Rajoy, convencido de que gobernará 4 años con el apoyo de C's y acuerdos con el PSOE

"Mi voluntad es que esta legislatura dure 4 años y sea larga y fructífera", ha afirmado hoy el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en la tradicional rueda de prensa de balance del año 2016. En su opinión, "este país puede demostrar que es posible gobernar sin que nadie tenga la mayoría absoluta para hacerlo". Para ello confía en C's y, sobre todo, en el PSOE, y espera que el Parlamento no se convierta en "un páramo de filibusterismo". Después de informar de las medidas adoptadas por el último Consejo de Ministros del año (prórroga del Presupuesto, subida del 0,25% de las pensiones y aumento del 8% del salario mínimo), Rajoy hizo un balance triunfal en lo económico y marcó la orientación del futuro: diálogo en tres direcciones, con la oposición política, con los agentes sociales y con las autonomías y ayuntamientos.

Sobre la crisis interna del PSOE contestó a los informadores que no tiene sentido elucubrar sobre el liderazgo de Susana Díaz o sobre la posible vuelta de Pedro Sánchez, pero dejó claro su interés en contar con el primer partido de la oposición para que la legislatura dure cuatro años. En todo caso consideró "fructífera" la colaboración de los socialistas y valoró desde el primer momento el diálogo y la responsabilidad política. De hecho, resumió el año 2016 diciendo que ha tenido "dos caras: una estéril, la parálisis, y otra fértil, la colaboración". Además calificó como un "fruto fundamental" del diálogo político en los dos meses desde su investidura el acuerdo con el PSOE sobre el límite de déficit, el techo de gasto y las medidas fiscales que han permitido proyectar fiabilidad y cumplir los compromisos con la UE.

Rajoy, que exhibió algunas cifras sobre la recuperación económica, comenzando por el empleo, con 18,5 millones de puestos de trabajo y una reducción de la tasa de paro al 18% de la población activa, se refirió a otros acuerdos con la oposición en materia de educación, al pacto con el PSOE para la subida del Salario Mínimo Interprofesional un 8% y el acuerdo, también con los socialistas y C's sobre la financiación del "bono social" contra la pobreza energética. Se refirió a otros compromiso como la puesta en marcha de subcomisiones contra la violencia de género para dar "un nuevo enfoque" a la lucha contra esta lacra, "calidad democrática" contra la corrupción, mejora de la Justicia y análisis y seguimiento del Brexit o salida del Reino Unido de la UE.

Aunque dejó claro que "C's es nuestro socio preferente", consideró al PSOE su interlocutor principal "en los grandes temas que importan a la nación" como son, dijo, "las pensiones, la educación, la OTAN o el diseño europeo". En respuesta a si espera obtener el apoyo de los socialistas para aprobar los Presupuestos de 2017 se mostró "optimista, pero con realismo, porque la realidad está ahí; creo que podemos ser moderadamente optimistas, no tiene por qué haber discrepancias insalvables en los Presupuestos, pero seré prudente, vamos a esperar".

Sobre la derogación de la reforma laboral que demanda el PSOE y ha sido respaldada como proposición no de ley por la mayoría del Congreso con la abstención de C's y el voto en contra del PP, se mostró esquivo, aunque no completamente inflexible. "No me gustaría que se derogasen las reformas económicas por una razón, porque han funcionado. Lo que se cambia es lo que no funciona, pero lo que funciona no se deben cambiar". A la pregunta de si adelantaría las elecciones para evitar esa reforma manifestó: "Yo no quiero adelantar las elecciones, lo mejor es mantener la estabilidad, y las reglas de juego dicen que las elecciones son cada cada 4 años. Si nadie tiene la mayoría, la obligación de todos es llegar a entendimientos y acuerdos, y para ello es evidente que hay que ceder".

AGENCIA EFE (YouTube)

Llamamiento a Urkullu y Puigdemont

Sobre la crisis con Cataluña Rajoy aprovechó una pregunta para pedir al president de la Generalitat catalana, Carles Puigdemon, y al presidente vasco, Íñigo Urkullu, que asistan a la Conferencia de Presidentes que tendrá lugar el 17 de enero. "Me gustaría que fueran esas dos personas", dijo. "Es importante que vayan; ir no es renunciar a ningún planteamiento, y no ir es abdicar de su responsabilidad; la gente no entendería que no fueran a un foro donde se toman decisiones que les afectan, y por tanto, me gustaría que fueran Urkullu y Puigdemon".

Recordó además que el vicepresidente catalán y líder de ERC, Oriol Junqueras, acudió a la última reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera, en el que se tomaron decisiones importantes, entre ellas, el anticipo de la línea de liquidez de 4.500 millones euros. Incidió en la financiación recordando que el Fondo de Liquidez Autonómica y del pago a proveedores ha supuesto más de 50.000 millones en los últimos años y aseguró que "el Gobierno no va a escatimar acuerdos beneficiosos para los ciudadanos de Cataluña, pero tampoco vamos a tolerar que no se respete la ley".

