El Gobierno acelera la reforma de las pensiones para evitar el deterioro electoral

1
Valeriano Gómez y Octavio Granado, en la rueda de prensa que ofrecieron el pasado día 16 para valorar el dictamen del Pacto de Toledo. / E. Naranjo (Efe)

El Gobierno ha conseguido un informe abierto de los grupos parlamentarios que le permitirá prolongar la edad de jubilación hasta los 67 años y elevar el periodo de cálculo de la pensión de los últimos 15 años cotizados a los que estime necesario. La petición del ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, a la comisión del Pacto de Toledo de que no hiciera un dictamen cerrado, se ha visto satisfecha. El PSOE, el PP y los nacionalistas de CiU y PNV están de acuerdo en ampliar el periodo de cómputo y en que todos los años cotizados tengan la misma valoración. Pero el PP no estima necesario ampliar la vida laboral hasta los 67 años. Su portavoz en la materia, Tomás Burgos, aboga por un sistema voluntario y con incentivos de retraso de la jubilación.

El presidente José Luis Rodríguez Zapatero ha insistido en que mantendrá el retraso de la edad de jubilación hasta los 67 años se ponga como se ponga el PP, la izquierda y los sindicatos. Según el ministro Gómez, “hay que prolongar la vida laboral; no queda otra salida. Y la mejor forma de prolongar la edad real es alargar la edad legal”. La edad real de jubilación ha alcanzado la media de 63 años y 7 meses y no ha dejado de crecer en los cinco últimos años. ¿Es necesario prolongar la edad legal hasta los 67? El Gobierno cree que sí para conseguir que la jubilación real siga creciendo.

El secretario general de la Seguridad Social, Octavio Granados, promete “flexibilizar más” la entrada en vigor de la medida que, según la propuesta inicial del Ejecutivo era aumentar la vida laboral dos meses cada año a partir de 2013. También promete “excepciones” para los trabajadores que mayor desgaste sufren y para los que hayan alcanzado 40 años de cotización.

El ministro de Trabajo no se cansa de repetir que la reforma del sistema de reparto no es tanto una exigencia del mercado de capitales cuanto del sistema propiamente dicho y de la pirámide de población. El número de pensionistas crecerá a un ritmo de 200.000 más cada año, lo que significa un millón más cada lustro. En 2020 habrá 10,1 millones de jubilados, en 2030 pasaremos a 12,5 y en 2040 a 15,3 millones. Esto supone un salto desde los 8 puntos actuales del PIB en pensiones a 16 puntos en 2050. Gómez subraya que las reformas en Francia y Alemania sitúan en 12 puntos de su PIB el coste de las pensiones. De ahí que para mantener el sistema, además de prolongar la vida laboral sea necesario ampliar el cómputo de los últimos años cotizados. El salto de 15 a 20 años supondría una reducción del 3% del gasto. “Si introducimos el conjunto de la vida laboral tendremos mayor ingreso y menor gasto”, razona Gómez.

Junto a esas “líneas básicas” de la reforma que el Gobierno someterá a la consideración de los agentes sociales y contra las que ya se han pronunciado los sindicatos, el Ejecutivo plantea la limitación de las jubilaciones anticipadas, fijándolas a partir de 55 años en vez de los 52 actuales y estableciendo mecanismos para que el coste no recaiga sobre el sistema. También propondrá nuevas vías para aumentar la contributividad porque, según Gómez, no es bueno para el sistema ni para los afiliados que el 85% contribuyan por la base mínima. Y puesto que los sindicatos y la izquierda del PSOE rechazan de plano la reforma, el presidente Zapatero ha decidido aprobarla cuanto antes –en el Consejo de Ministros del 28 de enero– y alejar las movilizaciones de la campaña electoral para las municipales y autonómicas de mayo.

1 Comment
  1. Zaratustra says

    Pensionista que vienes al mundo, jodeté

Leave A Reply