Entrevista al portavoz en el Congreso de En Comú Podem en materia presupuestaria
Joan Mena: «Las derechas siempre se entienden para proteger a los lobbies»
Los presupuestos del Gobierno de Mariano Rajoy superan las enmiendas a la totalidad presentadas por la oposición. Con 176 votos a su favor, los del PP, Ciudadanos, PNV, Coalición Canaria y Nueva Canarias, el Ejecutivo ha conseguido sacar adelante, de momento, estas cuentas y salva en buena parte la legislatura. Todavía faltan los debates sobre las enmiendas parciales y la aprobación de la propuesta. El PNV se marca el tanto de la revalorización de las pensiones según la subida del IPC y, además, se lleva un buen puñado para Euskadi con la pretensión de materializar lo que ya pactaron el pasado año con el PP. Sin embargo, los nacionalistas vascos faltan a su palabra de no apoyar las cuentas mientras siguiera activo el 155 sobre Catalunya. Hoy, cuando se cumple exactamente medio año desde la aplicación de este artículo sobre, hablamos con Joan Mena (Sabadell, Barcelona, 1975). Este profesor de secundaria catalán, que imparte la asignatura de Lengua Castellana, es actualmente el portavoz de En Comú Podem en materia presupuestaria en el Congreso de los Diputados.
— Usted es el portavoz de En Comú Podem en materia de presupuestos, sin embargo el jueves le echamos en falta en la Tribuna…
— En En Comú Podem tenemos a mucha gente muy válida en la materia presupuestaria. Siempre hemos hecho una apuesta por dar visibilidad a múltiples liderazgos en nuestro espacio político, incorporando un elemento fundamental que va en nuestro ADN, la feminización de la política. Teníamos que ligar los presupuestos a la brecha general de género, a la brecha salarial en las pensiones que sufren las mujeres y a la falta de financiación para combatir las violencias machistas. El modelo de país de En Comú Podem es feminista, frente al patriarcal que desarrolla el Gobierno del PP, lo vemos en estos presupuestos. Por ello, intervino mi compañera Lucía Martín.
— Hablando de igualdad, había un compromiso, tras las movilizaciones feministas y el Pacto de Estado, de un esfuerzo por erradicar la violencia machista. ¿Se recoge este compromiso en los presupuestos?
— No, y era un mandato que tenían por el Pacto de Estado. Al Gobierno del PP se le llena la boca siempre de grandes pactos de estado pero cuando hay que comprometerse políticamente a través de partidas presupuestarias y recursos públicos vemos que se bajan de ese consenso. Las políticas del PP no solucionan los grandes problemas de la violencia machista, pero, además, la ministra competente del tema, Dolors Montserrat, no da la cara cuando se lo hemos pedido, no explica por qué no se financia lo que se ha acordado en el Pacto de Estado.
— Ha dicho que estos presupuestos no revierten la inercia de la falta de inversión en Catalunya, una inercia que lleva así desde el 2009. También dice que esto está recogido en el Estatut. Todo esto no se entiende bien en el resto del Estado y usted es profesor. ¿Puede explicarlo de una manera pedagógica?
"El hecho de que se infrafinancie y se incumpla lo que se recoge en el Estatut a quien más perjudica es a las clases populares de Catalunya"
— Lo intentaré. Lo que recoge la disposición tercera del Estatut es que el Estado tiene que invertir, como mínimo, el porcentaje del PIB que aporta Catalunya al conjunto del Estado. En estos momentos el porcentaje catalán del PIB es del 19,2% y las inversiones, del 13%. Por lo cual, hay seis puntos de diferencia entre lo que aporta Catalunya al PIB estatal y lo que recibe en inversiones.
Esto, dicho así fríamente, no se entiende. Se entiende mejor cuando decimos que esas inversiones que no llegan a Catalunya son políticas educativas, sanitarias, sociales, de cercanía, como por ejemplo Rodalíes, el medio de transporte que más utiliza la población catalana. Mientras tenemos las capitales catalanas unidas por trenes de alta velocidad, los trabajadores que se levantan a las seis de la mañana y tienen que coger estos trenes de cercanías en el área metropolitana sufren un calvario por esta infrafinanciación. El hecho de que se infrafinancie y se incumpla lo que se recoge en el Estatut a quien más perjudica es a las clases populares de Catalunya.
— Una plataforma valenciana llegaba esta semana al Congreso reclamando una financiación más justa. No es sólo Catalunya, hay más territorios. ¿Vivimos un proceso de recentralización por parte del Gobierno del PP?
— Sufrimos esa recentralización por parte del PP y de su aliado por la derecha, Ciudadanos. Ciudadanos es el que más está forzando esta recentralización y eso va en detrimento de los intereses del conjunto de los pueblos de España y de las clases populares. Nuestra apuesta es la de la España plurinacional, no queremos una competición entre pueblos, sino una cooperación. Lo que quieren el PP y Ciudadanos es esa competencia entre pueblos que perjudica a las clases populares.
Esto se traduce en estos Presupuestos Generales del Estado, que son del PP pero también de Ciudadanos. Lo que hace el Gobierno, con la complicidad de Ciudadanos, es centrifugar sus responsabilidades y las centrifugan hacia las comunidades y ayuntamientos. Si, como dicen hoy, España está en el carril del déficit público, no es gracias al Gobierno del Estado, es gracias a que se han apretado el cinturón quienes menos se lo podían apretar, los ayuntamientos y las comunidades. Esto lleva a otro problema: cuando no se resuelve el modelo de financiación autonómica, lo que se hace también es asfixiar la sanidad, educación y políticas sociales que ofrecen estas administraciones.
