MEDIDAS INSÓLITAS / El Ejecutivo ha aplicado una versión dura del mencionado artículo

Rajoy pulsa el botón rojo del 155: suspenderá al Govern y limitará al Parlament

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Rajoy preside el Consejo de Ministros.
El presidente del Gobierno en el Consejo de Ministros extraordinario donde se han aprobado las medidas derivadas del 155.

El Gobierno y el PSOE habían vendido que habría una aplicación del 155 ‘light’. Sin embargo, el Consejo de Ministros ha acordado solicitar al Senado el poder para destituir al Govern y limitar las funciones del Parlament. El objetivo es convocar elecciones dentro de un plazo de seis meses.

La primera gran medida que el Ejecutivo solicitará al Senado es el “cese” del Gobierno de la Generalitat, lo que incluye al president, Carles Puigdemont, al vicepresidente y a todo su equipo. La Administración de la Generalitat continuará funcionando de forma ordinaria bajo las órdenes de los órganos o autoridades que el Gobierno "cree o designe". Rajoy ha aclarado en rueda de prensa que “en principio la idea será que los ministerios asuman esta responsabilidad a lo largo del plazo en que dure esta situación excepcional".

El presidente del Gobierno central asumirán también la capacidad de disolver el Parlament y de convocar elecciones. El órgano legislativo catalán queda limitado. No podrá proponer candidato a la Presidencia de la Generalitat, ni plantear un debate de investidura.  Parte de sus funciones quedarán tuteladas por el Senado y no podrá tramitar nada que esté en contra de estas medidas, la Constitución o el Estatut de Autonomía. Si esto ocurriera, se remitiría la medida a una autoridad designada por el Gobierno que podría vetarla en un plazo de 30 días.

Hay dos cuestiones a las que el Gobierno ha prestado especial atención: los Mossos y las comunicaciones. Las autoridades que designe el Gobierno "podrán dictar instrucciones directas y de obligado cumplimiento" a los Mossos e, incluso, "acordar el despliegue de los Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en Cataluña". Si no se acatasen las órdenes, se podría pedir responsabilidades disciplinarias sin perjuicio de otro orden como pueden ser las patrimoniales, contables o penales. Este apartado es especialmente significativo, ya que con el cese del conseller de Interior, Joaquim Forn, la atención podría centrarse en el mayor de los Mossos, Josep Lluís Trapero, que tuvo que declarar hace unos días ante la Audiencia Nacional por sedición.

El Gobierno también se detiene en las funciones de las telecomunicaciones y comunicaciones electrónicas y audiovisuales. Amparándose en el artículo 26 de la Ley 22/2005, el Ejecutivo central también tomará el control de la televisión pública, asegurándose de que transmita "una información veraz, objetiva y equilibrada" y que respete "los valores y principios contenidos en la Constitución española y el Estatuto de Autonomía de Cataluña".

Pese a estas medidas, el Ejecutivo insiste en que no se interviene la autonomía de Cataluña. Según el presidente del Gobierno, se han adoptado con cuatro objetivos: volver a la legalidad, recuperar la normalidad y la convivencia,  continuar con la recuperación económica y celebrar elecciones en situación de normalidad.

El visto bueno de PSOE y Cs y duras críticas de los independentistas, el PNV y Podemos

El líder del PSOE, Pedro Sánchez, salió minutos antes de la comparecencia de Rajoy para ratificar, desde el Congreso del PSOE en la Región de Murcia, su apoyo al 155. En su discurso ha argumentado que su partido ha tenido que enfrentarse “a la disyuntiva de elegir” entre dos opciones: “Dar la espalda a España” o “poner freno a cualquier quiebra unilateral de nuestra convivencia y de nuestro ordenamiento constitucional”. Ha optado por la segunda, es decir, por seguir dando cobertura a las acciones del Gobierno. Sánchez no se ha pronunciado tras la rueda de prensa del líder del Ejecutivo. En Ferraz aseguran que ha telefoneado a los ex secretarios generales para agradecerles su apoyo y a los secretarios generales regionales y presidentes autonómicos para “mantenerles informados, agradecer su apoyo en la defensa de la Constitución y la legalidad que abandera el PSOE”.

