El primer iPad después de Jobs

Si son de los que quieren estar a la última, el nuevo iPad (así, sin apellidos) viene con una resolución de pantalla que casi deslumbra, un poderoso procesador que no tiene nada que envidiar a los más potentes ordenadores, una cámara capaz de jubilar a las digitales y, además, con conectividad 4g LTE (Long Term Evolution) que permitirá velocidades que ni siquiera las operadoras españolas son capaces de ofrecer. Pero quizá el dato más importante de la presentación que hizo el miércoles Apple no son todas las novedades que trae el nuevo iPad sino que, ya con el viejo iPad 2 vendieron más tabletas que cualquier fabricante pudo vender ordenadores personales.

Fue casi al comienzo de la presentación. Tim Cook, sucesor de Steve Jobs en la dirección de Apple, desveló que en el último cuarto de 2011 vendieron 15,4 millones de iPad entre la primera y la segunda generación. Eso colocó a Apple por delante de cualquier fabricante de ordenadores personales: HP les siguió de cerca con 15,1 millones, Lenovo con 11 millones, Dell con casi 12 y Acer con 9,8... Además de poder estar orgullosos por estas cifras, los datos dan la razon a Cook cuando dijo que el iPad era "el arquetipo del mundo post PC".

Apple consiguió en 2007, con el iPhone, que los móviles sirvieran para algo más que llamar. Sin su aparición no se habrían desarrollado las redes móviles como lo han hecho, facilitando la llegada de su hermano mayor. Con el empuje del iPad, presentado por primera vez hace poco más de dos años, la competencia se afanó en lanzar en 2011 más de un centenar de tabletas, animando a una mortecina industria del hardware. En el pasado Mobile World Congress de Barcelona se vieron las mejores de ellas. Sin embargo, Apple ha conseguido ir algo más allá. Para los que, como el que escribe, las prestaciones técnicas no lo son todo, hemos de reconocer que, en palabras de Cook, “todo el mundo sigue pensando quién lanzará un producto que sea mejor que el iPad . Dejen de preguntárselo, nosotros lo haremos".

Dejando a un lado la gran cantidad de adjetivos calificativos y expresiones del tipo experiencia más asombrosa, una nitidez y un realismo increíbles, o el sistema operativo móvil más avanzado del mundo, propias de las declaraciones de los ejecutivos de Apple y sus gabinetes de prensa, el nuevo iPad por lo pronto no tiene apellido. No deja de ser una curiosidad, pero en las redes se comentó este detalle del nombre a secas como un posible sello de los nuevos tiempos.

Entrando a destripar el cacharro, a los que tenemos una tableta de hace un año, los avances impactan. "El nuevo iPad tiene la mayor resolución de pantalla que se ha visto nunca en un dispositivo móvil, con 3,1 millones de píxeles, lo que permite apreciar el texto con una claridad absoluta y ver fotos y vídeos con todo detalle", explicó Philip Schiller, uno de los vicepresidentes de Apple. La pantalla, llamada Retina, ofrece el cuádruple de píxeles que la del iPad 2. El extra de nitidez le permite, por ejemplo, reproducir películas con resolución HD 1080p, como muchas de las televisiones actuales.

Otra de las mejoras está en su cámara, que sube hasta los 5 megapíxeles. Esto hace que, además de tomar fotografías de gran calidad, pueda grabar vídeo en alta definición. En algo que también adelanta al resto es en la conectividad. Además de la conexión WiFi, el nuevo iPad soporta el estándar de telefonía de cuarta generación LTE. Eso significa que se podría navegar con la tableta a una velocidad de hasta 72 megabits por segundo, diez veces más de la velocidad media del ADSL en España. En realidad, al menos en este país, no irá tan rápido. Las redes móviles españolas aún no soportan tal caudal de datos.

En España, como ya viene siendo habitual, el iPad llegará más tarde que a los principales países del mundo. Durante el evento varios periodistas dieron la fecha del 23 de marzo y, aunque los precios oficiales para España no se han publicado, lo más probable es que sean los que tenía el iPad 2 antes de hoy. El lado bueno de este desplazamiento es que el iPad 2, que seguirá vendiéndose, bajará hasta los 400-600 euros, un precio que permite hacerse con alguno de los mejores rivales del nuevo iPad. Yo aún seguiré sacándole el jugo que le queda a mi viejo Galaxy Tab.