No era una comisión más. Lo que ayer se escuchó entre las paredes de la sala Constitucional del Congreso de los Diputados no eran informes técnicos, ni artículos farragosos de un Reglamento o de una Ley por delimitar. Ante la comisión de justicia, dos testimonios principales, el de Antonio Barroso y María del Mar Soriano, en representación de la Asociación Nacional de Afectados por Adopciones Irregulares, ANADIR, y de la Plataforma de Afectados Clínicas de España. Ambos pusieron voz a los afectados por el robo de niños en hospitales de toda España desde los años 40 hasta principios de los 90 y pidieron Justicia a los diputados para que hagan suya su causa y les acompañen en su camino a la verdad.Y lo hicieron ante unas señorías no habituadas a escuchar tragedias ni vidas rotas, sino informes y documentos llenos de tecnicismos.
La comparecencia tenía lugar tras el acuerdo suscrito por el Pleno de la Cámara el 22 de febrero de 2011 ante una iniciativa de ER-IU-ICV para escuchar a las víctimas de lo que calificaron como un escándalo, un atentado a la dignidad humana y un fraude de magnitud considerable que el sistema político y jurídico imperante en aquellos años facilitó.
Inició su relato Antonio Barroso. Con un tono llano narró su trayectoria vital escrita en unos folios. Y el silencio inundó la sala. Su historia merece ser escuchada. “Señorías, en 2008, un hombre agonizante, que no quería llevarse a la tumba el peso insufrible de un secreto espantoso, le confesó a su hijo que le había mentido toda la vida, que no era su hijo biológico; que era un niño comprado. Aquel hijo, mi amigo Juan Luis, me llamó por teléfono: ‘Antonio -me dijo-, mi padre se está muriendo y me ha confesado que a ti y a mí nos compraron en Zaragoza a un cura y a una monja’”.
Antonio siempre había dudado de su origen. “En el colegio algunos compañeros me decían vengativamente que mi madre no era mi madre. Recuerdo la tristeza que me producía su crueldad y lo mucho que esa frase me hacía pensar. En el patio siempre estaba solo; a veces pensando, otras llorando. Aquella duda, que empezó a ser como un tatuaje permanente en mi piel, me hacía sentir inferior a los demás, un ser minúsculo, desdichado, un niño diferente sin ilusión por nada. Lloraba muchas noches en mi cama tratando de evitar que aquellos que decían ser mis padres pudieran advertir el dolor por mi vacío y mi tristeza, una sensación extraña de indeterminación. ¿Por qué? ¿Por qué mis padres no eran mis padres? Muchos adoptados entenderán que no me atreviera a preguntar abiertamente si era cierto. Algo entre el miedo a perder a los únicos padres que conocía, el temor a enfadarles o incluso el riesgo a parecer un desagradecido. Cuando eres un niño tampoco tienes recursos para averiguar fehacientemente todo esto. Los padres son nuestra verdad. Con trece años me armé de valor, del que no se tiene con esa edad, pero con la necesidad profunda de saber y le pregunté a mi madre si yo era adoptado. Ella lo negó todo rotundamente. Luego, se puso a llorar".
No bastó. Era el momento de salir de dudas. Antonio fue al Juzgado de El Vendrell en Tarragona y solicitó su partida de nacimiento al Juzgado de Zaragoza, donde estaba inscrito. En la partida de nacimiento no se escondía ningún secreto. Decidió cerrar aquel capítulo. Hasta que, a los 38 años, aquella llamada reavivó aquella duda. Las partidas de nacimiento habían sido falsificadas. Y Antonio regresó a aquel laberinto y empezó la búsqueda. Juan Luis y él decidieron emprender una batalla judicial. Denunciaron suposición de embarazo, apropiación ilegal de un menor y falsificación de documento público. Pero los tribunales les dieron la espalda y su causa se archivó. “Era la segunda injusticia grave que se cometía con nosotros: primero nos vendieron y luego nos querían impedir lo que la ley permitía a todas las personas nacidas en este país, el derecho a saber”. Creían ser los únicos pero, cuando hurgaron en su pasado, descubrieron otras historias como las suyas y pusieron en marcha una asociación a la que llamaron Anadir , que ya da cobijo a más de 1000 personas en búsqueda de sus orígenes.
