Pepu Hernández: “En Madrid estamos demostrando que se puede colaborar y coordinar esfuerzos”

Durante su trayectoria como seleccionador de baloncesto, hay un dogma sobre otro deporte que Pepu Hernández (Madrid, 1958) nunca aceptó sin responder con un “por qué”: “El fútbol es así”. Años después, cuando ha salido de los círculos deportivos y ejerce una ‘segunda vida’ dentro del "servicio público", la cabeza del grupo socialista en el Ayuntamiento de Madrid vuelve a escuchar con frecuencia la misma frase aplicada a su nuevo desempeño: “La política es así”. Su respuesta podría ser prácticamente la misma: “El fútbol será como quieran que sea sus responsables. Puede cambiar y mejorar”, contesta. Ahora se lo ha aplicado y ha sentado a los socialistas madrileños a negociar con su rival natural: el PP de José Luis Martínez Almeida, que encabeza el consistorio.

Hernández aterrizó en el Ayuntamiento hace poco más de un año, pero la crisis de la covid-19 ha venido a cambiar todas las reglas a mitad de partido. En el consistorio de la capital, la oposición arrima el hombro para lograr un acuerdo de reconstrucción para la ciudad, que todos los grupos han empezado a hilvanar durante estas semanas. Sin embargo, Hernández avisa. Más que un “gran pacto” habrá acuerdos sobre materias concretas para poner Madrid a pleno rendimiento.

El portavoz del grupo socialista en el Ayuntamiento reserva 30 minutos para charlar con cuartopoder.

-Este miércoles ha habido sesión en el Congreso, mientras en el Ayuntamiento los grupos avanzaban con las mesas de reconstrucción, ¿la capital es un oasis dentro de la crispación política de otras administraciones?

-Nos gustaría que así fuera. Creo que estamos demostrando un entendimiento. Para mí fueron muy importantes esas primeras reuniones que mantuvimos en el comité de crisis a la que nos convocó el alcalde e intentamos arrimar el hombro, hacer propuestas. Desde marzo hemos estado reuniéndonos y lo hemos mantenido hasta que se han creado las mesas para los acuerdos de reconstrucción de Madrid. Estamos haciendo una demostración de que se puede colaborar y coordinar esfuerzos. Debemos estar en esa línea, no en la competición como algunos están queriendo demostrar, tratando de sacar rédito político. Es algo que nos está pidiendo la ciudadanía, que lleguemos a acuerdos. Desde esa política de cercanía que siempre se ha dicho que caracteriza a la política municipal creo que debemos que dar ese ejemplo. 

-¿Ayuso debería aprender de Almeida? 

"Se ha perdido mucho el tiempo tratando de confrontar"

-No sé si tienen líneas distintas porque en algunos casos sí se han parecido mucho, como en la confrontación que han mantenido con el Gobierno. El alcalde cuando se le pregunta sobre esto responde y ejerce su derecho para poder dar su opinión sobre lo que se está haciendo en otros ámbitos, pero deberían ser más conscientes de las dificultades que hay en el Ayuntamiento de Madrid, en la Comunidad de Madrid y en el Gobierno. Es una situación anómala y vamos aprendiendo por el camino. Muchas veces se ha perdido mucho el tiempo tratando de confrontar con otras opciones políticas, tratando de sacar un rédito electoral que no corresponde. Hay que tratar de solucionar los problemas. 

Ayuso creo que se está planteando una serie de líneas rojas que no se plantean en el ámbito ciudadano. No tiene que haber líneas rojas sobre temas de emergencia y vulnerabilidad, pero cada uno trata de imponer su forma de pensar y creo que todos deberíamos abandonarla ahora ligeramente. 

-Madrid ha pedido pasar a la fase 2 de la desescalada, ¿está preparada?

-Tiene que dilucidarlo el Ministerio de Sanidad, tiene que haber unos parámetros para todos que tienen que cumplirse. Hay una dificultad mayor en algunos puntos de Castilla y León, Barcelona y Madrid y entiendo que hay que estar muy preparado. Madrid no estaba preparada antes. Las medidas tienen que ser muy cuidadosas para que no haya incidencia mayor y recaída. Creo que hay que cuidar no solo a los ciudadanos, sino a los trabajadores de la sanidad, que son los que tienen que dar respuesta.

