Sánchez se posiciona y llama tirano a Maduro por responder “con balas a las ansias de democracia”
La autoproclamación de Guaidó como máximo representante de la Asamblea Nacional venezolana ha abierto una división de ejes internacional en todos los continentes. Después del apoyo recabado por Guaidó por parte de EEUU, Canadá o Brasil, el posicionamiento del Gobierno español se ha hecho esperar, aunque el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha denominado a Maduro "tirano" por responder con "balas a las ansias de democracia" en Venezuela.
Las declaraciones de Sánchez llegan días después de que Borrell hiciera público el posicionamiento del Gobierno, desde donde se apuesta por exigirle a Nicolás Maduro que convoque elecciones en un “plazo temporal”. En el caso de que no cumpla, se plantearía “el reconocimiento del presidente interino” Juan Guaidó para que sea la Asamblea la que abra las urnas en el país. Borrell no ha detallado cuál sería ese “plazo temporal”, pero sí ha advertido de que si Maduro se negase a convocar los comicios o no lo hiciera “con las garantías suficientes” habría que encargárselo a otra persona, en este caso, a Guaidó.
Lo ha hecho en la clausura del Consejo de la Internacional Socialista, celebrado en la República Dominicana, desde donde ha enviado un mensaje a los venezolanos y les ha animado a seguir en la lucha por la libertad y por la democracia, que es la razón de ser de los partidos políticos socialistas.
Enfrentamiento con Guerra
Las declaraciones de Sánchez llegan horas después de que el exvicepresidente Alfonso Guerra echara en cara al presidente del Gobierno haber pactado con fuerzas independentistas para llegar a la Moncloa. En la Cadena Cope, ha afirmado que, frente al criterio de Sánchez, él no hubiera formado gobierno gracias al apoyo de "bilduetarras".
También se ha mostrado distante en el criterio de Sánchez a la hora de formalizar un gobierno "con 84 diputados". ""No lo haría por varias razones, que son estrictamente operativas, creo que ningún gobierno puede funcionar bien con solo 84 diputados de 350", ha afirmado en la Cope.
También ha apostado por un parlamento bipartidista, considerando que este modelo funcionaba mucho mejor y que quienes lo criticaban "deberían reconocer que se equivocaban".
