Zapatero usa Portugal contra Rajoy

José Luís Rodríguez Zapatero se va a comer todos los sapos de las reformas que ha hecho y le quedan por hacer como le exige la Unión Europea, pero no quiere que Mariano Rajoy se vaya de rositas cuando los dos saben que deberá hacer lo mismo o recortes peores. Por eso ha dado la orden en La Moncloa de que no dejen pasar ni una. Y el equipo de expertos presidencial suelta argumentarios demoledores contra el PP.

Tan demoledores como el que acaba de entregar a los cuadros socialistas para que le pasen la factura al PP por haber hecho aquí lo que la mismo que la oposición hizo en Portugal contra José Sócrates, tumbando su Gobierno al precio de arrastrar a su país al empobrecimiento que supone tener que ser rescatado por la UE como Grecia e Irlanda. El encabezamiento ya muestra por dónde van los tiros: “El PP quería que España estuviera como hoy está Portugal, pero Zapatero ha conseguido que no sea así”.

El texto recuerda que hace pocos meses eran muchas las voces, especialmente del PP, que aseguraban que si Portugal caía, España iba detrás. Ahora, señalan, Portugal ha anunciado que pide el rescate de la Unión Europea. Y hoy, la prima de riesgo española se mantiene por debajo de 180 puntos básicos, España ha colocado más de 4.000 millones de euros en bonos a 3 años a un interés menor que el de la última subasta y todos los organismos internacionales coinciden en que España no tiene ningún riesgo, porque está haciendo lo que debe y no hay ningún organismo ni analista que sostenga que España pueda precisar ser rescatada.

Zapatero quiere que se recuerde que “el PP ha querido que a España le pasara lo que a Portugal” y por eso se opone a todo y en el peor momento de la crisis para España - en mayo del año pasado- votó en contra de las difíciles medidas que tuvo que tomar para evitar que España siguiera los pasos de Grecia y de Irlanda. Lo hizo, se indica, “porque creyó que eso provocaría la caída del Gobierno, sin importarle el riesgo de que también pudiera caer el país”. Como ejemplo, se cita al secretario general del PP europeo, Antonio López-Istúriz, quien declaró que “se puede tener cierta envidia de que Portugal tenga la oportunidad de cambiar de Gobierno”.

Acto seguido, el argumentario sentencia: “El PP ha querido arruinar a España para llegar a La Moncloa, sin importarle el país y los ciudadanos”. “Su máxima -añade- ha sido gobernar a toda costa, aunque sea sobre escombros”. Y por eso, concluye, Rajoy y otros dirigentes del PP han proclamado que la economía española era débil y no podía inspirar confianza, que a España le pasaría lo que a Grecia, que no saldríamos de la recesión y que España estaba en riesgo de tener que ser rescatada.

El argumentario, como suele hacer el equipo de expertos de La Moncloa, acude a las instituciones y la prensa internacional para demostrar que ahora todos coinciden en que las medidas del Gobierno han salvado a España. Y expone una serie de citas como “España no necesita ser rescatada. Las políticas que ha puesto en marcha el Gobierno español son las correctas” (Dominique Strauss-Kahn, director del FMI), "Los analistas e inversores han valorado las medidas adoptadas por el Gobierno español, ya que consideran que van en la línea correcta" (Jean Claude Trichet, presidente del Banco Central Europeo), “España no tendrá los mismos problemas que Portugal porque ha afrontado los cuatro problemas que tenían que afrontarse: el déficit, el mercado laboral, las pensiones y el sistema financiero, en particular las cajas” (Angel Gurría, Secretario General de la OCDE) y “Mientras Portugal está KO, España parece ir OK”. (Financial Times).