Por una política de muchos años del PP se ha visto afectada la Sanidad. No tiene la capacidad de respuesta que tenía antes, otra cosa es que se haya tratado de superar. Me da la impresión de que son cuestiones puntuales, no para solucionar un problema de más largo alcance. Esos acuerdos estamos intentando que sean más ambiciosos, no queremos recuperar solo la ciudad que teníamos antes, que tenía sus problemas y deficiencias. Queremos aprovechar esta desgraciada ocasión para tratar de mejorar esas condiciones que tenía Madrid. 

-Ahora han empezado a construir las mesas de trabajo, pero según se avance, se concrete y se asigne presupuesto, irán viéndose las prioridades y diferencias de cada grupo. Tienen mucha tarea y poca tarea  ¿usted es optimista con esta negociación acabe en un gran pacto?

"Los acuerdos serán significativos, pero también las cosas que queden fuera"

-Espero que sea un buen pacto, que sea un gran pacto tengo mis dudas. Incluso con el concepto pacto. Para mí pacto es lo que tienen Ciudadanos y PP para alcanzar el Gobierno y el pacto de PP con Vox. A partir de ahí, entendemos que hay dificultades. Nosotros vamos a las mesas de negociación a negociar.

Habrá algunas cuestiones en las que podemos estar de acuerdo de salida. No vamos con prejuicios ni líneas rojas, posiblemente saldrán más adelante porque los partidos quieren cosas distintas para su ciudad. Nosotros siempre decimos que Madrid necesita una estrategia de ciudad, de qué es lo que queremos ser más adelante. Llevaremos nuestra aportación, colaboración y lealtad, pero lealtad significa decir lo que está bien y lo que está mal, no solo lo que está bien. Lucharemos porque los pactos y acuerdos sean más ambiciosos. Sabemos que algunas cosas serán difíciles. Hemos decidido sacarlos por unanimidad. Además, tenemos poco tiempo para desarrollarlos. Nos hubiera gustado tener más tiempo para que los acuerdos fueran de mayor solidez, pero lo que acordemos será significativo. También serán significativas las cosas que no incluyan estos acuerdos. Eso marcará alguna diferencia entre las opciones, pero también será motivo de lucha posterior. 

-¿Cuáles van a ser esos huesos duros de roer en las negociaciones?

"Vamos a tratar de conseguir una ciudad más fuerte, que responda mejor a esas emergencias que puedan surgir en el futuro"

-No vamos con prejuicios, pero hay algunos temas que no tienen cabida. Creo que debían tener cabida más temas, aunque nos complique. No se va a hablar mucho de transición ecológica, aunque sí de algunas cuestiones que están relacionadas. La gestión del espacio público o la necesidad de peatonalizar y de movilidad sostenible sí estarán en las mesas, pero habrá otros que no.

En la mesa social también tenemos que decir que Madrid ya tenía unas necesidades. No solo por una emergencia social destacada en este momento, sino que ya estaba por debajo de los ratios de asistencia social. Vamos a tratar de conseguir una ciudad más fuerte en ese sentido, que responda mejor a esas emergencias que puedan surgir en el futuro, más resiliente, solidaria y más sostenible. Lucharemos por ello.

-Si mañana le llamase Gabilondo y le pidiera consejo sobre la posibilidad de presentar una moción de censura contra el Gobierno de Ayuso, ¿qué le respondería?

-No espero realmente esa llamada. En todo caso, sería yo el que tendría que pedirle consejo a Gabilondo para cualquier cuestión. Yo no deseo ninguna crisis de ningún tipo en este momento ni para el Ayuntamiento, ni la Comunidad, ni para el Gobierno de España. Este no es el momento de crisis, sino de de ayudar, de colaborar y de coordinar en todos los sentidos. Si alguien quiere sacar rendimiento o crispar, para mí lo importante es que el Ayuntamiento, la Comunidad y el Gobierno lo hagan bien, lo necesitamos. Por eso, considero imprescindible no forzar la máquina ni crear situaciones críticas donde no haya fortaleza. Yo prefiero fortaleza, sea de quien sea, que debilidad en este momento.