Aunque la posición oficial del PSC es apoyar la aplicación del 155, ya han surgido voces que difieren, entre ellas, algunas muy relevantes como la de alcaldesa de Santa Coloma de Gramanet (Barcelona), Núria Parlon, que ha dimitido de su cargo en la Ejecutiva del PSOE. Unas horas antes había afirmado en su cuenta de Twitter  que "el 155 no es la solución, amplifica fractura emocional y territorial entre Cataluña y España. Necesitamos abrir otro camino sin demora". El alcalde de Terrassa, Jordi Ballart, también ha publicado en su cuenta un comunicado donde varios alcaldes expresaban su desacuerdo.

El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, también ha querido apoyar públicamente las decisiones del Gobierno tras el Consejo de Ministros y ha recordado que “aplicar la Constitución no es una opción, es una obligación”.

Fuera del bloque PP-PSOE-Ciudadanos, las críticas han sido duras y explícitas. El PNV, de quien depende en buena medida que el PP pueda aprobar sus presupuestos en el Congreso, ha sido de los primeros en reaccionar, a través de un tuit de Aitor Esteban: “¿Cómo puede decir Rajoy que no se suspende la autonomía si van a dirigirla directamente desde el gobierno de Madrid?”, se preguntaba. El portavoz del Grupo Vasco en el Congreso se cuestionaba, incluso, la legitimidad de las medidas: “Esa interpretación tan laxa y abusiva supone un peligroso precedente”, decía en otro tuit.

PDeCat ha ido más allá. Su portavoz en el Senado, Josep Lluís Cleries, ha calificado el 155 de “golpe de Estado contra el pueblo de Cataluña", mientras la coordinadora general, Marta Pascal, ha asegurado que “son ellos los que hoy se han independizado del pueblo de Catalunya con el peor ataque en siglos”. También en Twitter, el diputado de ERC Gabriel Rufián ha valorado negativamente las medidas del Gobierno: “Esta generación ya tiene su 23-F. Frente al frente golpista de PPSOEC's, cumplimiento del mandato del 1O y Govern de Concentración”.

En Podemos han confesado estar “en shock por la suspensión de la democracia y la autonomía en Cataluña”, en palabras del secretario de Organización, Pablo Echenique. El líder de la formación también se ha pronunciado en Twitter: “El bloque monárquico cree mostrar autoridad, pero sólo revela su incapacidad para ofrecer soluciones y aleja aún más a Catalunya de España”. Se espera que Carles Puigdemont haga una declaración a las 21 horas (ver el despiece más abajo). 

Comienzan los trámites en el Senado

Estas medidas ya se han remitido al Senado, tal y como manda la Carta Magna y tendrán que ser aprobadas esta semana en pleno por mayoría absoluta, un trámite que, además de los 149 senadores del PP, apoyarán también PSOE y Ciudadanos y donde los nacionalistas como ERC y PNV votarán en contra, al igual que Podemos. La mesa de la Cámara Alta se ha reunido este sábado después del Consejo de Ministros para recibir la propuesta del Gobierno y establecer un calendario. 

Para tratar este delicado asunto se constituirá una comisión exclusiva, donde habrá miembros de la Constitucional y de la de Comunidades Autónomas. En total estará formada por 27 senadores: 15 del PP, 6 del PSOE, 2 de Podemos, y uno de cada uno del resto de grupos (PNV, ERC, Grupo Mixto y PDCat/CC) . Los grupos tienen hasta el lunes para designar a quienes encargan estos trabajos y el martes se constituirá el citado órgano. El viernes 27 se llevará al pleno. Tal y como señala el reglamento, el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, podrá hacer las alegaciones que considere oportunas. 