— Usted es profesor catalán. Esta semana veíamos cómo nueve profesores eran denunciados por la Fiscalía por "humillar a hijos de guardias civiles", por delitos de odio, injurias, delitos contra la integridad moral…
— Estamos viviendo un recorte de las libertades en todos los terrenos. Lo vemos cuando se encarcela a raperos, se prohíbe exposiciones, cuando se encarcela a políticos en prisiones españolas y cuando se judicializa cualquier disenso en el ámbito de la política. Lo vivimos en la campaña de las elecciones catalanas, cuando se dio una competición entre el PP y Ciudadanos sobre quién generaba más ruido sobre un supuesto adoctrinamiento en las escuelas catalanas. Después del 21-D, ese tema desapareció de sus agendas políticas, nunca más lo han traído al Congreso. Todo fue campaña electoral para tensionar la situación. Hay una clara intencionalidad del PP y Ciudadanos de sacar beneficio electoral de esto a cambio de tensionar todavía más a la sociedad catalana, eso es una grave irresponsabilidad política. Me preocupa mucho más que esto venga de Ciudadanos, Albert Rivera ha sido educado en una escuela catalana, sabe que no se adoctrina, que no se persigue a nadie por sus pensamientos políticos… Lo que hay detrás es una voluntad manifiesta de mentir, de estigmatizar al modelo educativo catalán.
— Durante los últimos meses, ¿ha visto en riesgo este modelo educativo tras los múltiples ataques que ha recibido por la derecha?
Yo soy profesor, además de Lengua Castellana. Ningún compañero ha puesto en cuestión el modelo lingüístico
— No lo he visto en riesgo por un factor fundamental: el gran valor que tiene la escuela en Catalunya es la cohesión de la comunidad educativa. Yo soy profesor, además de Lengua Castellana, en Catalunya. Nunca, ningún compañero de departamento ha puesto en cuestión el modelo lingüístico, somos conscientes que ese modelo beneficia al bilingüismo y, especialmente, a los alumnos castellanoparlantes que, cuando acaban el recorrido educativo, son competentes en dos lenguas, eso es un gran paso como país. También genera cohesión en torno a las familias y la política.
Siempre digo que en Catalunya tenemos un triple consenso con el modelo lingüístico: primero, consenso político, el 80% de los representantes públicos estamos de acuerdo con este modelo; hay consenso social, según las encuestas la mayoría de la ciudadanía también lo está; tercero, hay consenso pedagógico, es un modelo ejemplo en el resto de comunidades bilingües que tenemos en Europa, porque garantiza que cualquier alumno termine siendo competente en dos lenguas.
— Hoy, justamente, se cumple medio año desde la aplicación del artículo 155. ¿Cómo se desbloquea esta situación?
— En primer lugar, hay que garantizar un Govern efectivo en Catalunya, que gobierne para todos los catalanes, que piense en toda la población. No llevamos únicamente seis meses sin gobierno, llevamos muchos más años sin un Govern que trabaje para revertir las grandes desigualdades sociales que tenemos en Catalunya. Esto también se tiene que desbloquear desde el Congreso de los Diputados y desde la política estatal, es un conflicto que no sólo atañe a Catalunya, está poniendo en duda el valor democrático del Estado español. Nosotros aspiramos a construir una alternativa en España que haga frente a este centralismo retrógrado, que recorta libertades, que está impulsando el Gobierno del PP con el apoyo de Ciudadanos.
Lo que significa esta forma de gobernar lo hemos vivido en la Comunidad de Madrid, donde se han dedicado a robar, con una presidenta que ha tenido que dimitir después de mentir en el tema del máster y en el de las cremas del supermercado. La reacción del PP demuestra cómo la mafia protege a la mafia. El PP ha orquestado una operación para que Cifuentes tenga dimitir y, de este modo, mantenerse el PP en el poder por el poder. Quien hoy garantiza que el PP siga gobernando en Madrid es Ciudadanos. La alternativa es construir un proyecto transversal y democrático para expulsar a la mafia de las instituciones.
— El PNV negaba que iba a apoyar los presupuestos si se mantenía el 155. ¿Las derechas siempre se entienden?
— Eso está claro. Las derechas se entienden hablen el idioma que hablen. Lo hemos visto con el apoyo del PNV a los Presupuestos Generales del Estado, pero también hemos visto esta semana al PDeCat apoyando y promoviendo, conjuntamente con el PP y Ciudadanos, la ley del desahucio exprés que condenará a más familias a la miseria y la pobreza. Cuando se trata de proteger los lobbies y machacar a las clases populares, siempre se entienden las derechas.
— Dicen que con estos presupuestos se soluciona el problema de las pensiones. ¿Es así?
"No nos parece que se haya llegado a lo que piden los pensionistas"
— Creo que el ejemplo de las pensiones nos demuestra que movilizarnos sirve, que sí se puede, que cuando nos organizamos y movilizamos hay repercusiones en los partidos políticos y representantes públicos, independientemente de que estos compartan las reivindicaciones. En este sentido, los pensionistas nos han dado una gran lección y nos han mostrado el camino para conseguir reivindicaciones públicas. Por otro lado, el ministro Montoro y el Gobierno nos ha mentido reiteradamente, siempre nos ha dicho que era imposible incrementar las pensiones según el IPC y hemos visto que era posible y así lo han acordado.
Además, no nos parece que se haya llegado a lo que exigen los pensionistas. Incluso subiendo el porcentaje del IPC, todavía el 60% de los pensionistas cobran menos de 800 euros, esto, según los indicadores internacionales, es estar en el umbral de la pobreza. El gran reto que tenemos como país no es incrementar las pensiones según el IPC cada año, sino situarlas en un nivel de dignidad. Que la gente pueda terminar su etapa vital con un salario que se ha ganado más que dignamente durante su vida.