El sector de Iglesias acusa de "deslealtad" a los 'errejonistas' en la pugna por Madrid

La presentación del proyecto “Proceso Adelante” para la asamblea ciudadana Podemos Comunidad de Madrid el pasado miércoles ha generado un considerable revuelo interno. El próximo cónclave para renovar la dirección autonómica del partido morado anticipa en gran medida el debate político que se dará a nivel estatal. Las reacciones a la puesta en escena del sector más afín al secretario político, Íñigo Errejón, con Rita Maestre a la cabeza, junto a Tania Sánchez y otros, no se han hecho esperar. Esta iniciativa no era conocida hasta pocas horas antes por el secretario general, Pablo Iglesias, según afirman fuentes cercanas a cuartopoder.es. Éstas consideran el movimiento como una “deslealtad” y un “desafío”. Tanto desde los dirigentes afines al líder de Podemos como desde el sector cercano a Anticapitalistas critican las formas utilizadas, ya que esperaban poner por delante los proyectos políticos a los nombres o fotografías. Iglesias fue explícito ante los medios afirmando que habrá candidaturas mejores que la de Maestre y Sánchez. Mientras, dirigentes y personas afines a él consideran este movimiento como un desafío a su liderazgo, según varias fuentes consultadas.

Desde el entorno de Iglesias no esperaban un movimiento tan rápido de los dimisionarios del Consejo Ciudadano Autónomico en marzo y no se imaginaban la alianza entre Sánchez y otras personas de la extinta Convocatoria por Madrid. Además, en esa alianza también han perdido a miembros considerados afines al secretario general como Miguel Vila, Lara Hernández o Eduardo Fernández. Por todo esto, lo ven como “un desafío” al haber sido una operación realizada a espaldas de Iglesias. El líder de Podemos, según afirman fuentes de su entorno, no esperaba que fuera a salir “una lista de parte” en este contexto actual. Por ello hablan de “indignación” e “irresponsabilidad”. La clave, según el relato de estas fuentes, es que el proyecto se venía madurando tiempo atrás entre un sector de afines a Errejón y otro de afines a Iglesias con la mediación y presencia de Sánchez y gente de su entorno. El objetivo era lograr la paz interna en Madrid con una salida unitaria. Pero, sin embargo, en los últimos días, sin saber por qué, según estas fuentes, se dejó fuera a Iglesias con el resultado de un proyecto que el secretario general no considera unitario.

El nombre del portavoz en el Senado, Ramón Espinar, es el que más suena desde que se abrió la crisis en Madrid y se puso sobre la mesa el relevo de Luis Alegre. De hecho, Iglesias lo mencionó directamente el pasado jueves. Según las fuentes consultadas también presentará su proyecto en los próximos días. Por otra parte, fuentes del partido en Madrid apuntan a la desconfianza que genera en gran parte de los círculos y los municipios este movimiento entre el sector 'errejonista' y el de Sánchez. Entre sus críticas destacan la alta presencia de cargos institucionales entre los impulsores de “Proceso Adelante”. “La institucionalización es la enfermedad infantil de Podemos”, resumen. Y consideran ese punto como una de las claves que se darán en el debate tanto en el proceso madrileño como en el estatal.

El malestar, no obstante, es mútuo, ya que desde el grupo promotor de “Proceso Adelante” no comparten la reacción de Iglesias y su parcialidad. Consideran que sus palabras “están fuera de tono”, según algunas fuentes de este grupo. Además se muestran “sorprendidos” por las innumerables reacciones que ha provocado su propuesta. Reiteran que su proyecto es integrador y superador de las corrientes existentes en la Comunidad de Madrid. En este sentido ponen en valor que el embrión de la candidatura cuenta con gente diversa y con diferentes bagajes políticos. El miércoles protagonizaron el acto algunas de las personas que dimitieron del Consejo Ciudadano Autonómico en marzo como Clara Serra o Pablo Padilla, personas cercanas a Sánchez como el diputado autonómico Hugo Martínez Abarca o los concejales Jorge García Castaño y Esther Gómez. También cuenta con el beneplácito de Vila y Alegre, actuales miembros de la dirección madrileña y blanco de las críticas de los dimisionarios en su momento.

Al contrario que Iglesias, Errejón ha preferido evitar hacer valoraciones directas sobre la candidatura aunque sí pidió neutralidad. Preguntado sobre las declaraciones de Iglesias señaló que no era de su competencia ni de los diferentes portavoces manifestar cuáles son las diferentes opciones. “Lo que tenemos son procesos en los cuales debatirán y se medirán diferentes opciones y diferentes alternativas y será la gente la que decida quiénes son los mejores”, añadió. Consideran fuentes de este proyecto que la situación “se debe desdramatizar”. Recalcan que ellos consideran que el proyecto es positivo para el partido y que por eso justamente no se debe seguir la lógica de traición o deslealtad. Entienden, no obstante, que haya discrepancias y que haya gente que no esté de acuerdo con lo que han hecho o no se lo esperara. “La intención es superar la lógica de enfrentamiento absoluto y de la caricatura iñiguistas-pablistas. Creemos que eso queda roto y pretendemos una dinámica lo más fraternal y pacífica posible”, destaca una de las personas integrantes del proyecto. Además, confían en reconducir la situación y “encontrarse en el camino”.

Por su parte, el tercer actor de relevancia, Anticapitalistas, insiste en que lo ideal es poner de relevancia el debate de proyectos y no de caras. Según fuentes consultadas por este medio, que no ocultan su malestar con las formas utilizadas, el debate de este modo será menos sano que si se hubiera dado en condiciones de igualdad y no dejando a gente fuera desde el primer momento. No está del todo claro que este sector, que presentó a Miguel Urbán en las pasadas primarias, vaya a buscar una alianza desde el principio con la corriente más cercana a Iglesias. Su proyecto será presentado próximamente aunque todavía no hay fecha fijada.