Desde entonces escuchan dramas igual de terribles que el suyo. Antonio quiso ayer compartirlo con los diputados. “No son especiales, pero todas tienen un dolor profundo. Les hablaré de Salvador, un vecino de Tarrasa con veintidós años y mucha ilusión por formar una familia. Él tuvo la inmensa fortuna de ver nacer a su hija. Cuando lo cuenta, emocionado, dice que la niña era preciosa. Pero su mujer empezó a sentirse mal. Los médicos, ante la gravedad de su estado, la trasladan a Vall d'Hebron, en Barcelona. Salvador se va con ella. Ha visto a su hija y cree que la deja en buenas manos. Poco después, la mujer fallece y, cuando está velando el cuerpo de su mujer, le dicen que la niña ha muerto también. Salvador cree enloquecer. Entierra a su mujer y regresa para enterrar a su hija, pero en la documentación que acredita la muerte del bebé lee, estupefacto, que la niña había nacido muerta. Cuando va a reclamar, le aconsejan que lo deje, que la pena no le deja ver con claridad lo que ha ocurrido. El hombre, vencido, entierra la caja que totalmente sellada le dan en el hospital y no le dejan ver el cuerpo. Hace ocho meses exhumó los restos. Pertenecían a un varón y, por supuesto, no era su hijo".
La de Nieves fue una adopción bajo una apariencia de total legalidad. Como hija de madre desconocida podía ser adoptada dentro de los límites marcados por la ley. Sin embargo, el pasado 29 de diciembre y, después de una larga búsqueda de sus orígenes, encontró a su madre. La anciana no podía dar crédito, tenía en sus manos un certificado de defunción de aquella recién nacida que ahora rondaba los 40 años. Pero las fechas y otros muchos datos coincidían y decidieron comparar sus perfiles genéticos. Madre e hija.
María Labarga consta en su partida de nacimiento como hija biológica. Durante décadas su madre ejerció sobre ella un maltrato psicológico reiterado y cruel. Hace meses, le confesó que era comprada. El caso de Paloma es espeluznante. Durante días la tienen sedada en la maternidad. Cuando despierta y recupera la consciencia le comunican que su hija ha fallecido y que ya está enterrada. A su madre una monja le dijo que había tenido una nieta preciosa. Quiere encontrar a su hija para decirla que ella no la vendió.
Una historia tras otra. Y la sala seguía en silencio. Tras esbozar estas historias, Antonio espetó la pena que sentía por “tener que contar todo esto aquí en el Congreso de los Diputados de mi país. Nunca tenían que haber ocurrido”. Historias a la intemperie por pura necesidad. El dolor al descubierto para obtener la ayuda que les ha sido negada durante muchos años, incluso de familiares muy cercanos. “Nos tomaron por locos”, añade. Y aprendieron a callar y a mirar hacia otro lado. A no contar sus historias. Algunas madres, incluso, se obligaron a olvidar la fecha del parto. “¿Cómo se puede aceptar la desaparición de un hijo sin más? ¿Cómo se puede mantener en silencio tanta indignación? Esas madres son auténticas heroínas a las que la sociedad casi les exigió ocultar su desgarro y lo hicieron y callaron e incluso algunas llegaron a olvidar para no enloquecer", les dijo a sus señorías.
