El novio de mi hermano: Argentina, marzo del 76

  • "En la madrugada del 24 de marzo de 1976 se produjo uno de los golpes de Estado más brutales, más sangrientos y más genocidas que se hayan conocido en el último tercio del siglo XX"
  • "El horror que se vivió jamás se podrá borrar de nuestras memorias, en especial de los que estuvimos presos, aniquilados de corazón y mente"
  • "Hoy, día 24 nos concentraremos en la Plaza del Mayo, para no olvidar. Gritaremos por el juicio, castigo y cárcel para todos los genocidas"

0

Enrique García Ruíz, preso de la dictadura argentina

Los miedos y los escalofríos no han cesado nunca, ni cesarán. A pesar de haber vuelto a la España que me vio nacer, alargando la distancia con Argentina todo lo que me fue posible, incluso con un océano de por medio, sigo oteando tras las esquinas las sombras del peligro inminente. Aun sueño en el dolor y la angustia, la extrema crueldad, las torturas, que sufrieron muchas y muchos de mis compañeros durante aquellos días y, sobre todo, el recuerdo siempre presente de todas aquellas gentes que cerraron los ojos en los fríos y solitarios paredones que circundaban las cárceles argentinas. Dormirte no te garantizaba que fueras a despertarte, ni quién sería el próximo en el paseíllo.

En la madrugada del 24 de marzo de 1976 se produjo uno de los golpes de Estado más brutales, más sangrientos y más genocidas que se hayan conocido en el último tercio del siglo XX. Argentina se vio sacudida hasta sus cimientos.

Observando con la calma que da el tiempo fue, sin duda, la página siguiente en un calendario previamente marcado, otra ficha dentro de una correlación de hechos que estaban sucediendo en ese cono americano, la expresión de una realidad que se empezó a labrar en 1964 con el Golpe de Estado en Brasil, en 1973 en Uruguay con la disolución de Parlamento y en 1976 con el derrocamiento de Salvador Allende en Chile.

Para poder entender esta involución en Argentina, debemos visualizar varios escenarios. Si miramos su clave más política, tendríamos que comprender que Isabel Perón comandaba un Gobierno profundamente nacionalista, si bien dentro del mismo existían fuerzas contradictorias que tenían intereses divergentes, cada una de esas partes pretendía imponer su hegemonía.

Este Gobierno nacionalista sustentaba su base económica, reconociendo a Rusia como su socio preferencial. En ese contexto se explican algunas cuestiones básicas:

1) La nacionalización de las gasolineras. Para ello solo se necesitaba de un decreto gubernamental.

2) Se anulan las concesiones de las empresas del papel, que se traspasan a los intereses rusos. Para ello, era obligada la convalidación del Parlamento, dado que se trataba de derogar una ley. La importancia real de esta cesión al Gobierno ruso parte de que el papel era necesario para la prensa escrita del momento. Quien dominaba el papel dominaba la presa.

3) Se pretende nacionalizar el aluminio y que regrese al Estado su explotación.

4) Se pacta con Rusia la cesión de armas y dinero, a cambio de grano.

El siguiente elemento surge con una pretendida desestabilización popular, que se concreta con el asalto al cuartel de Tablada, donde se acantonaba un regimiento de infantería mecanizada. El cuartel de Tablada es atacado por 150 montoneros. Son brutalmente rechazados. La reacción al asalto produce un rápido efecto, nuclea al ejército en bloque.

Si miramos las tendencias y el posicionamiento político de cada uno de los partidos, es posible que nos sorprendamos, por un lado, el Partido Radical apoyó incondicionalmente el golpe de Estado. El peronismo como siempre dividido en sus contradicciones; y lo más trágico y paradójico fue que un sector muy importante de las izquierdas creía firmemente que el golpe sería como en Perú de fundamentalmente nacionalista. El único partido que se opuso desde el primer momento fue PCR, de corte maoísta, como el propio Papa Francisco reconoció. La consigna en las calles fue “No a otro 55”, en recuerdo al golpe contra Perón.

Para entender parte de este proceso, en esos días el periódico Nuestra palabra, diario oficial de partido comunista, manifiesta que el golpe se lleva a cabo contra un Gobierno fascista presidido por Isabel Perón, apoyando sin ambages el derrocamiento del presidente Constitucional. Los montoneros no se oponen a los militares, lo estaban empujando, así como las juventudes peronistas revolucionarias.

Un último factor que hay que es analizar es cómo se situaban los mandos del ejército. Así, Videla era claramente prorruso, ostentaba la comandancia del ejército de tierra, Massera tenía en su poder el alto mando de la armada y estaba aliado con los europeos, mientras que Capellini tenía bajo su control la fuerza aérea siendo partidario de los Estados Unidos. Esta correlación de los jefes militares expresa abiertamente como sufrimos la conjunción de los tres imperialismos dominantes en el mundo, el europeo, el norteamericano y el ruso. Asimilar estas actitudes son básicas para asumir los hechos de aquellos días.

Los militares nada más tomar el poder, en su primera declaración, afirman tajantemente que una de sus prioridades es para acabar con los soviets en la Argentina, es decir, acabar con el poder que estaban tomando los procesos sindicales estudiantiles en la Universidad y en los estudios secundarios y por supuesto con los sindicatos de trabajadores que estaban en todo su apogeo y habían penetrado con gran efervescencia en la sociedad argentina.

Ese día corrió como la pólvora una información muy inquietante que hundía en el olvido nuestras caricias de libertad. Todas las casas, todas, aún las clandestinas estaban controladas, había que huir rápidamente, como puede con la ayuda de mi hermana, intenté liberar a mi mujer y a mi hijo y enviarlos a una quinta lejos del peligro perentorio.

Pero sin duda, si hay algo que se debe resaltar es que nunca se tuvo la percepción de la brutalidad del golpe, en la vida se pensó en la cascada de los terribles acontecimientos que vendrían en los siguientes días, y mucho menos que al final se superara la cifra de 30.000 desaparecidos-muertos, 250.000 detenidos sin juicio, “con vida los llevaron con vida los queremos”. El horror que se vivió jamás se podrá borrar de nuestras memorias, en especial de los que estuvimos presos, aniquilados de corazón y mente, de sufrimientos inmensos, y mucho menos de las madres de la Plaza de Mayo que siguen llorando y que lloraran hasta el último aliento, hasta la profundidad de sus tumbas.

Al día de hoy, hay 400 niñas y niños apropiados, que nacieron de las madres torturadas, secuestradas y asesinadas. Niñas y niños que fueron entregados a las familias de los propios torturadores o a gentes con muchos recursos, la oligarquía argentina. Es posible que se hayan recuperado 50 de esas niñas y niños. La concha de su madre.

Hoy, día 24 nos concentraremos en la Plaza del Mayo, para no olvidar. Gritaremos por el juicio, castigo y cárcel para todos los genocidas. Difusión y apertura de los archivos de la dictadura y la restitución de la identidad de los jóvenes apropiados. No olvidamos, no perdonarnos, no nos reconciliamos.

Dos días antes del golpe de Estado departía con el novio mi hermano, en animada charla, una botella de vino cabernet-merlot, mientras me contaba su estancia en Grecia en abril de 1967, y cómo al mes siguiente comenzó a trabajar en Egipto, para terminar por relatarme, ya con cierto mareo producido por los efectos del vino, como disfrutaba de las playas del Líbano en abril del 75.

Años después cuando abandoné la cárcel, comprendí por qué había estado el novio de mi hermano aquel el 22 de marzo del 1976 en mi casa. Lo que nunca he sabido es si me estaba avisando. Jamás volví a verle.

Leave A Reply