Florentinato II: El precio de la fama

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Casillas, Ramos, Albiol, Garay, Diarra, Lass, Van der Vaart, Guti, Cristiano, Raúl e Higuaín. Esos son los once jugadores con los que el Real Madrid terminó el partido de ayer, el más importante de esta tercera legislatura del Florentinato. En parte por las lesiones, en parte por las sanciones, en parte por las presiones. Es cierto. Todo en esta vida tiene su justificación, pero resulta que en el equipo que anoche abandonaba el campo entre silbidos –lógicos- e indiferencia –preocupante-, había tres futbolistas que tuvieron más de pie y medio fuera del equipo en Junio, otro que fue declarado transferible y por el que nadie preguntó, por lo elevado de su ficha, otro que ha sido titular en sólo tres de los 25 partidos de liga disputados hasta la fecha, otro en el que Manuel Pellegrini no confía desde hace tiempo y uno más, delantero, el séptimo de esta lista, que ha marcado un gol en los últimos cuatro meses. Siete de once y eso, 300 millones de euros más tarde.

No es una crítica demagógica a nadie y, si lo parece, pido perdón por adelantado, porque no es lo que pretendo. Se trata sólo de constatar un hecho que me permite, de paso, abordar la eliminación de ayer, desde un punto de vista estrictamente futbolístico: ¿Pueden esos once jugadores mencionados anteriormente, hacerle dos goles al Olympique de Lyon? Probablemente sí, pero sólo probablemente ¿Puede un equipo así, caer eliminado ante el cuarto clasificado de la liga francesa? Aquí no hace falta teorizar porque la realidad ya nos ha dado la respuesta.

Sin abandonar el debate futbolístico, creo que ayer, conociendo a ambos contendientes, todo era posible y, desde mi humilde opinión, eso es lo que cierto sector de la prensa y de la afición, cegados por los millones, muchos de los cuales no estaban ayer sobre el césped, se niegan a aceptar. Entiendo, por tanto, que lo que pasó pueda provocar alarma, pero lo que no comprendo, en ningún caso, es esta sensación de extrañeza desmedida y de fracaso deportivo apocalíptico. A Guti y a Casillas, por ejemplo, no les extrañó en absoluto lo sucedido, a tenor de sus manifestaciones, a la conclusión del partido. Normal. Conocen muy bien la casa y sus interioridades, son madridistas hasta la médula y, por eso, sus opiniones deberían ser tenidas muy en cuenta. Más que las de cualquier periodista, obsesionado con ponerle un solo nombre al supuesto problema y obstinado, hasta la saciedad, en llevar la razón a cualquier precio.

En mi opinión, el Real Madrid, desde un punto de vista puramente económico, ha invertido de manera excelente su dinero este verano. Han sido varios fichajes, en su gran mayoría, absolutamente incuestionables. No obstante, del mismo modo, sostengo, en este caso desde una perspectiva meramente futbolística, que ese dinero ha sido bastante mal distribuido. Si no, no se explica que haya tanto “pieymediofuera estival”, entre los once a los que se les encomendó la tarea de recomponer la situación, tras ese gol de Pjanic. Pero es lo que hay porque el modelo actual del conjunto blanco, está más asentado sobre la rentabilidad económica que sobre el equilibrio futbolístico y, vuelvo a recalcar, que no lo critico. Hay que entenderlo y aceptarlo así, nada más. Y al socio que no le guste, ya sabe lo que tiene que hacer en las urnas, cuando corresponda.

En este Real Madrid de Florentino Pérez, de Jorge Valdano y de esa ingente masa social que bendijo su llegada, los nombres de Cristiano Ronaldo, Kaká y Benzema son innegociables. Si nos olvidáramos de las connotaciones económicas, cosa que, insisto, no podemos hacer, se podría haber invertido todo ese dinero en estabilidad deportiva y en la confección de un equipo, conservando, de paso, a varios de los futbolistas que tuvieron que salir y que hoy están en la mente de todos. Pero insisto, ese no es el modelo de este Real Madrid y, por tanto, fantasear con él resulta absurdo.

En su primera etapa, Florentino colocó la marca Realmadrid en la cima del mundo, pese a una discreta cosecha de éxitos deportivos. No hay ni un solo indicio de que en esta ocasión vaya a ser diferente. Este es el verdadero precio de la fama y lo de hoy no hace sino corroborarlo: en todo el mundo se habla del Real Madrid, y, entre tanto, las vitrinas siguen vacías. Y esa será, para bien o para mal, que cada uno lo juzgue a su manera, la tónica de los próximos años. Con Pellegrini ó sin él.

5 Comments
  1. Oscar says

    Como siempre, original análisis y muy acertado.

  2. Franesco says

    Creo que todo se resume en que el Real Madrid, desde hace seis años, suele alinear al menos dos o tres jugadores en el once que no tienen nivel de alta competición, porque la configuración de sus plantillas así lo exige: si gastas 80 en Ronaldo, te toca tener a su lado a Garay, o Marcelo o al propio Albiol, quien como mucho es el cuarto central español (tras Puyol, Piqué y Marchena).

    Todo deriva de no saber de fútbol, ni de deporte en general: en ciclismo alguien tiene que acompañar al maillot amarillo hasta la última ascensión; en tenis no puedes poner un maula en Copa Davis, porque por mucho Nadal que tengas el 0-2 estará asegurado y siempre puedes perder el dobles; y en la NBA, aunque en tu equipo tengas a Jordan y Larry Bird, si tu pivot mide 1,95 el contrario te arrasará bajo los aros.

    Pero, claro, es más divertido fichar a Kaká y Cristiano por lo que costaría traerte a Villa, Silva, Cesc y Fernando Torres. ¿O no cuestan lo mismo aquellos 2 que estos 4? Pues como 4 son más que 2, si traes a esos 2, tienes que apechugar con que los 2 añadidos sean del nivel que citas en la primera frase. Y en ese equipo sólo valen 3 y medio: Iker, Sergio, Cristiano y, a medias, Higuaín.

    ¿Sólo una pregunta?: ¿Quién es Benzema?

    Lo has clavado, amigo.

  3. jonathan says

    A ver qué club echa las agallas suficientes para poner de moda la rebaja en los fichajes y que trabajen los jugatas. Hará historia.

  4. vilaboi says

    Es curioso leer el articulo de arriba hoy 22/3010, nadie os ha dicho que las politicas del compro al precio que sea NUNCA SALEN BIEN, lo lamentable es que el hace estas afirmaciones sea ingeniero, debe ser el forofismo, en BCN hemos visto tantas veces lo de «Floren». En fin siempre podran poner de delantero centro a LLull, y en vez de uno que la tire con la mano desde fuera del área y que valga tres, asi fijo que ganan, pero jugar a fútboles otra cosa. Entramos en la era del Florentinato por España naturalmente. Aúnque en la Champions España sea sinónimo de FCB, duele pero es lo que hay, queridos compatriotas.

  5. imasfutbol says

    Hola, soy un estudiante de estadistica y te sigo mucho en ondacero, me gustaria dedicarme a la estadística aplicada al deporte y me encantaría que me dieras un par de consejos para evolucionar en este mundo.
    Agradeceria mucho una respuesta, un saludo.

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