El candidato ‘outsider’ a la secretaría general del PSOE

Un fantasma que goza de muy buena salud recorre el PSOE. Se llama Pedro Sánchez Castejón y, además de diputado, es profesor de Estructura Económica y Pensamiento Económico.

El uso del término recorrer, en este caso, es literal. Desde que decidió aspirar a ser el candidato presidencial en las primarias del PSOE, hace casi un año, se ha recorrido, en tren o en su coche, nada menos que 30.000 kilómetros de la geografía española. Y no para ir a los grandes mítines o los actos electorales relevantes, no. Se ha pateado, dicen quienes han decidido apoyarle, cientos de agrupaciones de base en barrios o pequeños pueblos.

Varios diputados consultados por cuartopoder.es, algunos de los cuales criticaron duramente a la dirección del partido en la reunión del Grupo Parlamentario Socialista que se celebró esta semana, anunciaron su decisión de apoyar la candidatura de Pedro Sánchez por considerar que da el perfil idóneo de la oferta que debe hacer el PSOE en el siglo XXI. Son diputados de Andalucía, Baleares, Canarias, Castilla-La Mancha y Extremadura, pero aclaran que ellos son solo los primeros porque en todas las organizaciones territoriales hay un movimiento creciente en su favor.

Uno de esos diputados precisó a este diario que se equivocan quienes le consideran un hombre del aparato solo por el hecho de que fue José Blanco el primero que le dio juego político en Madrid y porque colaborara con Ramón Jáuregui en la organización de la Conferencia Política del pasado noviembre. Explican que fue la mismísima Elena Valenciano, como vicesecretaria y número dos de Alfredo Pérez Rubalcaba, la que le llamó a capítulo por su actividad frenética de promoción de su candidatura. A la ahora portavoz del grupo socialista español en el Parlamento Europeo no le gustó que aprovechara la publicación de su libro La nueva diplomacia económica española (Delta Publicaciones, 2014)  para promocionarse como alternativa de futuro en las primarias. Y se recuerda que no en vano siempre ha entrado de rebote en el Congreso por no ir en puestos de salida. Primero sustituyendo a Pedro Solbes, en la legislatura pasada, y luego a Cristina Narbona en la actual.

Los parlamentarios consultados sí reconocen, sin embargo, que su gran valedor, su padrino político, es Felipe González. El ex presidente apuesta por él porque lo considera el hombre idóneo para renovar el partido sin romper amarras con la vieja guardia. Piensa que está preparado y que su conexión con las nuevas generaciones de españoles es la adecuada.

De hecho, los suyos dicen que se mueve por las redes como Pablo Iglesias, el líder de Podemos, por su casa. Y desde hace meses hay colectivos que le promueven en grupos de Facebook cuyos títulos definen sus intenciones. Uno de ellos es ilustrativo: “Pedro se escribe con P de Presidente”. El más actual es “Yo, con Pedro”. Él mismo gestiona el blog En el mismo barco, y tiene abiertos perfiles en Facebook, Twitter, Google+, YouTube y Flickr.

También tiene de común con Iglesias el hecho de haber sido tertuliano. Mientras dejó de ser diputados, acudió a La noche en 24 Horas de TVE. Lo dejó cuando sustituyó a Narbona en enero de 2013.

Sobre su juventud y su condición de hombre apuesto también se habla mucho para bien y para mal. Quienes le aprecian le dicen en broma que tiene que ir a hacerse la cirugía estética para afearse un poco para que no le reprochen que sea candidato “por guaperas”. Y señalan, también con humor, que es el más joven de todos los candidatos porque, aunque tiene ya 42 tacos, cumple años los 29 de febrero; es decir, sólo los bisiestos.

Ahora, insisten los suyos, su reto es romper la malla del aparato. Sobre todo, la que está tejiendo Susana Díaz, que ya alcanza a Valencia y Madrid, para que el secretario general sean ella o quien ella elija. Y, además, en eso compite con Eduardo Madina, por quien apuestan la mayoría de los diputados, los cuadros y la militancia del PSOE, según los sondeos internos. Sobre todo, reconocen los partidarios de Sánchez, porque en los ámbitos internos de la organización y en la sociedad es mucho más conocido que él.