Félix de Azúa: “La situación política actual es una chifladura”

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Félix de Azúa
Félix de Azúa, en una imagen del pasado mes de enero. / Lavandeira jr. (Efe)

Félix de Azúa, escritor, doctor en Filosofía por la Universidad de Barcelona, catedrático de Estética de la Politécnica barcelonesa, Premio Herralde de Novela y González Ruano, de periodismo, ocupará el sillón H de la Real Academia Española, que había quedado vacío tras la muerte de Martín de Riquer, el gran medievalista.

Parece que la elección no tuvo dudas, aunque su personalidad, libre y un tanto contestataria pueda levantar suspicacias entre algunos académicos, que prefirieron votar en blanco.

Uno de los palos frecuentados por Azúa, la poesía, lo vinculó a los Nueve novísimos poetas españoles, de José María Castellet (1970), junto a Ana María Moix, Pere Gimferrer, Leopoldo María Panero y Vicente Molina Foix. Pero él ha escrito novela, ensayo, artículos de prensa...

FA es un hombre políglota, muy bien informado de las cosas de la realidad, en su vertiente preferida, que es la filosofía, y suele hablar y escribir de aspectos que preocupan fuera antes de que lleguen a estas tierras, todavía ignorantes de algunos presupuestos intelectuales.

Ha escrito La invención de Caín. Ciudades y ciudadanos (1999), Autobiografía sin vida (2010), Autobiografía de papel (2013), Diccionario de las Artes (2011), Contra Jeremías. Artículos políticos (2013), entre muchos otros libros.

Como manda el lugar común popular, la tendencia es creer que la Academia sea una institución solemne donde difícilmente caben personalidades controvertidas como Azúa, así que cuartopoder.es le pregunta, en una breve entrevista de urgencia, por éste y otros particulares.

 ¿Qué hace un agitador cultural en la RAE, tan cargada de solemnidad?

– Los académicos que conozco personalmente, Luis Goytisolo, Javier Marías, Paco Rico, Pombo, Soledad Puértolas y tantos otros, son todo menos solemnes. Gente normalísima, pero con una peculiaridad: han dedicado toda su vida a la lengua española.

 ¿Sigue sintiéndose discípulo de Agustín García Calvo?

– Hace ya mucho tiempo que le recuerdo como un maestro lejano, no porque él se distanciara, sino porque me falta talento para entenderle.

 ¿En qué cree que  puede ser útil a la RAE?

– Seguramente en alguna de mis aficiones, como por ejemplo el lenguaje filosófico. Una cosa es la definición de substancia según Aristóteles y otra según Putnam.

 ¿Entenderán los académicos su sentido de la ironía y el sarcasmo que tanto aprecia?

– Hay académicos sumamente irónicos e incluso alguno hay bastante sarcástico. La ironía, de otra parte, es esencial para la novela moderna desde el Quijote.

 Como articulista en prensa escrita, ¿hay palabras para describir el momento político en España?

– Pocas: barbarie, caos, chifladura... y consternación.

 ¿Se vuelve uno más conservador a medida que echa años a la espalda? (Hay quien critica eso de tus opiniones políticas)

– Bueno, yo más bien diría que algunos de mis amigos, sumamente conservadores, siguen pensando lo mismo que hace cuarenta años. Por ejemplo, siguen siendo marxistas o comunistas o se creen de izquierdas. Sin embargo, los últimos cuarenta años han supuesto un cambio radical en el mundo y hay que saber entenderlo. Quien no se adapte será un carca.

 ¿Qué le pasa a la contemplación de la realidad cuando se tiene una hija pequeña?

– ¡Ah, eso es un milagro! Aparece una nueva vida, pero no sólo la suya sino también la de los padres. Y el mundo se hace nuevo de repente.

 ¿Algún manuscrito en vías de publicarse?

– Sí, pero no estará listo hasta el otoño.

7 Comments
  1. Enrique Gonzalez Duro says

    No es extraño que vuluble chiflado vea el mundo como una chifladura, que a pocos puede interesar.

  2. Luis says

    Es decir, que como en los últimos 40 años el mundo se ha hecho neoliberal eso es lo que hay que hacerse.

    Un tío listo, sin duda, este Azúa. Cuando tocaba era del grupúsculo maoísta Bandera Roja, después se hizo socialista de Felipe González y ahora que conviene es de derechas.

  3. Patronio says

    Si la máxima profundidad filosófica de Félix de Azúa consiste en proclamar que algunos son conservadores porque se creen de izquierdas, realmente es para poner su pensamiento en cuarentena.
    Me inclino por pensar que la señora Huelbes no ha sabido recoger con fidelidad lo expresado por este señor.

  4. Elvira Huelbes says

    Como se dice en la entrada, se trata de una entrevista de urgencia casi monosilábica. La obra de Félix de Azúa responde por él, ça va de soi.

  5. ¿Ironía? says

    Un día, gentes como Huelbes decretaron que Azúa era un tipo irónico, agudo, brillante, gran folósofo y críticoi de la sociedad, y desde entonces tenemos que aguantar sus tópicos de «nuevo filósofo» como si fueran algo más que recursos de intelectual oportunista. El caso es que siempre pilla cacho, ahora en la Academia, con Cebrián y cía, y todavía hay quienes le tienen por crítico .del ‘establishment’.

  6. Patronio says

    Pues para esta porquería de entrevista de urgencia mejor no le hagas ninguna, que tampoco había tanta prisa.

  7. me says

    No sabia que para pertenecer a la RAE el requisito fuera ser de derecha…que chorradas

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