El país de los agravios

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Miguel_Sánchez_OstizIan Gibson dice que llora por España porque no la ve en paz, que es una forma de referirse a la evidente fractura social que empaña la vida pública y privada del país: «Me da pena ver sus posibilidades y me duele profundamente que este país no esté en paz consigo mismo». Fractura negada por quienes más hacen porque se mantenga viva y enconada, y porque se ensanche a diario esa brecha entre ricos y pobres, entre unos y otros, entre los de arriba y los de abajo, y los de al lado, y los que vienen como pueden y los que se van no porque quieran, o no solo por eso, sino porque no les queda más remedio. Compatriotas espantados de serlo, qué país más raro.

Que un policía nacional reproche a un ciudadano su poco amor a España por hablar en catalán, es un asunto gravísimo, casi más que la multa de 601 euros que le ha caído de manera por completo arbitraria por ese mismo motivo. Qué forma más bonita y más eficaz, por otra parte, de impulsar el algo más que sentimiento independentista catalán.  Lenguas enemigas: qué espanto. Si se hiciera el inventario de agravios padecidos por los ciudadanos, por parte de uniformados, togados o patriotas espontáneos, repartidos por toda la geografía nacional, el resultado sería algo asombroso. Un país de incomprensiones mutuas, enconadas y voluntarias: no nos entendemos porque no queremos, porque no sabríamos cómo, porque lo nuestro es la cainina, con la que se mete picos gratis el otro, siempre el otro, no nosotros. Aquí no hay quien no tenga cuentas pendientes, hasta los ricos, por eso agarran maderos fules, servicios secretos particulares y se compran y venden indecencias como si fueran cromos de Nestlé o barajas de «las familias». ¿Se acuerdan? … De los tres cerditos… Tenerse o no tenerse agarrado por los mismísimos más ensimismados, esa forma de vida española, cuartelara y maja, que no cesa.

Gibson es un profesor e historiador de prestigio indiscutible, es alguien digamos, no lo digo en tono de reproche alguno; pero hay tantos naidies que padecen desahucios, multas, cárcel, pobreza, pero pobreza de verdad, salud precaria y empujones de todas clases por parte de esa España que hace llorar, que no ha dejado nunca de hacerlo, que ni siquiera pueden o aciertan a expresar lo que sienten por el país en el que viven y padecen, y cuyo clamor queda a diario silenciado por la trompetería triunfal de un gobierno de guapetones.

Del me duele España unamuniano, testigo recogido por Ortega, al ser un español sin ganas a la manera de los que no pueden ser otra cosa, de Luis Cernuda, y más, poetas y no poetas, Blas de Otero… Cadalso, militar ilustrado, Blanco White, Foronda, Larra con su mala pistola de arriero catalán… tantos y tantos, y espera, que aquí vienen, que ya están llegando, con otra piel y más lenguas.

La España de Machado que bosteza es la que insta a la otra, a esa otra que cantó Miguel Hernández y cuyo poema da vergüenza leer hoy: Nunca medraron los bueyes / en los páramos de España, ay, a ver quién se atreve; esa que le insta, decía, al olvido, al aquí no ha pasado nada, al mirar al frente, pero a toque de cornetín de órdenes, la que aspira a tenerla aherrojada con leyes represivas como ese artículo del Código Penal referido al enaltecimiento del terrorismo que urge Podemos a retirar del articulado, un auténtico cajón de sastre que está permitiendo arbitrariedades mayúsculas. Me decía un penalista que el nuestro es un Código Penal inseguro en la medida en que está escrito a empujones de la ideología política dominante más que de unas necesidades sociales de la época en la que puede ser aplicable. Un Código Penal que marca conductas reprimidas como normas sociales y, sobre todo, formas de libertad de conciencia y de opinión limitadas.

Llevo años diciendo en público y por escrito que estoy a favor de pasar página… pero antes de eso, estoy por la necesidad de escribirla, con todos los recursos posibles, incluidos los archivos de la Guardia Civil, y todos los militares y los de Asuntos Exteriores y, y… y no solo de escribirla, sino de leerla, de que tú que no quieres, que no me dejas, la leas de una vez. Entonces sí, entonces la pasamos, pero antes no. ¿Revanchista? No, lúcido o en esa voluntad dicho. Aquí hay mucho sapo mal digerido, como apunta Ian Gibson en esa entrevista publicitaria –¿y ya cuál no lo es?– que le han hecho con motivo de la salida de su último libro, ese que trata de España, tema de moda como suelen serlo las borrascas y temporales que no amainan: Que juzguen los que viven por sus manos.

(*) Miguel Sánchez-Ostiz es escritor y autor del blog Vivir de buena gana. 
4 Comments
  1. florentino says