Sobre la escalada independentista y el proyecto de "desconexión" de Cataluña, cuyo texto ya ha sido elaborado, aunque no divulgado, Rajoy dijo que "eso no va a parte alguna. Yo ofrezco hablar y dialogar". En respuesta a los informadores añadió que "una reforma de la Constitución no va a resolver este problema. De lo que se trata es de construir. Que nadie se llame a engaño, ningún presidente de gobierno va a aceptar que se ponga en cuestión la soberanía nacional, la unidad y que los catalanes tengan que decidir entre ser españoles y europeos o ser catalanes cuando ya son catalanes, españoles y europeos".

"Los extremismos solo añaden caos en la UE"

En respuesta a los procesos electorales en distintos países de la UE (en Holanda habrá elecciones en primavera, en Francia en mayo y/o junio y en Alemania en septiembre), Rajoy manifestó que le gustaría que salieran "gobiernos estables y moderados". Recordó que "la estabilidad tiene un valor en la vida de las personas", que la UE supone el 25% del PIB mundial, y que posee "un sistema de bienestar como en ningún lugar del mundo, y eso, donde hay mayor nivel de vida, calidad y protección social lo hicieron partidos moderados. Al final parece que las novedades --dijo en referencia a los extremismos y radicalismos-- tienen sentido en una situacion de caos, pero solo añaden más caos. Me gustaría que ganaran los moderados".

Ya sobre el papel de España en la UE señaló que "el principal cometido es ayudar a resolver los problemas" y citó como ejemplo "la política de inmigracion que se lleva haciendo en España desde hace años y que ahora es la que se hace en la UE". Respecto al Brexit o salida del Reino Unido de la UE dijo que las relaciones bilaterales "han sido estupendas y esperamos que lo sigan siendo". Recordó que es el país que más inversiones españolas recibe, después de Brasil, y que 200.000 británicos viven en España por 100.000 españoles allí. "Empezaremos a negociar cuando lo pidan, en el primer trimestre de este año, pero la posición común de la UE es que las cuatro libertades tienen que ir juntas y eso lo tenemos todos claro y lo seguiremos teniendo en el futuro".

Rajoy, que comenzó su comparecencia diciendo que 2016 ha sido "el año de año de las decisiones inesperadas y de los sobresaltos políticos", se mostró convencido de que la construcción de la UE seguirá adelante a pesar del rebrote de "las fuerzas extremistas contra la UE que buscan en el nacionalismo y la xenofobia una respuesta". Entre los sobresaltos incluyó el Brexit y el referendo en Italia. Y calificó la victoria Trump en Estados Unidos como "un vuelco político de gran magnitud, cuyas consecuencias no conoceremos con certeza hasta que no tome posesión con su nueva nueva administración".

PSOE y Podemos coinciden: triunfalismo en vena

Desde el PSOE, el portavoz Mario Jiménez, le acusó de "triunfalismo impropio" y de "ocultar la cruda realidad" porque la recuperación no ha llegado a las familias y a los trabajadores, que siguen soportando la precariedad, el paro unos salarios de pobreza. Consideró "muy remoto" que los socialistas puedan aprobar su Presupuesto y, en lo atinente a los diez meses de gobierno provisional, no dudó en acusar a Podemos de haber frustrado el cambio con su visión de futuro sobre el "sorpasso" que al final fue el paso al PP con más votos. Jiménez reafirmó la voluntad de los socialistas de hacer oposición para la gente, como ha ocurrido en estos dos meses y reiteró que la centralidad política que ocupan en el Parlamento les permite garantizar que ninguna medida del Gobierno que sea lesiva para el conjunto de los ciudadanos saldrá adelante.

Desde Podemos, su secretario de relaciones con la sociedad, Rafael Mayoral, coincidió en tachar de "triunfalista" la visión de Rajoy, quien "se congratula de haber recuperado sus tijeras" gracias al apoyo de la "triple alianza" del PP el PSOE y C's. Cargó especialmente contra el PSOE y su portavoz parlamentario, Antonio Hernando, a quien ha acusado de dirigir el "ministerio del maquillaje social". También lamentó la "actitud inmovilista" de Rajoy, del que dijo que no acaba de reconocer la realidad de un Estado plurinacional.

El vicesecretario general de C's, José Manuel Villegas, apreció "conformismo" y "falta de ambición" en las palabras de Rajoy y le pidió que "no caiga en la tentación de acomodarse" con el PSOE, al tiempo que le emplazó a abordar las reformas en el marco de los 150 puntos del acuerdo de investidura con C's. Subrayó que su formación seguirá impulsando el proyecto reformista para que la recuperación económica sea "consistente" y el reparto de la riqueza alcance a las clases medias. En este sentido dijo que no está garantizado el apoyo de C's a los Presupuestos y que dependerá del grado de cumplimiento del PP del acuerdo de investidura.