La familia Benetton
Nos llega de Francia la comedia del año, un éxito rotundo de taquilla en el país vecino solo comparable en cifras de recaudación y espectadores a Intocable, una película también políticamente correcta y con la emigración como tema de fondo.
En este caso, Dios mío, ¿pero qué te hemos hecho? nos cuenta la historia rocambolesca de una familia tradicional –'gaullista', se dice en Francia- compuesta por el matrimonio de un notario y un ama de casa y sus cuatro hijas, que ve aumentar su número con miembros de otros países y credos gracias a las bodas de las tres mayores con jóvenes de ascendencia marroquí, israelí y china. La “esperanza” de los progenitores es la hija menor, pero…
Con agilidad narrativa, situaciones ocurrentes, chistes basados en tópicos, interpretaciones correctas y pocas transgresiones ideológicas, el director Philippe de Chauveron ha compuesto una película entretenida sobre la globalización y el llamado choque de civilizaciones, es decir, sobre los tiempos que corren.
Nos recuerda en lo de los tópicos a Ocho apellidos vascos, pues tiene el mismo planteamiento narrativo: la exageración de lo conocido, lo que produce una especie de catarsis y facilita reírse de ciertos temas que aún producen cierto resquemor. Es antológica la escena de La Marsellesa.
La película descansa interpretativamente en la figura del padre de la familia, Christian Clavier (Los visitantes, Asterix y Obelix contra César...), quien compone un personaje verdaderamente divertido, original y lleno de contradicciones. Pero los yernos tienen también papeles interesantes, que dan mucho juego a la trama y cuyos actores resuelven eficazmente. Quizá los roles de las mujeres queden algo más difuminados.
Dios mío, ¿pero qué te hemos hecho? no pretende profundidad ni análisis sociocultural ni religioso, es más bien una mezcla divertida y superficial de situaciones cotidianas desenfadas mezcladas con ingredientes de películas tan políticamente correctas como Adivina quién viene a cenar esta noche, Cuatro bodas y un funeral, El padre de la novia e incluso Intocable , que hemos mencionado anteriormente.
Cine divertido y de evasión para estas fechas tan familiares, y una apuesta segura para ver con los cuñados.
