No soy yo, eres tú: PSOE y Unidas Podemos escenifican la ruptura, pero con cordialidad

Inamovibles, PSOE y Unidas Podemos escenifican su falta de entendimiento y encaminan al país a las cuartas elecciones generales en menos de cuatro años. Tras cerca de cuatro horas de reunión en el Congreso de los Diputados, los equipos negociadores de PSOE (Carmen Calvo, María Jesús Montero, Adriana Lastra) y Unidas Podemos (Pablo Echenique, Ione Belarra, Enrique Santiago, Juantxo López de Uralde, Yolanda Díaz y Jaume Asens) han constatado que la línea roja sigue más candente que nunca, que Unidas Podemos no se baja de la exigencia de un gobierno de coalición y que el PSOE hace lo propio con la propuesta presentada la semana pasada: acuerdo programático y puestos en la gobernanza del Estado fuera del Consejo de Ministros para los confederales.

Eso sí, no faltaron las palabras amables entre ambos portavoces, Echenique y Lastra, que permiten atisbar que quizás no está todo cerrado y que puede haber un entendimiento en los próximos días, así lo leen los más optimistas de uno y otro lado. Así, Echenique, que ha comparecido en primer lugar, ha destacado y agradecido "la cordialidad" de las negociadoras socialistas, para después subrayar las "discrepancias políticas". En su turno, Lastra, ha constatado que hay "una buena relación personal", pero también que "no hay una vía para alcanzar un acuerdo". "Unidas Podemos se ha negado a alcanzar un acuerdo programático y de gobernanza en este país", ha zanjado.

No hay más reuniones previstas, ni siquiera está previsto que se encuentren Pedro Sánchez y Pablo Iglesias en los próximos días, algo que había dado por seguro la ministra portavoz, Isabel Celáa el pasado viernes. "El PSOE no se mueve en su planteamiento de gobierno de partido único como si tuviera mayoría absoluta", ha proseguido Echenique. "Si no aceptamos ese marco, no debe haber más reuniones", ha explicado el responsable de relaciones con el Gobierno de Podemos, que ha explicitado: "Se levantan de la mesa".

La portavoz socialista ha contradicho al morado. "Nos sentaremos las veces que sean necesarias para alcanzar un acuerdo", ha asegurado. Pero un acuerdo que no llega, pues las posturas parecen irreconciliables en lo relativo a la composición del ejecutivo. El PSOE aprieta a Unidas Podemos, por no decir que lanza un mensaje al electorado, como si ya estuviéramos en campaña electoral: "La última parte de la reunión la hemos dedicado a invitarles a que reflexionen sobre si van a impedir un gobierno progresista". Pronto llegarán las apelaciones a la pinza, rememorando los años de Julio Anguita y de Felipe González. Las ha vuelto a apuntar: "Van a impedir de nuevo un gobierno de progreso y abocar a todo el país a elecciones el 10N".

El PSOE, que no acepta el gobierno de coalición, tampoco acepta el escenario de que Unidas Podemos les entregue sus votos gratis, sin acuerdo. "Nunca habría una investidura gratis, no la queremos, queremos un acuerdo programático", ha expresado sus deseos, Lastra, quien lejos de mostrarse derrotada, ha resaltado: "Este partido nunca da una batalla  por perdida". "Con Unidas Podemos nos unen muchas cosas, en materia fiscal, medioambiental y por la justicia social", proseguía, en el hall del edificio anexo del Congreso, presionando, repartiendo culpas, pues parece que ese es el escenario de los próximos días.

Echenique también ha descartado la posibilidad de facilitar una investidura a Sánchez sin acuerdo. "Eso sería enormemente irresponsable, llevaría al país a una situación de gran inestabilidad como comprobamos en el breve gobierno de a penas 8 meses". Y se ha mostrado, el morado, duro con el PSOE al asegurar que la estrategia socialista es "un error", "una irresponsabilidad", que "aboca a elecciones anticipadas, y hace sospechar que era su intención desde el principio".

"Nadie entiende que esa oferta haya caducado", ha dicho el dirigente de Podemos, en referencia a la oferta que rechazó Unidas Podemos en julio, por la cual podría haber entrado al Consejo de Ministros con tres ministerios y una vicepresidencia, puestos que no contaban con tantas competencias en relación al porcentaje que le correspondería al grupo confederal según votos o escaños. Para Podemos, la repetición electoral es "irresponsable y absurda" y puede generar dos escenarios: un gobierno de coalición de las derechas u otro entre PSOE y Unidas Podemos, la misma situación que la actual.

Por otro lado, el PSOE no quiere presentarse a una investidura si no cuenta con los apoyos suficientes, prefiere ir a elecciones en esa situación. "Exactamente lo contrario de en julio", ha recordado Echenique, es decir, "no aceptar el encargo del rey a menos que tengan atados todos los apoyos". Reparto de culpas. No soy yo, eres tú. PSOE y Unidas Podemos escenfican la ruptura en un cruce cordial de acusaciones. Rompen, pero con cordialidad, o lo que es no romper del todo.