El Gobierno de Pedro Sánchez prepara la inevitable subida del IVA

El gobierno perfila ya el paquete  de impuestos que se va a ver obligado a subir tras la firma del acuerdo del Fondo de Rescate de la UE. Además de los impuestos especiales, la aplicación de las tasas e impuestos verdes, tasas a las transacciones y tasa Google, el Ejecutivo, que preside Pedro Sánchez se decanta por uno de los grandes impuestos, con los que más se recaudan, no sólo en España, sino en toda la UE: el IVA. Fuentes del Ejecutivo consultadas por cuartopoder aseguran que el IVA sigue siendo el impuesto más cuantioso y cuya recaudación se presenta más sencilla para cualquier Gobierno.  Y las arcas del Estado necesitan precisamente recaudar de forma rápida y sencilla.

En estos días, el equipo económico del gabinete de Sánchez ultima los detalles de la cuantía de la subida y de la distinción en los diferentes tipos de IVA, pero ya nadie del área económica del Gobierno duda de que habrá aumento de este impuesto, casi de forma obligada, dadas las circunstancias y la condicionalidad que impusieron los países llamados “frugales” al acceso de los países más afectados por la covid-19, entre los que se encuentra España.

Si bien el Ejecutivo había barajado además una posible subida del Impuesto de Sociedades, esta idea ha quedado desechada por completo , vistas las últimas cifras de caída del Producto Interior Bruto (PIB). Según las previsiones de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIREF) el PIB español registrará una caída del 14% entre los meses de abril  y junio y los posteriores, con la caída del turismo, no parece que vayan a registrar una recuperación significativa. En esa situación , el Ejecutivo no considera oportuno aumentar los impuestos a las empresas con sede en España, menos aún –según afirman miembros del gabinete de Sánchez- cuando una de las exigencias de la UE, para acceder a parte de ese fondo de rescate son las políticas para fomentar la creación de empleo. Así, en el área económica del Ejecutivo han llegado a la conclusión de que un aumento del impuesto sobre los beneficios de las empresas afectaría negativamente a la recuperación del empleo.

En este momento, España no es uno de los países que más elevado tienen el impuesto sobre el IVA, pese a que Alemania (19%) o Francia (20%) estén por debajo del 21% que se aplica en nuestro país. Otros miembros de la UE, como Italia (22%), o Portugal (23%) tiene un IVA ligeramente más elevado que España, mientras que Suecia, Dinamarca o Croacia tienen fijado su IVA en el  25% y Hungría llega hasta el 27%. Entienden, por tanto, en la UE que España tiene margen para una subida de su IVA y en el Gobierno de Pedro Sánchez lo saben, del mismo modo que asumen que no van a tener más remedio que hacerlo.