A cada ataque, una respuesta: un acto de desagravio por la Pasionaria

  • El pasado 16 de noviembre, un busto de Dolores Ibárruri  instalado en Rivas fue derribado, pero no es el único acto vandálico de los últimos meses
 

2

Pocos días después de que el pasado 12 de noviembre se cumplieran 30 años de la muerte de Dolores Ibárruri, la Pasionaria, la escultura de bronce instalada en su honor en el municipio madrileño de Rivas Vaciamadrid apareció derribada. No es el primer ataque que ha sufrido la memoria de esta histórica dirigente del Partido Comunista de España y su legado. "En los últimos años sí se ha notado un incremento de agresiones a locales del PCE y de Izquierda Unida. Es una constante de pintadas y otro tipo de ataques a símbolos de la memoria", explica Mauricio Valiente,  portavoz de IU Madrid y exconcejal de Memoria Democrática del Ayuntamiento de Madrid con Manuela Carmena. Por el momento, el PCE de Rivas ha preparado su propia respuesta, este sábado ha organizado un acto homenaje al que acudirá el secretario general del PCE, Enrique Santiago, y después habrá un aperitivo antifascista.

El derribo de la estatua de la Pasionaria ha sido el último y más sonado caso de este tipo de vandalismo, pero no es el único al que se ha enfrentado el recuerdo de este dirigente del PCE. El pasado febrero, las tumbas de Ibárruri y del fundador del PSOE, Pablo Iglesias, situadas en el cementerio de La Almudena, aparecieron manchadas de pintura. "El ascenso de la extrema derecha en las elecciones ha encendido esos discursos que tienen que ver con un mensaje racista, xenófobo contra la inmigración, pero también contra un cuestionamiento de valores democráticos básicos", explica Valiente.

Cementerios, monumentos y otros símbolos relacionados con la memoria histórica se han convertido en objetivos de los vándalos, como las pintadas que aparecieron en el monumento a las Brigadas Internacionales en Vicálvaro, Madrid, el pasado enero o como el que sufrió el cementerio de La Barranca, en La Rioja, el pasado abril. También se han mancillado homenajes a reconocidos antifranquistas como el poeta Marcos Ana. El pasado abril, una placa instalada en su honor en la zona de Retiro amaneció pintada de azul.

Las pintadas con mensajes fascistas también aparecen en las sedes de los partidos, desde Izquierda Unida al PSOE. De hecho, el pasado octubre el pleno del Ayuntamiento de Madrid aprobó una proposición, a petición de los socialistas, para condenar los ataques "intolerables" a las sedes de los partidos. Esta formación se había encontrado sus Casas del Pueblo con pintadas en las que le acusaban de "profanadores" coincidiendo con el proceso de la exhumación de Francisco Franco.

"Ataques contra la democracia"

Aunque muchos hagan referencia a figuras comunistas como la Pasionaria, Valiente enmarca estos actos en ataques contra la democracia y huye de análisis simplistas y coyunturales. La multiplicación del discurso radical en los espacios políticos y los medios de comunicación es evidente, pero antes de la llegada de Vox, ya había un caldo de cultivo creado, incluso, desde la Transición: "Ha habido una falta de política oficial que consolide la memoria democrática en nuestro país".

Según Valiente, esto exige una concienciación social, pero también normativa que luche contra la impunidad. Sin ella, y en opinión del exconcejal, es más fácil que el discurso penetre en la población cuando aparecen partidos como Vox. Además, contextualiza el auge de la formación de extrema derecha en un "modelo social del que son responsables PP y PSOE" que ha provocado "la desatención de la mayoría social de este país".

El PCE ya prepara una ofensiva contra la ultraderecha en la que planean plantar cara también ante los tribunales. Valiente asegura que el miedo comienza a pasar factura: "Se empieza por ahí, pero llegará un momento en el que reivindicar conlleve un riesgo, ya está pasando en algunos espacios donde hay temor ante este tipo de amenazas y ataques. No hay que tener miedo. A cada ataque fascista, una movilización social y democrática".

2 Comments
  1. Miguel says

    Pero , ¿no quedo superado ya , eso del fascismo en el reino de Españistan con esa gran estafa de la transición del año 1978? (ja,ja,ja…).
    País…. ( que añadiría el gran Forges a este » chiste… » ).

  2. Juan says

    Un apunte. El busto de Dolores Ibárruri situado en Rivas-Vaciamadrid no fue derribado, tal y como recogieron diversas noticias. La noticia a la que aquí se enlaza de El País o bien se inventa buena parte de la información del suceso o bien las fuentes municipales se la inventan. Los vecinos que llamaron a la Policía Municipal, que no acudió en ningún momento tras la llamada, sino que se limitó a dar el aviso al personal de mantenimiento del Ayuntamiento, no dieron el aviso porque viesen que «un joven se encontraba frente a la estatua con intención agresiva», sino porque el busto había sido desoldado. El busto jamás fue derribado, sino que únicamente fue desoldado y uno de los vecinos que dieron el aviso, integrante del Consejo de Delegados de la Mancomunidad de Covibar (en cuya propiedad se encuentra el busto y que fueron quienes lo levantaron, gracias al aporte de numerosos vecinos tras un primer robo del busto original), lo colocó en el suelo para evitar males mayores y a la espera de que acudiera el personal municipal para llevárselo a lugar seguro.

    De momento, vincular esto con un acto con intencionalidad política es un puro acto de fe que desde el periodismo es inaceptable que se haga.

    Mi nombre, como el de otros muchos vecinos, aparece grabado en ese busto, para los que tengan dudas de mi posicionamiento.

Leave A Reply