Iglesias y Errejón apuestan por alcanzar un acuerdo antes del Consejo Ciudadano

El nuevo Consejo Ciudadano Estatal (CCE) de Podemos, elegido el pasado fin de semana, se reúne mañana por primera vez. La asamblea ciudadana de Vistalegre II dejó a Pablo Iglesias con un liderazgo incontestable dentro de la organización. Un hecho que provocará la reestructuración del órgano de dirección. La corriente de Íñigo Errejón empezó a asumir desde el domingo que perdería varios puestos clave. El secretario general y el todavía secretario político llevan desde comienzos de la semana conversando sobre las posiciones internas, pero a día de hoy todavía se desconoce el contenido de esas negociaciones. Las principales incógnitas a despejar mañana son la composición del Consejo de Coordinación (Ejecutiva), la distribución de áreas y las portavocías parlamentarias.

La discreción es la nota predominante en Podemos durante estos días. La consigna, sobre todo tras la rueda de prensa del martes de Errejón, es no trasladar los debates de los órganos a los medios de comunicación. Desde ambos equipos confirman a cuartopoder.es que aún el jueves por la tarde seguían cerrando la posibilidad de un acuerdo. La intención compartida es llegar al órgano de dirección con un pacto conjunto que satisfaga a todos los sectores. Es decir, lograr una unidad interna que no pudo lograrse antes de la asamblea, tal y como se escenificó en el Palacio de Vistalegre. “La voluntad, desde luego, es real”, señalan fuentes cercanas a Iglesias. Varios dirigentes consultados son optimistas respecto a la culminación del acuerdo.

El portavoz parlamentario afirmó el martes en el Congreso que sería lógica una proporción del 60%-40% en los cargos del Consejo de Coordinación. Un reparto que además no contaba con la corriente de Anticapitalistas, que colocó a dos consejeros en el CCE. Unas palabras que no sentaron bien en el entorno de Iglesias. El secretario general ha manifestado en varias ocasiones que no es partidario de una fuerza que se reparta los puestos por cuotas. El nuevo consejero ciudadano, Manolo Monereo, visibilizaba en entrevista con este medio esa idea: “Un partido de cuotas y liberados donde el dos sea el enemigo del uno no funciona ni en una asociación de vecinos”.

La reunión tendrá lugar a partir de las 10:00 en el Círculo de Bellas Artes, un espacio que ya ha acogido otros encuentros del CCE. En la tarde ayer todavía los consejeros no habían recibido el orden del día concreto. Lo que es seguro es que habrá una intervención en abierto de Iglesias, el habitual informe político del secretario general. La nueva dirección, que entre sus características principales destaca por una mayoría de cargos públicos, nuevos dirigentes y cierta “madrileñización”, cuenta con 62 consejeros electos, 4 representantes de los círculos, 19 secretarios autonómicos (incluyendo Ceuta y Melilla) y el secretario general. Desde Podemos confirman que habrá una primera parte de carácter político y análisis y una segunda de organización interna del CCE. Esto incluye también “debatir cuestiones de organización del grupo parlamentario”.

Todas las miradas apuntan a Irene Montero, actual portavoz adjunta de UP y jefa de gabinete de Iglesias, como la más que probable nueva portavoz. Montero preguntará la semana que viene en la sesión de control del Gobierno y Errejón no lo hará. Un hecho que desde ambos equipos desvinculan de cualquier tipo de movimiento decidido. "No significa nada, otras veces tampoco ha preguntado", apuntan fuentes cercanas a Errejón. Lo que sí parece más evidente es que la Secretaría Política, área que controlaba Errejón, desaparecerá como tal. El sector de Iglesias considera que la línea política la debe marcar el secretario general y más, tras los resultados de la asamblea.

Quedará por tanto saber cuántos puestos tendrá el “errejonismo” y también Anticapitalistas. Iglesias ha dejado pistas sobre algunas de sus intenciones en los últimos días al nombrar la gran labor de Pablo Bustinduy como responsable de Internacionales. Se cuenta también con que Miguel Urbán, uno de los dos consejeros de la tercera corriente, contará con un puesto en el órgano ejecutivo.

Por otro lado, la descentralización del partido saldrá también a colación en el órgano. Al menos desde Andalucía, tal y como ha anunciado su secretaria general Teresa Rodríguez. En declaraciones a los medios ha recordado que los documentos aprobados por los inscritos en el proceso autonómico andaluz determinan que el partido en ese territorio debe ser “un espacio propio con entidad jurídica propia y de toma de decisiones". Por tanto, trasladará al órgano de dirección esta petición, no incluida en los documentos organizativos aprobados en Vistalegre II.