Y, a continuación, Antonio les pidió que el Congreso les ayuden en esta lucha. Con su presencia en esta Cámara, han dado un paso. La sociedad ya sabe que existen, pero son conscientes de que su trabajo no ha hecho más que empezar. Están desbordados. Hablan de 300.000 afectados. “Tendremos que documentar sus historias, escuchar a las víctimas, investigarlas y, por supuesto, darles nuestro apoyo psicológico y jurídico”. Para esta labor necesitan, asegura, ayuda económica para acometer las pruebas de ADN, un teléfono gratuito de información y una oficina en cada comunidad para asesorar a todos los que crean que pueden ser afectados y poder reconstruir documentalmente sus vidas. Y, sobre todo, una Ley para acceder de igual manera y en todo el territorio a informes médicos, a registros de pacientes, a informes de autopsias, a historiales clínicos, a partidas de nacimiento y defunción, a legajos de abortos y a todo tipo de registros en cementerios e iglesias. Además, que se adopten las medidas legales necesarias para que no se vuelva a traficar con seres humanos y se refuercen los sistemas de identificación de los recién nacidos y los controles de los médicos y funcionarios que participan en las inscripciones de los recién nacidos.
María del Mar Soriano hizo suyas estas reclamaciones y añadió, además, la oportunidad de crear una Oficina Nacional de Búsqueda y que los historiales médicos incorporen el cariotipo genético de cada ciudadano.
Será un camino difícil, señalaron desde el grupo socialista, dado el tiempo transcurrido, la posible prescripción de los delitos, la falta de antecedentes en un hecho de esta naturaleza, las dificultades de investigación, el parto anónimo, que terminó siendo la puerta de muchas apropiaciones o de que los padres adoptivos pudieran inscribir a los niños como hijos propios.
Pero todos los diputados recogieron el guante, ante tal aldabonazo, como lo calificó la diputada de UPyD, Rosa Díez. La Comisión de Justicia en pleno escuchó sus peticiones y se comprometió a estudiar la forma de ponerlas en marcha. Se reunirán como mínimo una vez más antes del fin de la legislatura para evaluar los avances logrados, aunque los grupos parlamentarios han coincidido en señalar la necesidad de darle un carácter permanente. Su trabajo acaba de comenzar. Hoy se ha dado el empujón necesario, señaló Joan Tardá, uno de los promotores de la iniciativa, porque el primer escalón es saber la verdad. "Desde esa perspectiva usted nos han abierto los ojos", insistió Emilio Olabarría, del PNV.
Yo soy madre adoptante y quiero ayudar a mi hija en esta lucha.
Ella nació en la Clínica San Ramon el 5 de junio de 1980, era un jueves y el sabado ya la teniamos en nuestros brazos, la quiero con locura y por esa razon quiero ayudarla.
Soy madre adoptante, mi hija nació en la Clínica San Ramon el 5 de junio 1980, ella quiere saber, y yo quiero ayudarla.
Me alegro de que haya madres que quieran ayudar a sus hijos a buscar sus orígenes, yo también haría lo mismo si mi hija fuera adoptada. Mi caso es al contrario, yo perdí a mi hijo en 1980, estoy segura de que también fue robado. Supongo que tendría que pasar, que estaba escrito. Ánimo Laly
Hola ANTONIO DESDE LA PALMA,NO TE OLVIDES DE QUE APARTE DE LA CLINICA DON RAMON HAY OTRA ENTIDAD LLAMADA ( MI CASA) EN ZARAGOZA ALLI SE COMETIERON MUCHOS ,MUCHOS ROBOS DE NIÑOS-ÑAS A CARGO DE LAS HERMANAS ASUNCION VIVES LLOYENTS,Y HERMANA CARMEN PUIG ….NO OS OLVIDEIS HAY CASOS GRAVICIMOS YO SOY PRUEBA DE ELLO…. UN SALUDO Y ANIMO INDAGAR EN ESE TEMA YA QUE YO ESTOY LEJOS Y A USTEDES LES ES MAS FACIL. HASTA LA PROXIMA
Tengo un caso parecido al dé manoly con un niño robado en la maternidad dé zaragoza por la hermana vives un saludo
Hola Amigos, m ealegra encontrar este forum abierto a opiniones. Curiosamente, yo tengo 29 anyos y esta manyana he estado hablando con la hermana Asuncion Vives. A mi me dieron en adopcion a mis padres nada mas nacer yo naci un 27 de noviembre de 1981….no quiero sospechar pero tampoco quiero cerrar los ojos a lo que ocurrio. La hermana Vives me ha dicho y ha hecho incapie que mi adopcion fue totalmente legal pero que no tiene registro y que hasta el dia que me muera no podre ponerle un nombre ni una cara a quien fue mi madre biologica. Si alguien lee esto y piensa que me pudiera ayudar con el tema o tan solo charlar agradeceria que se pusiera en contacto muchisimo. Mgfernandez1981@gmail.com
hola yo tube una hija en el año 1975,a mi no me la enseñaron y e pedido mi historial clinico y no me dan nada necesito k algien se ponga en contacto conmigo y adonde tengo k acudir gracias espero k me digais algo lo necesito.