Mientras en Madrid el Gobierno encauza los trámites del 155, en el Parlament catalán ya han agendado para el lunes una Junta de Portavoces. Cabe recordar que en la carta que Puigdemont mandó a Rajoy como contestación a su requerimiento, el president avisaba de que, en caso de que se aplicase el 155, “el Parlament de Cataluña podrá proceder, si lo estima oportuno, a votar la declaración formal de la independencia que no votó el día 10 de octubre”.

El escenario posterior: hacia unas elecciones

El 155 es una página casi en blanco a la que Rajoy, con la connivencia del PSOE y Ciudadanos, ha decidido dar contenido este sábado. En los últimos días, tanto Moncloa como Ferraz han trabajado en varios mensajes que permitan combatir el relato independentista que tan bien ha cuajado en una parte importante de la población catalana. Ante el argumento de que el 155 “suspende el autogobierno catalán”, ambos partidos focalizan toda la culpa en Puigdemont. También se han esforzado en decir que este artículo sirve, precisamente, para “restaurar” la legalidad y el autogobierno que, según ellos, el Govern ha hurtado a la comunidad que lidera. De hecho, Rajoy ha dedicado el primer bloque de su intervención a hablar de “cómo hemos llegado hasta aquí”. “Tengo la impresión de que algunos querían que se aplicara el 155”, explicaba Rajoy, que se ha esforzado en dejar claro que aplicarlo no era ni su “deseo” ni su “intención”.

Aunque PP, PSOE y Ciudadanos han pactado los detalles sobre cómo y para qué se usará el 155, hay flecos que no quedan del todo claros, al menos de manera pública. Mientras la socialista Carmen Calvo, que ha estado en las negociaciones en los últimos días, aseguraba que la convocatoria electoral se había cerrado para enero, tal y como ratificaba después Ciudadanos, el Gobierno prefirió no establecer una fecha por considerarlo "prematuro" y se dan un plazo máximo de seis meses, aunque no es contradictorio con convocarlas a principios de 2018. Los naranjas incluso apuntan al 28 de enero.

La fecha de convocatoria tiene que jugar con dos variables: que el tiempo de intervención sea breve para volver cuanto antes a la normalidad, pero a la vez, que haya margen para desinflar el movimiento independentista que para que no reedite las mismas mayorías en el Parlament, un propósito al que la aplicación de esta versión del 155 no parece contribuir. 

Ni el pretendido proceso de independencia es fácil, ni la aplicación del 155 va a ser una balsa de aceite, como pretenden vender desde Madrid, y traerá consecuencias imprevisibles. Lo que llegue en las próximas semanas e, incluso, en los próximos meses en Cataluña es aún una incógnita.

1 Comment
  1. florentino del Amo Antolin says

    Vamos a ver, el gobierno del PP, y Rajoy dijo que no hubo referendum. Para eso, ya habia acantonadas10.000 fuerzas armadas, ( estan todavia ). Todo el Mundo pudo ver que la consulta se hizo de una manera, poco normalizada; tambien se vieron los atropellos, palos golpes, pelotazos, gases lacrimógenos, etc, etc. Televisar, las despedidas a los agentes, dice mucho por quien estamos desgobernados… Omitieron el 1O,por una estrategia bastarda en democrácia… Le dieron sonoridad con altavoces ultras; tocando a arrebato con la España cañí; ocuparon calles con gentes venidas con viajes pagados… ¡ De todo el estado !. En el Franquismo se hacia igual. ¡ Que pena de oprtunidades perdidas !. Nos traen un 155% de desestabilización natural; no importa, coño. Tú, coje el mando del Parlamet. Tú TV3; las finanzas Montoro… Os vais ha enterat.. Lo llevamos desde Madrid, para demostraros, como se gobierna una nación. Lo han dicho desde Trump, hasta, toda la UE, ( la que tiene que cobrar el violin ). Los despropositos, se saben cuando empiezan; pero cuando terminan, y ¿ como ? …. Los cínicos, volveran a pedir el voto para volver aplicar el manido 155%. Legalidad. Legitimidad… ¡ Vulneración de derechos civiles,!.

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