El pensamiento analítico nos hace menos creyentes

Si cinco máquinas tardan cinco minutos en hacer cinco ollas, ¿cuánto tardarán 100 máquinas en hacer 100 ollas? Si responde 100, lo suyo es el pensamiento intuitivo. Si ha dicho cinco (cifra correcta), ha activado su pensamiento analítico. Con una serie de experimentos como este, un grupo de investigadores cree haber demostrado que la razón no casa bien con la idea de dios. Esto, que parece una polémica heredada de los tiempos de Tomás de Aquino, faltaba probarlo empíricamente. Ahora, estas pruebas vendrían a demostrar que el pensamiento analítico induce a un mayor escepticismo religioso al menos temporalmente.

Investigadores de la universidad canadiense de British Columbia querían saber que relación hay entre el pensamiento analítico y las creencias religiosas. Partían de la idea aceptada por buena parte de los psicólogos y neurólogos de que el cerebro recibe la información de dos formas. Según la teoría del procesamiento dual, los humanos contamos con dos sistemas diferentes pero interconectados de pensar: uno intuitivo, más rápido, a veces vital en la toma de decisiones, pero también más sujeto al error. El otro sería el pensamiento analítico, que descompone las variables de una situación, establece relaciones y toma decisiones basadas en ese análisis.

Sobre esa base, los investigadores sometieron a unas 600 personas a una serie de pruebas. En el primer estudio, plantearon una serie de preguntas como la que inicia este artículo a 179 estudiantes. El enunciado de una de ellas era el siguiente: Si un bate y una bola de béisbol cuestan 1,10 dólares y el bate vale un dólar más que la bola, ¿cuánto cuesta la bola? La intuición nos invita a decir que diez centavos, cuando en realidad son sólo cinco. Una vez respondidas las preguntas, los sometieron a un triple test de religiosidad. Comprobaron que los más religiosos, eran también los que tiraban más de su intuición a la hora de responder los problemas.

El hecho de que la religión descansa más en la intuición que en un razonamiento sosegado ya fue demostrado en una amplio estudio realizado por neurocientíficos de la universidad de Harvard en septiembre pasado. Pero ahora, los investigadores canadienses querían comprobar si al contrario pasaba lo mismo: si el pensamiento analítico aumenta el grado de escepticismo religioso.

Para comprobarlo, realizaron una serie de cuatro experimentos para inducir a los participantes a dejar la intuición de lado en favor del análisis y donde el componente religioso era cada vez más sutil. Así, en uno de ellos, un grupo de participantes tuvieron que ver una serie de imágenes de la escultura El pensador, de Rodin, mientras que otro grupo de control observaba fotografías del Discóbolo de Mirón. Después, ambos tuvieron que rellenar un test de religiosidad. Comprobaron como los que disfrutaron de El pensador, mostraban un menor grado de creencia en lo sobrenatural.

En otra de las pruebas, el planteamiento era aún más sutil. Aprovechando que la falta de fluidez cognitiva dispara el pensamiento analítico, mostraron a dos grupos de 90 personas el mismo test para que puntuaran sus creencias religiosas. Pero usaron una artimaña para provocar esa falta de fluidez que obliga a la concentración: un test estaba escrito en una tipografía difícil de leer y el otro en una sencilla de leer. Las mediciones volvieron a revelar que los del primer grupo rebajaron su grado de creencia en dios.

Los investigadores, tal como explican en un artículo publicado en la revista Science, reconocen dos grandes limitaciones a su trabajo. Por un lado, este aumento de escepticismo religioso es temporal. "No hemos convertido a la gente en ateos", aclara Will Gervais, uno de los autores. Por el otro, están convencidos de que hay otros factores culturales, educativos, sociales... que afectan al grado de religiosidad. Pero lo que sí consideran demostrado es que hay una relación inversamente proporcional entre el pensamiento analítico y la fe.