G-20 / La marcha zombie fue la metáfora perfecta: la conciencia social de Europa, en coma y el activismo muerto, pero aún en pie

La cumbre de los muertos vivientes

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Manifestantes se quitan sus vestimentas grises mientras participan en una protesta con motivo de la Cumbre de jefes de Estado y de Gobierno del G20 en Hamburgo
Manifestantes se quitan sus vestimentas grises mientras participan en la marcha zombie, una protesta con motivo de la Cumbre de jefes de Estado y de Gobierno del G-20 en Hamburgo, el pasado 5 de julio. / Lukas Barth-Tuttas (Efe)

Entre los actos de protesta organizados contra la cumbre del G-20 en Hamburgo ha habido sabotajes, marchas, sentadas y manifestaciones que han implicado a docenas de miles de personas y a casi 20.000 agentes. Una marcha con doce mil manifestantes, mil de ellos encapuchados, culminó en una batalla callejera con barricadas improvisadas, coches incendiados y numerosos destrozos en el mobiliario urbano. En total, las autoridades calculan que los incidentes del jueves se saldaron con unos 60 heridos leves únicamente entre las fuerzas de seguridad, lo que da una idea aproximada de la movida.

Puede parecer una barbaridad que a estas alturas del capitalismo todavía no se haya inventado nada mejor que el ladrillo y el cóctel molotov, pero lo cierto es que no, que no se ha inventado. Convocar una huelga, cortar una carretera, inutilizar una vía de tren, seccionar los centros neurálgicos del país hasta paralizarlo son las únicas formas efectivas de lucha obrera. Es el único lenguaje que el poder entiende, el único que está dispuesto a escuchar. Para que un pez gordo se siente en la mesa, primero hay que tomar la calle. Eso en España lo sabemos bien porque llevamos décadas sentados en casa, esperando que el capital, los empresarios y banqueros se caigan del guindo por su propio peso. Aquí no hay peligro de que suceda nada grave, salvo si el Madrid baja a segunda o Belén Esteban se calla, porque para eso las fuerzas sindicales están haciendo una huelga indefinida de brazos cruzados.

Por eso, la mayoría de los periódicos y televisiones amigas han preferido informar sobre Hamburgo con la noticia de la llamada marcha zombie, una vistosa gilipollez en la que un grupo de artistas y voluntarios se pintaron de gris de la cabeza a los pies y caminaron en plan tranqui por las calles de Hamburgo, como si fuese una performance de The Walking Dead. En cierto modo, la metáfora resultaba perfecta: mientras los derechos laborales retroceden décadas, mientras inmigrantes y refugiados son tratados peor que ganado, la conciencia social de Europa se reduce ella misma al estado de coma y el activismo aparece muerto pero todavía en pie, abriendo mucho la boca, amagando un mordisco y oliendo mucho a podre. Un fantasma recorre Europa, dí que sí, Karl.

Hace unos años, Josephine Witt tomó al asalto la mesa donde Mario Draghi estaba hablando ante las cámaras y derramó un montón de confeti sobre ese triste espantajo financiero que simboliza mejor que nadie la vergüenza y la miseria moral de la Unión Europea. En un primer momento, Draghi se asustó, abrió mucho la boca y los brazos como si no pudiera creerse lo que estaba sucediendo: una mujer que se atrevía a propinarle una patada en la boca. Pero no hubo patada, no hubo agresión, no hubo más que una ridícula lluvia de papelitos, otra protesta pacífica, ese borreguil oxímoron en el que se resume nuestra derrota. Después Witt protestó por qué lo único que comentaba la gente era el color de su tanga, que había asomado sin querer, por encima del pantalón, con el esfuerzo de subirse a la mesa. Sin embargo, no era ella quien enseñaba el culo. Era Europa y ese viejo fantasma que ya no da ningún miedo.

1 Comment
  1. florentino del Amo Antolin says

    Los sindicatos y partidos políticos hace años que desmovilizaron a los que abonan sus cuotas y así tener mas liberados apesebrados. Todo está calculado David; los desinformativos están currando lo suyo, hacen el parte de guerra.. Los malos y alborotadores, han herido X policías.. El Nuevo Orden Mundial G 20 ( o sea los buenos ); no terminan de encontrar el camino de aplicar el » CETA Universal Irreversible «. Eso sí, democráticamente ( faltaría más ). Espero que esos mismos partidos y sindicatos, convoquen una respuesta, sin policías y ver si los ladrones son buenas personas, y no hay trabajadores Zombis, ni esquiroles con corbata.

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