Rubalcaba gira a la izquierda y desembarca en las redes sociales

Alfredo Pérez Rubalcaba comenzó ayer su largo y duro camino hacia la victoria electoral. Una contienda en la que muchos coinciden en el análisis: Sólo Rubalcaba puede ganar para el PSOE, y sólo Mariano Rajoy es capaz de perder con todo el viento a favor. Esa tormenta perfecta es la que buscará el corredor de fondo socialista, apoyado en una lenta recuperación económica y un giro a la izquierda que dejó patente en un discurso de más de una hora de duración. El abrazo final con José Luis Rodríguez Zapatero y, sobre todo, la presencia del líder saliente sin intervenir en el acto, parecen ser el aval necesario de Rubalcaba para renegar allá donde lo crea conveniente de las decisiones que el Presidente ha tenido que tomar para garantizar que España no cayese en el pozo de Grecia, Irlanda y Portugal. Lo que se escuchó ayer en el Palacio de Congresos de Madrid no parecía sólo un mensaje a los votantes del PSOE en nuestro país, sino un planteamiento de regeneración de la socialdemocracia mundial, tan necesario como inédito durante los últimos años.

Previamente al multitudinario mitin de presentación del candidato, la campaña de Rubalcaba arrancó el viernes en las redes sociales. Lo hizo con un tremendo éxito en Twitter - el perfil es de su equipo de campaña-, donde en pocas horas sobrepasó los 5.000 seguidores, y con algo menos en Facebook, donde la mañana del sábado superaba por poco los 3.000 amigos repartidos en dos páginas distintas, algo tan inusual como poco práctico. De su presencia en la red social más importante del mundo merece la pena destacar la denominada “Guía de convivencia”. Se trata de unas normas de comportamiento para todos aquellos que deseen participar con sus comentarios en el seno de la página del candidato. Puede parecer algo obvio, pero es una iniciativa muy poco usada, a pesar de que debería ser el primer paso para cualquiera que abra estos espacios en la Red. No le tienen miedo los responsables de la campaña de Rubalcaba a la moderación de los comentarios y al borrado de aquellos que no cumplan sus normas,  y así debe ser. La web 2.0 es una oportunidad para la participación, y no un campo abonado para el insulto. Borrar un comentario ofensivo no es un acto de censura; es una acción a favor de una Red mejor. Youtube y Flickr, como no podía ser de otra manera, también nos ayudarán a seguir la actualidad de la campaña electoral de Rubalcaba.

Si el PSOE ya está volcado en el apoyo a su nuevo líder, también lo ha demostrado en Internet. La web oficial del partido ha dejado su sitio durante todo el fin de semana al microsite del candidato, paso previo a la que será su web de campaña. Un sitio presidido por una fotografía de Rubalcaba que llama la atención por no esconder con el retoque digital las arrugas inevitables que deja el paso del tiempo y la responsabilidad política. Después de los ejercicios de ciencia ficción que vimos en algunos carteles electorales de los pasados comicios municipales y autonómicos, se agradece algo de verdad en el plano fotográfico. Junto a la imagen, los tres verbos que presiden su precampaña: “escuchar, hacer, explicar”. También fueron muy importantes en su discurso. La presencia en redes sociales tiene un lugar destacado bajo el epígrafe “la gente opina”, y se completa la información disponible con vídeos, fotografías e información de la actividad diaria del candidato. Un microsite correcto que servirá como transición hacia la web definitiva.

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Alfredo Pérez Rubalcaba monopolizó el Twitter español durante el tiempo que duró su discurso. A partidarios y detractores había que sumar periodistas y ciudadanos que comentaban, frase a frase, el contenido de una estudiada exposición.  Algunos de sus anuncios han seguido marcando la actualidad en la red social horas después de que Rubalcaba abandonase el estrado. Una primera conclusión, más allá del análisis político de las propuestas, es que con ellas el candidato socialista ha logrado atraer la atención de muchos. Su apuesta por la reforma de la ley electoral es considerada como un guiño al movimiento #15M, pero no es menos cierto que es algo que Izquierda Unida lleva pidiendo desde la noche de los tiempos. No, no se lo inventó UPyD. Mirar hacia esas asambleas populares que ocupaban las plazas de nuestro país hace unas semanas no es otra cosa que volver la vista hacia la izquierda. Rubalcaba inicia el viaje hacia su victoria montado en los vagones de color rojo. Sabe que es lo que toca, y no es momento para las equidistancias.

El tiempo será un factor determinante en esta contienda. Sólo hay que escuchar a Rajoy pedir elecciones anticipadas cada vez que tiene un micrófono cerca. Cuanto más se aleje la fecha de votar, Rubalcaba crecerá y con él sus posibilidades de hacer la machada. Lo saben en el PP. Si por el contrario factores externos obligan a un adelanto electoral, los conservadores tienen segura la victoria. En este camino esperan sorpresas, y muchas de ellas tendrán lugar en Internet. Más allá de la presencia en las redes sociales de ambos líderes, esperamos encontrar iniciativas que de verdad permitan acercar a los ciudadanos su actividad política. Que sean canal de participación real, de conversación e influencia. La época del trending topic en Twitter ha pasado. Los medios de comunicación siguen publicando la noticia como una gran victoria del que se lo anota, pero en realidad es un logro bastante barato. Ha llegado la hora de que en España las herramientas de la web 2.0 sean un verdadero instrumento de cambio y no anécdotas para rellenar un breve en el periódico. Esto sólo será realidad si los partidos políticos le dan el sitio necesario, asumiendo la importancia que pueden tener en la construcción de su proyecto para el futuro.