48 horas en Valencia

Ofelia de Pablo y Javier Zurita (Texto y fotos ©)

Valencia se ha llenado de una nueva luz. Su transformación ha inundado todos los rincones. Han surgido nuevos restaurantes de diseño en barrios tradicionales como El Carmen, en los museos han aparecido nuevas colecciones con tendencias vanguardistas y en las calles se respira un ambiente joven y lleno de vida. Hoy la ciudad que huele a naranjos en flor abre sus brazos a la modernidad pero nunca dejará de conquistarte con sus paellas de ensueño y su horchata junto al mar. Súmergete en sus calles durante 48 horas:

Primera jornada

10.00 Callejear entre la historia. Las calles del Barrio del Carmen cuentan la historia de la capital del Turia, una mezcla de pasado y modernidad que se refleja en rincones como la Plaza Madre de Dios. Hoy es la zona de moda. Cafés, tiendas a la útlima, galerías de arte todo con un ambiente muy agradable. Para completar el paseo hay que tomarse una horchata en El Siglo y un dulce placer que se sirve bien frío todo el año (Plaza de Santa Catalina, 11)

12.00 Subir a lo más alto. Escalar a lo alto de los 51 metros de la torreta de El Miquelet en la Catedral de Santa María nos ofrecerá una atalaya ideal desde donde observar el corazón histórico de la ciudad: el barrio del Carmen.

14.00 Una de paella. Tanto deambular abre el apetito y la gastronomía valenciana ofrece un sugerente repertorio. Un clásico obligado es saborear en una terraza junto al mar una buena Paella Marcelina, en el restaurante que le ha dado nombre.

19.00 Un pasado gótico. La riqueza y esplendor que vivió Valencia en el siglo XV se refleja en sus monumentos, en sus casas del centro y en las fachadas de los edificios públicos. Pero sin duda es en La Lonja de la Seda donde este arte alcanza su máxima expresión. Su sala de columnas, la Sala Daurada o la sala de contrataciones son dos impecables muestras de una gran riqueza de estilo.

21.00 Mimar el cuerpo. Después del largo día hay que darse un merecido descanso, nada mejor que los nuevos tratamientos de aceite Yum Yum y el Royal Thai, entre otros muchos, que acaba de incorporar el spa del Barceló Valencia Sus instalaciones de 500 metros cuadrados ubicado en la azotea invitan a dejarse mimar teniendo las magníficas vistas de la Ciudad de las Artes y las Ciencias como telón de fondo.

22.00 Noche de Opera. Con el cuerpo apunto es el momento para disfrutar de la noche en el Palau de les Arts. Un majestuoso edificio diseñado por el arquitecto valenciano Santiago Calatrava cuyo perfil náutico sugiere la cercanía al mar.

Segunda jornada

10.00 El barroco en su plenitud. Uno de los mayores atractivos del Palacio de los Marqueses de Dos Aguas es su impresionante fachada barroca. Está presidida por la imagen de la Virgen con dos atlantes a los lados que simbolizan dos ríos, todo con aspecto de desbordante voluptuosidad.

14.00 Universo marino en el plato. Saborear platos recién salidos del mar en una cocina de alta calidad rodeado de más de 10.000 especies marinas es toda una experiencia. Esta es la propuesta del restaurante Submarino.

17.00 Arte moderno a la carta. Para empaparse de las nuevas tendencias hay que acercarse al Instituto Valenciano de Arte Moderno IVAM. Cuenta entre sus más de 10.000 obras con la colección permanente de Julio González y con las esculturas de Miquel Navarro, además de algunas obras de Ignacio Pinazo y Joaquín Sorolla

23.00 Noche a la valenciana. La fiesta está servida cada noche en la capital del Turia. La zona del Puerto Deportivo es lo más in de la ciudad y uno de los locales que no te puedes perder es la terraza de Las Ánimas del Puerto.

Cómo llegar: Iberia ofrece vuelos diarios desde 35€ por trayecto . Información y reservas.

Más información: Oficina de Turismo de Valencia.