El expresidente de Caja Madrid Miguel Blesa ha sido increpado por decenas de preferentistas que aguardaban su salida de los juzgados de Plaza de Castilla, hasta el punto de que ha tenido que ser protegido por agentes de la policía antidisturbios. Tras dos horas de declaración, el exbanquero, al que el juez no ha retirado el pasaporte, ha salido de la sede judicial por la puerta trasera, la misma por la que entró, pero en esta ocasión no ha podido esquivar a una multitud de preferentistas y periodistas. Se han vivido momentos de gran tensión, ya que la multitud ha intentado acercarse a él y sólo con dificultad y protegido por la policía ha podido llegar al automóvil, momento que recogen las imágenes.