La Ley Sinde y el laberinto de las metáforas

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José Cervera *

José CerveraContemplar la reacción de algunos artistas e intelectuales españoles ante la Ley Sinde y sus dimes y diretes legales entristece. Porque es triste comprobar hasta qué punto algunas  mentes preclaras se dejan arrastrar por las metáforas, enredándose en imágenes que en principio pretendían tan sólo ayudar a pensar. Cada vez que un artista habla de 'robo' confunde la llamada 'propiedad' intelectual con la propiedad material; cada vez que se menciona la palabra 'piratería' fuera del contexto de las cosas de Somalia se está confundiendo la copia no autorizada con el secuestro. Afortunadamente la deidad no mata un gatito cada vez que un cantante afirma solemnemente que realizar sin permiso una copia de su canción es lo mismo que meterle mano en la cartera, porque de ser así pocos cachorros de felino quedarían. Pero lo más triste de todo es ver a personas que trabajan en el ámbito de la cultura, que se ganan la vida con su intelecto, tan perdidos en las apocalípticas metáforas que ellos mismos han lanzado que no se dan cuenta de lo que están haciendo en el mundo real. Porque los artistas y trabajadores de la cultura españoles están, sin metáforas, defendiendo una forma de censura administrativa: algo que ningún intelectual en su sano juicio puede defender.

Ésta es la triste y desnuda realidad de la Ley Sinde: que eleva a ley el cierre de páginas web (que son un tipo de medios de comunicación) a cargo de un organismo administrativo, de un departamento del ministerio de Cultura. Las metáforas de la propiedad y el robo han llevado a nuestros pensadores, cantantes y cineastas a defender un mecanismo que permite a un puñado de burócratas acallar voces en el ámbito público, lo que constituye una censura sin metáfora que valga. Las sucesivas modificaciones, que la ira de Internet ha forzado a los políticos a aceptar, proporcionan varias capas de vergonzante cobertura judicial a lo que siempre fue, y sigue siendo, un procedimiento administrativo de cierre. Porque ésta es la esencia misma de la Ley Sinde, lo que los intereses estadounidenses y los intermediarios de la cultura exigieron para no pedir leyes aún más estrictas que fuesen directamente contra los internautas (como ocurre en EEUU, el Reino Unido o Francia). Eso es lo que pidieron, y eso es lo que han obtenido de los partidos políticos usando su arsenal de forzadas metáforas: un peligroso y mal definido mecanismo de censura.

Cuando Alejandro Sanz o Serrat o Javier Marías o Javier Bardem o Elvira Lindo hablan de 'robo', 'piratería' o 'propiedad´ intelectual, están defendiendo la censura. Intelectuales hechos y derechos, gentes muchas de ellas que han demostrado su compromiso con causas justas y con las libertades se han extraviado y han acabado defendiendo que un grupo de funcionarios puedan cerrar páginas web siguiendo unos criterios poco claros y con una mínima supervisión judicial. Personas indudablemente de buena voluntad, duchos en las actividades gemelas de pensar y comunicar, han perdido el rumbo en un laberinto de metáforas para acabar respaldando una norma que pone en riesgo la libertad de expresión en su país. Y cuando el cineasta y presidente de la Academia de Cine Álex de la Iglesia ha conseguido mediante el diálogo salir de ese laberinto y comprender la enormidad de lo que estaba haciendo, lo han desautorizado y han pedido su dimisión. Los intelectuales españoles defienden la censura en el nombre de metáforas truchas, rechazan el diálogo y castigan a quien lo practica. Más que indignante, o sorprendente, o irritante, es triste. De una tristeza tan grande como la confusión que parece embargar a algunas de las mejores mentes de este país cuando se trata de sus propios intereses. Y de sus propias metáforas.

(*) José Cervera. Periodista y profesor de Tecnología Multimedia en la Universidad Rey Juan Carlos. Es autor de los blogs Retiario y Perogrullo.
8 Comments
  1. Yan says

    Ahora que cojan todo Perogrullo, lo editen en un libro, lo distribuyan y lo vendan, y no veas un clavel. A ver qué tal así la metáfora.

  2. Andrés says

    Pues estaría en su derecho de denunciarlos por violar la licencia Creative Commons.

  3. Fer says

    Muy buen artículo. Solo una cosa, no se ha pedido la dimisión de Alex de la Iglesia en ningún momento, fue su propia decisión (algo que le honra). Otra cosa es que no le hayan puesto demasiadas pegas para marcharse

  4. jose says

    Lo que más pena me da es lo de Savater, que por su culpa está quedando mal UPyD, cuando este partido se ha declarado anti sinde y a favor de la neutralidad en la red.

  5. brenda says

    no se encuentra nada
    en
    google

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