El auge de las ‘apps’ para ligar

Ahora se liga a través del móvil. De la misma forma en que a finales de los años 90 la popularización de Internet y los chats revolucionaron la manera en la que se intentaba encontrar pareja estable o una compañía ocasional, ahora lo que está de moda es ligar a través del móvil.

Ya no hace falta invitar a copas ni hacer uso de arrojo y valentía para acercarse a hablar con alguien en la barra de un bar. Las nuevas tecnologías han hecho más rápido y directo el rito del cortejo y flirtear con otros es tan sencillo como descargarse una aplicación y comenzar a hablar con otras personas.

De hecho, se calcula que 1 de cada 5 parejas en todo el mundo se han conocido a través de Internet o aplicaciones móviles, porcentaje que sube hasta 3 de cada 5 en el caso de las parejas homosexuales.

No existen estadísticas oficiales de uso de este tipo de aplicaciones. De hecho, la mayor parte de los usuarios “no reconoce” utilizarlas. Un informe reciente elaborado por Tuenti Móvil señalaba que únicamente el 12% de los jóvenes españoles admitía utilizar aplicaciones para ligar, aunque otro estudio elaborado por la misma compañía en el mes de mayo, en el que la pregunta cambiaba a “¿has ligado alguna vez por el móvil?”, demostraba que el 80% había flirteado alguna vez usando este dispositivo.

Mientras que el 99% de los jóvenes sí admite usar programas de mensajería instantánea, entre los que WhatsApp es el rey, da igual que se reconozca o no el uso de apps para el ligoteo. Lo cierto es que éstas ocupan los primeros puestos en las tiendas de descargas de aplicaciones tanto de iOS (Apple Store) como para sistema operativo Android (en Google Play), y cada vez que aparece una nueva ésta se encarama a las primeras posiciones del top de descargas. Por desconocido que sea su nombre, todo el mundo quiere probar si detrás de esa aplicación se encuentra la persona que desean.

Más allá de nombres tan comunes en lo que es búsqueda de pareja por Internet como Badoo, Meetic o eDarling, que en realidad son páginas web de contactos, aunque también hayan lanzado al mercado sus propias aplicaciones móviles, en los últimos meses están apareciendo nuevas apps nativas, sólo para móvil, que tienen como principal finalidad ayudar a los usuarios de smartphones a ligar.

La mayoría lo hacen basándose en un modelo de negocio freemium, es decir, de descarga gratuita pero ofreciendo funcionalidades de pago a los usuarios (como poder enviar mensajes directos, ver más perfiles o ampliar las opciones de búsqueda). Lo que es común a muchas de ellas también es el uso de la geolocalización, que permite saber, como dato adicional, lo cerca o lejos que se encuentra la persona o personas en la que estamos interesados.

Pero… ¿cuáles son estas nuevas aplicaciones que van a permitirnos acabar con la soltería, o con la soledad? De todas ellas, Tinder es posiblemente la más conocida (aunque no es la única). Su funcionamiento es muy sencillo. Una vez configurado el perfil, sincronizándolo con nuestra cuenta de Facebook podremos seleccionar las fotos que queremos que aparezcan y la información que haremos pública. Asimismo, estableceremos el sexo de la persona que buscamos y una horquilla de edad orientativa.

Con esto nos aparecerán las fotografías de las personas cercanas que coincidan con nuestra descripción y tan sólo tendremos que deslizar la imagen hacia la izquierda si el usuario no nos interesa o hacia la derecha si nos parece atractivo. Esto puede hacerse también pulsando un botón con el icono de corazón o de una cruz en forma de rechazo. Si la otra persona también se ha mostrado interesada por nosotros, podremos comenzar a chatear.

Tinder de momento es gratuita, aunque su fundador ya ha anunciado que durante el mes de noviembre lanzarán sus primeras funcionalidades de pago. Una vez que ya han conseguido una masa de usuarios suficiente, lo que buscan es monetizar el servicio.

Gratuito es también BeLinked, una aplicación de funcionamiento similar, pero que en este caso se utiliza sincronizando el perfil de LinkedIn en lugar del de Facebook. Cabe decir que en ninguno de los dos casos se comunica en estas redes sociales que estamos usando una app para ligar, sino que la sincronización se realiza sólo para poder tomar “prestadas” las fotos y datos del usuario.

En BeLinked también hay que rellenar unos campos para tener acceso a la colección de fotografías de personas cercanas que nos podrían interesar. Son imágenes más profesionales y a menudo van acompañadas por el cargo y profesión de la persona. Otra forma, un tanto más seria, de ligar, pero con la misma mecánica: “me gusta” o “no me gusta”.

Un elemento diferenciador introduce otra de las últimas apps en llegar al mercado: Happn. También gratuita, ofrece funcionalidades extra gratis a las chicas pero de pago para los chicos, lo que ha generado cierta polémica. De todas maneras, su filosofía es clara: en la pantalla de tu móvil aparece recomendadas únicamente las personas con las que te has cruzado.

Así, si te ha parecido atractiva una persona en la cola del mercado o caminando por la calle, si quieres iniciar una conversación con ella tan sólo tienes que mirar en Happn si tiene un perfil activado. Como siempre, tú indicarás que te resultó interesante y tendrás que esperar a descubrir si la situación es recíproca para iniciar una conversación.

Junto a estas tres aplicaciones, que ahora mismo hacen furor, hay otra que es para “usuarios avanzados” o que busquen otro tipo de emociones. Se llama 3nder y, como su propio nombre indica, está pensada para quienes creen que dos no son multitud y necesitan una tercera compañía. Presenta el mismo modo de funcionar que las anteriores y también se basa en la geolocalización para encontrar a usuarios cercanos con los mismos intereses.