COVID-19

Consejos para reducir el riesgo en las cenas y comidas de Navidad

  • El riesgo cero no existe, pero reducir el número de comensales o ventilar la casa cada hora pueden ayudar a hacer la Nochebuena o la Navidad más seguras
  • Al colocar las mesas, procura que la distancia entre comensales sea mayor, siéntalos por núcleos de convivientes y ten en cuenta a quién tienes enfrente
  • Este año, nada de cantar a gritos villancicos dentro de casa y evita besos a los no convivientes
 

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Cierres perimetrales, un máximo de comensales dependiendo de la comunidad autónoma y toques de queda en Nochebuena y Nochevieja. Son las normas que han establecido las autoridades para hacer compatible la seguridad y las fiestas durante esta Navidad, que se celebrará bajo la amenaza de la covid-19. Hasta ahora, se ha discutido sobre lo que no se puede hacer, pero repasamos qué sí se puede hacer y, sobre todo, cómo hacerlo con Federico Arribas, secretario de la Sociedad Española de Epidemiología.

La primera (y casi la única evidencia) es que el riesgo cero no existe. Lo más básico es cumplir las normas establecidas por el Ministerio de Sanidad y no juntarse más del número de personas permitido: "Cuanta menos gente, menos riesgo hay", explica el experto. Por tanto, lo ideal es cenar y comer con "tu burbuja", es decir, con tus convivientes.

Arribas pone el ejemplo del contagio con el de un queso Gruyère: "Cuantos más agujeros tapes, más dificultades hay para el virus". En ese queso, hay orificios más grandes a cubrir, como pueden ser una mala ventilación o no respetar la distancia con los no convivientes, y otros más pequeños, como evitar los brindis. Lo ideal es mantener la mascarilla siempre que no se esté comiendo y el experto advierte: hay que cuidar especialmente a los mayores.

El epidemiólogo también es consciente de que habrá familias con más dificultades que otras para cumplir las medidas, ya que no es lo mismo disponer de una casa con jardín o un salón amplio que vivir en un piso de 50 metros. Por tanto, es una guía con recomendaciones básicas, pero la responsabilidad de lo que ocurra en la intimidad de cada casa es personal. Será una Navidad diferente.

1. Ventilar cada hora

En los sitios al aire libre siempre hay menos riesgo de contagio. Por tanto, convertir la tradicional comida de Navidad en un aperitivo navideño en una terraza amplia o dar un paseo al aire libre son buenas ideas para no renunciar a la compañía. Si el bolsillo no te permite celebrar fuera y prefieres comer en casa, ventílala cada hora, aunque haga frío. Mejor ponerse cuello alto o manta que tener muchas horas las ventanas cerradas.

2. Evitar aglomeraciones los días anteriores

Si se va a visitar a no convivientes, como pueden ser los abuelos, hay que minimizar riesgos al máximo. Una buena idea es evitar aglomeraciones los días anteriores. En lugar de ir a un centro comercial en la hora punta del fin de semana, podemos acudir a los comercios de barrio que estén menos concurridos o comprar los regalos online.

Por tanto, los días prefiestas son una buena oportunidad para salir a dar un paseo o hacer deporte al aire libre. Es más sano y más seguro que las fiestas con compañeros de trabajo.

3. Mesas anchas y comensales más separados

Es el momento de desplegar las mesas para separar a los comensales lo máximo posible. Mejor estar a 140 cm de distancia que a 70 cm. Lo mejor es sentar juntos a los convivientes y hacerlo en forma de cuadrado. No solo es importante a quién tienes al lado, sino con quien conversas. "Hay que tener en cuenta al que tienes enfrente, ya que el virus se expande por gotas y aerosoles".

4. Evitar compartir platos

Lo más importante es la higiene, la distancia de seguridad y la buena ventilación. También hay otras actividades para minimizar el contagio por contacto, como puede ser evitar compartir platos, no meter las cucharas o tenedores de todos en la misma ensaladera o que sea la misma persona la que sirva la comida.

5. Nada de cantar villancicos

No todas las restricciones iban a ser una mala noticia. Cantar villancicos a gritos en pleno éxtasis navideño es una costumbre poco recomendada esta Navidad, ya que hay más riesgo de transmisión por gotas.

6. Besos y brindis

Seguro que llevas nueve meses esperando a que llegue el momento de abrazar y besar a tu abuela, pero es mejor que no lo hagas. Sin embargo, puedes seguir teniendo gestos de cariño con tus convivientes. No tiene sentido que no beses a tu pareja tras las campanadas, pero sí el resto de días del año.

¿Hay que dejar de brindar? Es difícil que se contagie por los restos de acercar los labios a la copa en el "chin chin". Sin embargo, es mucho más peligroso apiñarse para brindar todos juntos mientras todos gritan "Feliz 2021".

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