La especulación sobre las cosas de comer, en máximos históricos

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Insistimos, porque hay que hacerlo, aunque en España se pasa de puntillas sobre el tema. Si hay un asunto que es un escarnio mundial es el espectacular encarecimiento de la totalidad de las materias primas. Se habla globalmente de muchas reformas y cambios que tienen que llegar. De avances de la sociedad civil o de movilizaciones contra el actual sistema. Pero hay que hablar de cosas concretas y ahora hay que poner orden pero ya mismo en las commodities. Que el crudo haya estado hace dos días por encima de los 100 dólares por barril o que el algodón haya subido un 250% en 12 meses es una afrenta a todos que, por supuesto, nos estrangula el bolsillo.

Ningún país saldrá de la recesion o el estancamiento con esta mega inflación, que llega no por una cuestión de oferta y demanda, sino símplemente por especulación financiera a traves de contratos no mercantiles. Todo el dinero de las inyecciones de liquidez de los bancos centrales no ha ido a facilitar el crédito y dinamizar las empresas. Ha ido a inflar las cotizaciones de las materias de primera necesidad, después de que estallara la burbuja inmobiliaria.

Así lo corrobora Juan Laborda, profesor del Instituto de Estudios Bursátiles (IEB), quien señala a la Fed como principal responsable de las políticas que han generado esta inflación mundial, unido a los bancos de negocio globales que, después de ser rescatados con dinero público continúan especulando, de manera directa o con hedge funds (propios o ajenos con los que actúan de broker). “Esta inversión no ha generado ninguna riqueza, al contrario, la destruye con la enorme inflación que genera”.

Jesús Sánchez-Quiñones, director general de Renta 4, confirma que “las posiciones especulativas sobre el crudo son tres veces mayores ahora mismo que cuando el petróleo tocó sus máximos históricos en 2008”, fecha en la que se rozaron los 150 dólares el barril y obligó a las autoridades económicas a que se conociera la separación entre contratos mercantiles y especulativos.

En el gráfico adjunto se puede contemplar perfectamente esta situación.

Evolución del precio del barril de crudo (gráfica de fiebre) y de los contratos especulativos sobre el petróleo (gráfica de barras) desde enero de 2008 hasta el pasado mes de abril. / Fuente: Bloomberg

No faltan opiniones de expertos que culpan a Goldman Sachs de la hambruna mundial. No lo digo yo, que no soy nadie, lo dicen estos, que son gente muy respetable y saben mucho. Lleva tiempo leerlo, pero el artículo no tiene desperdicio. Inflación financiera sobre el pan nuestro de cada día.

Dejando de lado esta pequeña anécdota, el encarecimiento del petróleo imputa unos costes enormes a la economía real que hace imposible cualquier vestigio de crecimiento. Ello lleva a varios bancos centrales (el viernes, los de Noruega, Perú y Chile, sin ir más lejos) a subir sus tipos de interés para frenar la inflación, con el efecto entre la ciudadanía y las empresas.

Lo malo es que esta medida no sirve para corregir los precios del crudo, ya que aunque las economías se enfríen, el dinero sigue entrando de manera especulativa en los mercados de futuros, llevando a un riesgo de decrecimiento más inflación (estanflación) cuyas consecuencias sólo son paro y destrucción de riqueza.

Pero eso se ha demostrado claramente insuficiente. ¿Qué hay que hacer? Laborda lo tiene claro: “prohibir las operaciones financieras especulativas sobre bienes de primera necesidad”.

Es que las magnitudes asustan. No soy amigo en exceso de las ONG en general, porque les intuyo a todas un sesgo izquierdista que no comparto. Sé que esta frase no es lo más ortodoxo que puede decirse, pero aún así, recomiendo el estudio “Navegando por los meandros de la especulación Alimentaria”, de la organización Mundubat, cuya existencia era totalmente desconocida para mi, pero que recopila unos datos impactantes.

Sólo ver los gráficos de los precios del trigo, el arroz, el maíz o el azúcar causa malestar, con unos picos alcistas en los últimos meses, pese al entorno económico titubeante. Que en España se reconozca un encarecimiento artificial de las materias primas de entre el 35% y el 75% o que todo eso lleve a que superemos en breve los 1.000 millones de personas hambrientas en el mundo es un desastre sin precedentes.

Ojo, repito, todo esto lo gestaron los bancos centrales inundando de liquidez los mercados, rescatando a los bancos de negocio y no modificando su actividad. A los Goldman, JP, Merrill y compañía les han dado la munición.

Pero las economías principales deben dar un paso al frente ya mismo para frenar esta burbuja de las materias primas. Recuperando el viejo tópico de que con las cosas de comer no se debe jugar nunca.

10 Comments
  1. FRANCISCO PLAZA PIERI says

    Que un hatajo de H.P. nos están haciendo la vida menos confortable, es un hecho. Se ha comentado ya tantas veces…, hasta la saciedad, diría yo. Pero, mientras los ciudadanos no actuemos de forma contundente no va a tener solución este asunto. A todos esos «tiburones», mafias hay que llamarlos, que piensan en repartirse auténticas millonadas entre unos pocos, y, a continuación se plantean despedir a no se sabe el número de operarios de sus plantillas, ¿qué decir de ello? A todo esto, en unas declaraciones por parte de algún agente del Gobierno, aparece diciendo que no se admitirá semejante desatino.
    Con los precios es lo mismo: ahí tenemos a las Eléctricas, los carburantes, etc. Bueno, y también todos los productos de todo tipo.

  2. Pek says

    Muy bueno. Enhorabuena

  3. Jonatan says

    Salir a la calle no es suficiente, aunque sí necesario. Idear fórmulas practicables de oposición a estos comportamientos sería lo deseable. Boicot productivo y resistencia pacífica pero contundente. Hay que ponerse a ello sin más dilación.

  4. NOEXISTEJUSTICIA says

    Lo de siempre, los hijos de papá viviendo a todo tren a costa del hambre y sufrimiento de los más sacrificados y/o cualificados, siguiento los pasos de sus padres, caminando sobre sangre y sudor y lágrimas sin ningún pudor, sin haber pisado jamás una escuela. Encima se indignan si te manifiestas o oyen una queja tuya…una revolución francesa hacia falta en España. Pobres españoles…

  5. NOEXISTEJUSTICIA says

    Es lo de siempre, los hijos de papá viviendo a todo tren a costa del hambre y sufrimiento de los más sacrificados y/o cualificados, siguiento los pasos de sus padres, caminando sobre sangre y sudor y lágrimas sin ningún pudor, sin haber pisado jamás una escuela. Encima se indignan si te manifiestas o oyen una queja tuya…una revolución francesa hacia falta en España. Pobres españolitos..

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