Díaz recaba sus apoyos personalmente, incluso llamando por teléfono

Comentan con asombro los partidarios de la líder del PSOE de Andalucía, Susana Díaz, que "Susana está haciendo su propia campaña, la lleva ella en persona, llama por teléfono y se entrevista con  quienes están decididos a darle su apoyo para hacerse con la secretaría general del PSOE, pero también con aquellos que no lo están, o que se plantean dudas". Además de los actos públicos, Susana Díaz busca el trato personal, la distancia corta y, en ocasiones, sorprende incluso a alguno de los barones que le apoyan. Así, un reconocido barón socialista cuenta a cuartopoder.es que presenció el momento en el que el líder del PSPV, Ximo Puig, era enmendado por la propia Susana Díaz cuando le estaba echando las cuentas sobre los apoyos con que podía contar en la Comunidad Valenciana para las primarias. Según su versión, al llegar al nombre del secretario general de una agrupación, Puig lo calificó como "dudoso" y Susana Díaz no dudó en corregir de inmediato a su amigo y colaborador y le dijo que el citado secretario general "no es dudoso, está con nosotros; lo sé porque lo  he hablado con él personalmente".

Quienes la conocen bien dicen de Díaz que "ha mamado PSOE y Juventudes Socialistas". De hecho, Díaz fue secretaria de Organización de Juventudes Socialistas de Sevilla y, posteriormente, del PSOE-A. Conoce bien la estructura de su partido y cómo movilizarlo. Y a eso se está dedicando estos días y hasta el próximo 21 de mayo, fecha en la que se celebrarán las elecciones primarias en el PSOE. Díaz delega lo justo en sus colaboradores y supervisa todos los movimientos de los mismos. Visita, llama por teléfono, "se muestra cercana y gana puntos en las distancias cortas", aseguran algunos de los "captados", pero, por encima de todo, es la propia Díaz la que más tiempo ocupa en la captación de apoyos.

"Lleva un maletín con anotaciones dentro- asegura uno de sus partidarios- en las que controla prácticamente todos los números, apoyos y porcentajes posibles de la militancia del PSOE". Sus cuentas, según aseguran sus más allegados, le auguran una victoria, pero sin alharacas, "porque todos los cabreados con el partido, con los barones que la apoyan y con el PSOE en general, se van a aglutinar en torno a la figura de Pedro Sánchez". Susana Díaz, según los suyos, es consciente del peligro que supone esa concentración del voto descontento y trata de llegar al máximo número de personas y organizaciones posibles, en primera persona, con notas y fichas de cada territorio y cada secretario general.