25 años de ‘La lista de Schindler’ en 25 anécdotas

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El festival de Tribeca fue el primero en celebrar el 25 aniversario de La lista de Schindler. Allí se encontraron Steven Spielberg y parte del reparto, entre ellos Liam Neeson y Ben Kingsley. Al acabar la proyección, Spielberg dijo: “He vuelto a ver la película entera, cosa que hacía muchísimo que no hacía, y me he sentido sencillamente orgulloso”. 

La cinta, restaurada a la versión 7.0 de Dolby Digital Audio y adaptada para una proyección en láser que le da a la imagen en blanco y negro gran nitidez y definición, vuelve este mes a nuestras salas. Es una buena ocasión para volver a verla en una sala o para que la vean a lo grande los que no conocen todavía una película cuya producción recordamos en 25 anécdotas:

1. Entre los cineastas que pudieron adaptar la novela de Thomas Kenneally estaba Martin Scorsese. Spielberg también tanteó a Roman Polanski, pero rechazó rodarla porque, dijo, de niño había sufrido el holocausto en Polonia y era un tema demasiado personal. Sobre el trabajo de Spielberg dijo: “Yo no podría haber hecho un trabajo mejor que el de Spielberg porque no podría haber sido tan objetivo como él”. Años después Polanski rodaría El pianista.

2. Billy Wilder también se había planteado dirigirla. Cuando vio el trabajo de Spielberg le dijo: “No podían haber encontrado a un hombre mejor. Esta película es la absoluta perfección”.

3. Al que no le hizo ni puñetera gracia el estreno de La lista de Schindler fue a Stanley Kubrick, que por la película de Spielberg canceló su proyecto sobre el Holocausto Aryan Papers, también ambientada en Polonia. Sobre la película dijo: “No va sobre el Holocausto, que fue el asesinato de más de seis millones de personas. Esta película trata sobre 600 que sobrevivieron”. En realidad fueron más de 1.000.

4. Según Spielberg, la famosa niña del abrigo rojo de la película simboliza cómo el gobierno de Estados Unidos conocía el Holocausto y no hizo nada por evitarlo, ni bombardear las vías férreas alemanas para parar los trenes de la muerte.

5. El mas duro detractor de la película fue Claude Lanzmann, director del magistral documental Shoah y que dijo que el film era un melodrama kitsch que deformaba la verdad. Para colmo, el Holocausto se mostraba a través de los ojos de un alemán.

6. No tuvo que ser agradable para Spielberg escuchar eso porque reconoció la influencia de Shoah. Gracias a este documental decidió no usar storyboard y rodar como si grabase un documental. Casi la mitad de la película está hecha cámara en mano.

7. Otro de los detractores de la película fue Michael Haneke, que atacó la famosa secuencia de las duchas: “No sabemos si de las duchas sale agua o gas. Solo haces algo así con una audiencia ingenua como la estadounidense”.

8. El director eslovaco Juraj Herz denunció que esa escena de las duchas está plagiada, plano por plano, de su película Zastihla mě noc, de 1986. El tipo quiso demandar, pero no encontró el dinero para pagar a los abogados que pleiteasen con Spielberg y Universal.

9. Para lograr esa barriga y parecerse al sanguinario Amon Goeth, Ralph Fiennes se dedicó a beber Guinness como un irlandés en el día de San Patricio.

10. Harrison Ford rechazó el papel protagonista porque no quería que nadie relacionase la película con Indiana Jones, conocido antinazi. Demasiado frívolo.

11. Spielberg se planteó rodar la película en alemán y polaco, pero descartó la idea porque no quería distraer sus duras imágenes con subtítulos.

12. El Presidente de Universal le pidió filmar también en color para vender copias en VHS en color. Spielberg dijo que por encima de su cadáver.

13. Thomas Keneally, autor de la novela, dijo que no le pagaron un puñetero dólar por su contribución al guión.

14. El guionista Aaron Sorkin (no acreditado) pulió algunos diálogos.

15. El rodaje empezó el 1 de marzo de 1993 en Cracovia, Polonia. Duró 75 días.

16. Cuando Liam Neeson rodaba en la famosa entrada de Auschwitz, el productor Branko Lustig se acercó a él y le dijo: “¿Viste aquellas celdas? Yo estuve en una de esas”.

17. Al ver a Ralph Fiennes vestido con el uniforme de las SS, una mujer le dijo: “Los alemanes eran una gente encantadora y no mataron a nadie que no se lo mereciera”.

18. La producción sufrió pintadas antisemitas.

19. Varias actrices tuvieron una crisis de ansiedad rodando la mencionada escena de la ducha. Una de ellas había nacido en un campo de concentración.

20. Por la tarde, tras el rodaje, Spielberg montó la recién rodada Parque Jurásico.

21. Para liberarlo de la mala atmósfera que desprendía aquel rodaje, Robin Williams, con quien dos años antes había rodado Hook, llamaba a Spielberg por teléfono para contarle chorradas divertidas.

22. Para no caer en un estado de ánimo depresivo, Spielberg confesó que también veía episodios de Seinfeld.

23. Cuando Spielberg le propuso a su inseparable músico John Williams que compusiese la banda sonora de la película le respondió: “Necesitas un compositor mejor que yo para esta película”. A lo que Spielberg dijo: “Lo sé, pero están todos muertos”.

24. La película ganó siete Oscars y tres Globos de Oro.

25. Con la ayuda del éxito internacional de la película, Spielberg creó la Fundación de Historia Visual Supervivientes de la Shoah para crear un archivo de testimonios de supervivientes del Holocausto.

1 Comment
  1. ninja45 says

    La alegría con que algunos del “viva España” más agresivo usan términos vinculados al fascismo, para degradar a sus opositores, es una de las peores maldades de estos tiempos. Personalmente, nunca deberían usarse esos conceptos vinculados a la peor historia de la humanidad para atacar a los contrarios, porque ello significaría banalizar su maldad, y por respeto a las víctimas, esa es una perversión que no se deberían permitir. El debate público puede ser enconado, especialmente cuando los conflictos están en carne viva, pero esta gentuza lo conduce todo a nombrar a Hitler, al nazismo y etcétera, no sólo denota una debilidad argumental patética, sino también una severa falta de decencia. Sea como sea, desde que el conflicto catalán ha vuelto a estallar nos han acusado de todo, de nazis, de terroristas, de xenófobos… Y dichas acusaciones no se han realizado en las vísceras de internet, allí donde habita la miseria más ruin, sino en bocas de dirigentes políticos de alta cuna y baja dignidad. No olvidemos que, desde Cospedal hasta Bono, pasando por un sinfín de líderes de diversa ideología, pero igual rancio españolismo, han usado esos términos sin pudor. Ahora la cosa ha mutado hacia otros sinónimos de menor rango, pero igual intención, cuando no han mutado las palabras para decir lo mismo. La etiqueta “lazis”, por ejemplo, para señalar a los independentistas, es una fusión indecente entre lazos y nazismo. Y quienes lo usan saben que están usando la ideología más terrible de la historia para combatir una idea democrática. Lo peor es que ese término tampoco es exclusivo de las cuevas de las redes sociales, sino de denigrantes escaños parlamentarios. A la m. con la Injusticia española prevaricadora, títere de los fascistas y corruptos, hazmerreír de Europa. Si me pegan, me divorcio. Som República !!*!!

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