-Antes del coronavirus empezó a haber una contestación ciudadana fuerte contra la proliferación de salones de juegos y apuestas en los barrios. Ahora vemos que el Ayuntamiento quiere bonificarlos en una ordenanza en la que el PSOE se ha abstenido, ¿consideran que esto es un paso para atrás? 

-A veces se crea una complicación administrativa. Seguimos teniendo nuestra posición. No creemos que se tenga que favorecer algunas cuestiones que plantean otros problemas a la sociedad. Nos plantean que son generadores de puestos de trabajo, nosotros tenemos que defender los puestos de trabajo, la recuperación económica de Madrid al 100%, pero hay que plantearnos algunas cuestiones que no nos parecen del todo adecuadas. Habrá puntos donde tendremos que acercarnos por el bien común. También es muy importante que nos planteemos si estos acuerdos tendrán un margen temporal más corto o más largo, por eso prefiero llamarlo acuerdos que pactos. Tendremos que seguir insistiendo en cuestiones importantes más adelante.

-La Comunidad de Madrid planea una modificación del Ley del Suelo, ¿temen una vuelta al ladrillazo?

-No me cabe duda de que cada opción política va a luchar por lo suyo. La Comunidad de Madrid aprovecha para marcar su territorio. Se ha demostrado en muchas ocasiones que eso no ha sido bueno ni efectivo y ha traído muchos problemas a este país. Ese modo de ver la política, con cuestiones como la liberalización del suelo o la privatización, ya directamente está poniendo en alarma a ciudadanos y organizaciones. No es el momento de tratar de colar estas cuestiones y necesitan un debate más amplio en situaciones de más normalidad.

-Uno de los puntos negros de esta crisis han sido las residencias. 

-Tienen que revisarse.  El modelo no ha sido bueno. Determinadas privatizaciones y la gestión privada no han sido positivas. Es uno de nuestros grandes problemas nuestra sociedad, de la sociedad del bienestar. En el aspecto sanitario, educativo y asistencial deja mucho que desear. 

-Estamos en una situación insólita, ¿se han planteado cómo se puede hacer oposición apoyando al alcalde? ¿tienen miedo a desdibujarse?

"Diferencias políticas habrá siempre, pero ahora hay que apartarlas"

-No, no tenemos miedo. Creo que estamos haciendo nuestro trabajo, que es el servicio público y no la política. Entiendo que es muy difícil decir esto en un grupo político, pero para mí el momento del servicio público es este. La capacidad de ayudar, arrimar el hombro y aportar soluciones son nuestras batallas en este momento. No lo son lo que pasará electoralmente dentro de un tiempo o la batalla del espacio político, creo que en este momento se difuminan esas cuestiones porque lo que tenemos que hacer es servir. Es posible que haya grupos que se están despistando, pero nosotros debemos centrarnos en cómo podemos ayudar. Diferencias políticas habrá siempre, pero en este momento hay que apartarlas. Esas clasificaciones ficticias de la publicación de resultados de proyección de voto creo que nos despistan mucho. Debemos estar en el espíritu de la coordinación y colaboración de esfuerzo y la lealtad institucional. 

-¿Usted cree que si el que estuviese en la oposición fuera Almeida habría sido posible este diálogo en el Ayuntamiento de Madrid?

-Sinceramente, espero que hubiera sido así. Debería. Históricamente ha ocurrido, también lo tengo que decir así, que con la oposición de derechas no ha habido tanta colaboración como la que se ha demostrado cuando el PP estaba en el Gobierno. Ha sido mucho más responsable la oposición del PSOE en cada momento. Ahora estamos viendo que no hay apoyo, sino lucha por el espacio político en la política nacional que creo que no está siendo positiva. Creo que todo el mundo quedará retratado y espero que tratado con justicia.