YO TAMBIÉN SOY ADOPTADA A TRAVÉS DE ASUNCIÓN VIVAS LLORENS.NACÍ EN ZARAGOZA EL 18/06/1975.
MI EMAIL inma_castillo@ono.com
Buscamos ansiosamente una niña nacida el día 21 de Julio de 1981 en Madrid, en el hospital Nuestra Señora del Rosario( Es muy probable que modificarán la fecha y tal vez la clínica). Aunque muchos hijos adoptados en Madrid piensan que nacieron en el hospital San Ramón de Madrid, eso es muy cuestionable( ¡es un error muy grande!, porque está demostrado, y así se recoge en documentales y testimonios vivos, que muchos bebés nacieron en otros hospitales de Madrid y aparecen en los documentos como adoptados en el hospital San Ramón, donde funcionaba el aparato burocrático corrompido y bajo la dirección de un médico indeseable llamado Dr Vela y una monja. También es lógico que en la adopción modificaran las fechas reales del nacimiento. En el hospital Nuestra Señora del Rosario había una monja llamada Pura que trabajaba en la Clínica Nuestra Señora de El Rosario que fue denunciada por adopciones ilegales y que según aparece en varios reportajes publicados por el diario ”El País” tenía, desde hacía muchos años, un negocio de adopciones ilegales en diversas clínicas de Madrid( Loreto, Rosario, Santa Cristina, San Ramón..) y otras ciudades de España. Esta monja me consta por testimonios vivos que trabajó en la Clínica Nuestra del Rosario al menos entre los años 1980 a 1984, también sé que estuvo en la Clínica Loreto de Madrid.. Dirección de correos: berquibiri1@hotmail.com y athenae368@hotmail.com
Yo soy adoptado por la herman Vivas en Zaragoza y discrepo con todos vosotros la mayoría de adopciones eran consentidas, las madres vivian con muchos de los que ahora son padres adoptivos de otros niños. La hermana nos quería a todos los niños, y cuidaban de los mas desvalidos que nadie quería, es una pena que seais tan desagradecidos hablando de niños robados, la mayoría de las madres, no querían a sus hijos.
me robaron un hijo el dia 20 del 8 de 1967 coruña juan canalejo hoy materno infantil era jemelos eramos un matrimonio y ya teniaos un hijo ni era una mujer abandonada ni lo qeriamos dar me lo robaron ahora se cagan por los pantalones
hola busco a mi madre naci el 24-12-1985 en casa cuna valencia. mi madre era de etnia gitana. y tambien busco a mi hermana que fue dada en adopcion tambien para zaragoza creo. tendra unos 30 años aprocximadamente. tambien en casa cuna
hola busco ami hermano que nacio el 1 de mayo 1977 en la clinica begoña de santuxu y fue trasladado en ambulancia al hospital de cruces de bilbao y ayi al dia siguiente le dijeron ami padre que abia muerto y no les dieron ningun acta de difuncion ni nada,solo dijeron que abia muerto por una malformacion,en los papeles que emos pedido al registro civil pone que nacio y murio el dia 2 mayo y que fue enterrado el dia 10 mayo,y en el cementerio nos an dicho que fue levantado el cuerpo en el año 90 0 91,y amis tios ya fallecidos les enseñaron un bebe con la cabeza mas grande que el cuerpo,solo pido justicia y poder conocer ami hermano algun dia