vacíos, derogar las ventajas fiscales de los casinos, dotar de más recursos a la Agencia Tributaria para la lucha contra el fraude fiscal, renegociar la deuda con la banca para disminuir los intereses con el Banco Central Europeo y crear nuevas figuras impositivas a través de la fiscalidad ambiental. El aumento de ingresos debería utilizarse, según piden los organizadores de la marca, para proteger a los colectivos más vulnerables y luchar contra la feminización de la pobreza, implementar la renta garantizada de la ciudadanía, revertir los recortes en salud, educación, protección social y vivienda y concretar políticas para una ocupación laboral de calidad. También piden implementar una política pública de cooperación internacional justa.

Destaca que entre los convocantes no se encuentran ni ERC ni la CUP, fuerzas políticas de izquierdas que están insertas en la negociación de los presupuestos. No obstante, según ha podido saber cuartopoder.es, asistirán dos diputados de la CUP en el Parlament, Carles Riera y Mireia Vehí. Sí que está en la lista de convocantes Poble Lliure, organización integrada en ella. Preguntados por este medio sobre si la CUP se compromete a que las reclamaciones de los convocantes estén recogidas en los próximos presupuestos catalanes, fuentes oficiales de esta fuerza independentista y anticapitalista explican: "Hay que recordar que quien ha puesto esas reclamaciones en la agenda política ha sido la CUP. Las puso en el anterior presupuesto al que dijimos no y las ha puesto ahora, sobre todo el tema fiscal". Además, añaden: "Nosotros sólo podemos garantizar que lo estamos pelando y lo seguiremos pelando, y muchas veces completamente en solitario, con Catalunya Si Que es Pot (CSQP) y PSC, que dicen estar de acuerdo con nuestras propuestas en materia fiscal, como simples espectadores".

De CSQP, la coalición que agrupa en el Parlament a ICV, EUiA y Podem, participarán representantes de todos estos partidos en la protesta del sábado. El secretario general de Podem, Albano Dante Fachín, explica a este medio: "Tenemos muy pocas esperanzas de que los nuevos presupuestos vayan a responder a la situación de emergencia social. El Govern ha rechazado una y otra vez nuestras propuestas en el Parlament para recaudar más impuestos y así poder destinar esos recursos a paliar la situación dramática que vivimos. Además, el documento que el Govern ha pactado con la CUP no recoge ninguna de nuestras demandas". El líder de Podem insiste además en que "sabemos muy poco de los presupuestos porque el Govern se ha negado a reunirse con nosotros, pero además con lo que sabemos, vemos que no parecen tener ninguna intención de atacar un problema gravísimo del que adolece nuestro sistema fiscal como es el del fraude. Son 16.000 millones que perdemos cada año sólo en Cataluña según los técnicos de Hacienda". En la misma línea, se manifesta Joan Josep Nuet, coordinador general de EUiA: "Falta política fiscal progresiva. Ello comporta renunciar a unos ingresos imprescindibles provenientes de los que más tienen y ganan para políticas sociales como la renta mínima garantizada que JxSi no quiere. Ya han dicho públicamente que no tocarán IRPF, sucesiones y patrimonio, los tres bastiones con margen".

También desde ICV se expresan en el mismo sentido. Responde a este periódico su coordinadora nacional, Marta Ribas: "Queremos denunciar la actitud antidemocrática y oscurantista del Govern respecto a los presupuestos. Hemos dicho por activa y por pasiva que queríamos negociarlos e incluso pactarlos".  Ribas insiste en que "estamos en una situación de emergencia social y de momento lo que hemos ido conociendo por los medios de comunicación es que la propuesta de reforma fiscal que nos proponen implica recaudar 120 millones de euros, y que estos presupuestos no podrán hacer frente a los retos de lucha contra la pobreza. Bienvenidos sean esos 120 millones, pero hemos presentado una propuesta de reforma fiscal que asciende a 1000 millones de euros que hace que paguen más aquellos que más tienen y no hemos recibido respuesta".  La responsable de ICV advierte de que "en el trámite parlamentario no será posible sumar fuerzas porque JxSi y PP votan juntos en todo aquello que se refiere que paguen más los que más tienen. Las propuestas que nosotros planteamos son las mismas que planteaba el partido de Oriol Junqueras cuando no estaba gobernando. Existe una mayoría en el Parlament para que se lleven adelante".

La portavoz adjunta del grupo del PSC en el Parlament, Alicia Romero, relata a este medio: "Somos escépticos en relación a la toma en consideración por parte del Govern de la propuestas que se harán en la manifestación del sábado, lo somos por dos motivos: la falta de diálogo que el Govern tiene con los grupos de la oposición, a excepción de la CUP y por la nula voluntad del Govern mostrada en las distintas votaciones sobre propuestas presentadas en el Parlament y que van en la línea de lo que se plantea en la manifestación: política fiscal más justa y progresiva que pida esfuerzo a los que más tienen para mejorar ingresos y poder realizar políticas sociales". Por su parte, la portavoz de CCOO en Cataluña, Dolors Llobet, explica: "Pedimos que se reviertan los recortes y la congelación de plantillas públicas, y que se recuperen los ingresos y regalos fiscales que se han hecho durante esta época". Para Llobet, "estas reclamaciones estarán presentes en los presupuestos, pero no sabemos si en el sentido concreto que nosotros queremos. Esa es la clave, hay margen en Cataluña para que las rentas más altas paguen más", añade.