    Miguel, no pases página!!. Escríbela con todos los recursos ha tu mano.. porque inteligencia te sobra. Revanchistas, son aquellos que hacen leyes para amordazar a los ciudadanos, para prolongar en el tiempo su estancia en cárceles muy lejanas. Ahí, te pudras!!.. Hacen Leyes para la conciencia, se supone todo!!. Como puede haber un funcionario en una Nacionalidad específica, que debe atender ha tantas personas no se molesten en adecuarse al medio, y homologarse también. El nativo lo agradecería!!. El Estado Español, no tiene corazón propio.. mucha visceralidad centralizada en un punto de servicios.. y radiales como la capital de España.. Pagadas por las distintas naciones y regiones multiculturales ancestrales. Gabriel Zelaia tiene unos versos: Porque vivimos a golpes, porque apenas si nos dejan decir que somos quien somos, nuestros cantares no pueden ser sin pecado un adorno. Estamos tocando fondo. Maldigo la poesía concebida como un lujo cultural por los neutrales que, lavándose las manos, se desentienden y evaden. Maldigo la poesía de quien no toma partido hasta mancharse. Hago mías las faltas. Siento en mí a cuantos sufren y canto respirado. Canto y canto, y cantando más allá de mis penas personales , me ensancho.. Quisiera daros vida, provocar nuevos actos, y calculo por eso con técnica, que puedo. Me siento un ingeniero del verso, y un obrero que trabaja con otros a España en sus aceros.. La poesía es un arma cargada de futuro!!. No queremos la paz de los cementerios. Manchémonos!!. Gracias.. Miguel!!.

  2. ramón moreno palau says

    dESDE el nulo cariño a lo que se denomina comunmente España-vivo en Cataluña y espero y deseo que gane la independencia-añado un nuevo agravio del que he tenido noticia en el dia de hoy en el programa de la cuatro LAS MAÑANAS DE CUATRO,que conduce con brillantez el periodista Jesus Ruiz,una modesta familia-mejor,una familia en la miseria-corre peligro de ingresar en prisión por engancharse a la luz y deber 15oo euros a la compañia electrica de turno,por otro parte,un rancio,prepotente,casposo e indecente aristocrata perteneciente a la familia que hasta 1996 controlo lo que es hoy la real fabrica de tapices,vive desde esa fecha como okupa de superlujo,sin abonar ni agua niluz,ni electricidad-los abonamos nosotros,los que tenemos la desgracia de tener la nacionalidad española y escasos recursos economicos-el sujeto sigue conservando su personal de servicio-que debe llamarle de usted-y en cualquier momento te espeta con chuleria matonil eso de «usted no sabe con quien esta hablando»,naturalmente la judicatura no ha tenido a bien desalojar a tan insigne Okupa,al fin y al cabo es uno de esos miserables aristocratas sin escrupulos,patrioteros de cartón piedra,gracias a los cuales-y a sectores politicofinancierosmilitaresmonaraquicos etc-este pais es la mierda que es desde 1492,se da la circunstancia de que ha ordenado a su servicio que compre viveres para tres meses mas en los correspondientes comercios,el hombre no tiene la menor prisa y la servil y corruptajudicatura española tampoco,al fin y al cabo es un hombre de clase alta,que seguro que habla ingles y frances sin acento y que posiblemente tenga su dinero en paraisos fiscales,todo un «español de bien» y no como esos desharrapados que han tenido la osadia de engancharse a la red electrica by the face,esta anecdota define a la perfección lo que este cochambroso pais ha sido en toda su historia como nación…..penosa nación

  3. Pia says

    «La memoria, primera revelación, ineludible de la persona” nos dice María Zambrano en Delirio y destino …

  4. José Pino Martínez says

    ¡Qué lindo es vivir en el aparato, en el SISTEMA DE GOBIERNO ACTUAL! Una izquierda lo hizo allá por el 2012, pero se equivocó de raíz. ¿Cómo se puede compartir poder con los usurpadores, los aspirantes a tranquilidad financiera, a sosiego de sus buenas cuentas, a la escala económica y social de clientes del CAPITAL? «Pero eso no quiere decir que la era del pensamiento utópico haya llegado a su fin; solo significa que las utopías <> originales han sido casi totalmente apartadas y reemplazadas por otras de <> que ofrecen el proyecto de un hueco confortable y seguro escarbado, vallado y <> para el disfrute individual dentro de un mundo que todavía funciona mal, está poco controlado, resulta inseguro y es terriblemente inhóspito (y que seguirá siendo así durante mucho tiempo, quizá para siempre)», ZYGMUNT BAUMAN, «ESTADO DE CRISIS». En este sentido, ¿acaso ese proyecto de un hueco confortable y seguro, que dice Bauman, no tiene un precio, un sacrificio, unos efectos considerables en los demás? Me da la impresión de que la búsqueda de esa confortabilidad, de esa tranquilidad económica es vital, es decir, forma parte de la propia naturaleza del ser humano. Lo que ocurre es que se sacrifica a otros compañeros sin miramientos, sin ninguna consideración humana, siendo el único objetivo escalar y alcanzar la cumbre sin honradez ni honestidad ni dignidad alguna, valores éstos barridos por el SISTEMA NEOLIBERAL ACTUAL.

    El hambre no es un problema en el mundo occidental como lo ha sido en años y en siglos anteriores. Ahora se trata de alcanzar la felicidad con la consecueción de bienes materiales inventados por el ser humano; esa es la felicidad a la que se aspira, y esa es la felicidad que estalló y desapareció para millones de occidentales en el año 2007-2008. Y hoy, ¿hacia dónde pretende caminar la sociedad occidental y la española en particular?, ¿desean volver a recuperar la falsa felicidad, siendo ello algo que le ofrecen las fuerzas políticas de extrema derecha y derechas moderadas y la vacía socialdemocracia?, pero, ¿y la izquierda, qué felicidad puede ofrecer si se ha contaminado del CAPITAL, ha compartido la experiencia en el ascenso social mediante las malditas prácticas corruptas capitalistas?, ¿qué hay de la HONRADEZ, de la HONESTIDAD, de la DIGNIDAD, adónde fueron a parar, izquierda?

    Nuevos tiempos, tiempos difíciles.

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