Catalunya, cap on vas?

  • Martí explicó que su recopilación de 33 entrevistas hechas sobre el “procés” en el último año permite seguir los meses más trepidantes del camino hacia la República desde antes del referéndum del 1-O

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La presentación en Madrid, el jueves pasado, del libro de entrevistas Catalunya cap on vas? (Dónde vas, Catalunya), del historiador y periodista Pep Martí, fue un ejemplo de lo que la sensatez política reclama pero no todos los políticos de uno u otro bando abordan con sinceridad, incluso aquellos que lo pregonan: el talante abierto, de diálogo, que lleve a encontrar una solución satisfactoria para independentistas y no independentistas catalanes.

El periodista de Nació Digital Pep Martí acudió a la librería Blanquerna con su libro (editado por Saldonar) muy bien acompañado. En la presentación, le acompañaron Ferrán Mascarell, el delegado de la Generalitat en Madrid, quien presentó a la mesa del debate, de la que formaban parte el ex ministro de Exteriores y dirigente del PP José Manuel García Margallo y la jurista socialista Beatriz Talegón, a quien también acompañó Ferran Casas, el subdirector del diario en que trabaja, Nació Digital.

Martí explicó que su recopilación de 33 entrevistas hechas sobre el “procés” en el último año permite seguir los meses más trepidantes del camino hacia la República desde antes del referéndum del 1-O hasta la caída del gobierno de Mariano Rajoy y los primeros pasos del nuevo ejecutivo de Pedro Sánchez”. Y lo hace mediante largas conversaciones –“discursos, no tuits”- con personalidades como el periodista Enric Juliana o el economista Miquel Puig, tras incluir representantes de la izquierda independentista como Antonio Baños o de la derecha unionista (Alejandro Fernández), soberanistas como Germà Bel, Joan Queralt, Mercè Barceló, Martí Anglada, Andreu Mas-Colell, Carme-Laura Gil o Pilar Rahola y partidarios de la llamada tercera vía (Antonio Franco, Josep Ramoneda, Xavier Sardà, Anton Chay), a los que suma la visión internacional de Krystyna Schreiber o Tomás Alcoverro y, por supuesto, a quienes aportan miradas desde fuera de Catalunya que van desde la complicidad a la crítica severa, como Bea Talegón, Javier Pérez Royo o José Manuel García-Margallo.

No obstante, el objetivo ahora editado pretende “mirar más allá del proceso” e incluye también reflexiones sobre aspectos que rebasan la situación en Catalunya, a la que no se mira de manera aislada. Reflexiones sobre los efectos de la crisis económica en Europa, el ascenso de la derecha autoritaria en el seno mismo de la UE, la emergencia del fenómeno Trump y las consecuencias del Brexit que sitúan Catalunya dentro del contexto global.

Pep Martí (Barcelona, 1964), autor de biografías como la de Josep Tarradellas, Antonio Maura o Manuel Milián Mestre, destacó que las entrevistas a García-Margallo y a Bea Talegón son indicativas de la pluralidad que hemos intentado recoger ante unos acontecimientos de gran complejidad política y social. “Bea Talegón expresa la simpatía que el proceso ha generado en sectores de la izquierda española y explica cómo entró en contacto con  la realidad catalana, desde que estudió en un colegio religioso de Guadalajara que tenía a la catalana Maria Ràfols como patrona, y añade cómo, viviendo en Bélgica, comprendió lo que era un estado compuesto, en el que se hablan distintas lenguas, y cómo conviven el francés y el flamenco”, dijo. Y añadió: "Para mí, García-Margallo era muy importante porque ha demostrado una capacidad de acercarse al problema de fondo, elaborando incluso una propuesta de reforma política que él ha puesto negro sobre blanco”. “Expresa uno de los nudos que pueden desenredarse, quizá. Ni en este ni en ningún conflicto, es la distancia de partida la que hace inviable la solución política, sino la nula voluntad de acuerdo”, precisó. “Y creo que el exministro García-Margallo, político con una sólida dimensión intelectual, ha hecho un esfuerzo de todo lo contrario”, remató.

Más allá de un debate de posiciones contrarias conocidas en el que García Margallo abrumó con sus conocimientos de la política internacional a una dubitativa Talegón que, no obstante, mantuvo el barco de la izquierda española, defendiendo la condición nacional de Catalunya y, en cualquier caso, el derecho a decidir de los catalanes, Martí destacó que “el libro pretende mostrar un determinado talante. Se ha escrito desde el respeto y la voluntad de escuchar y también quiere ser una defensa de la palabra rigurosa, más de discurso que de tuit, en un momento en que asistimos a una banalización peligrosa del lenguaje. Es un fenómeno global. Algunos analistas aseguran que las llamadas fake news son las mentiras de siempre. Pero no sé si no estamos ante un fenómeno nuevo, inquietantemente nuevo, en que algunos poderes creen que pueden actuar al margen de la verdad de manera explícita”.

“Hay en las páginas de Catalunya, cap on vas? – añadió-- la búsqueda de espacios de encuentro o de entender la realidad en su totalidad". Parece ahora muy lejano ya el tiempo en que, muy cerca de aquí, un líder de la izquierda catalanista, Lluís Companys, exclamó "Viva España" en el Congreso en el momento de aprobarse el Estatuto de 1932. O aquel en el que el líder de la derecha catalanista, Cambó, también en el Congreso, expresó el deseo de que "un día iremos todos juntos". Pero en el libro, desde la distancia que puede haber entre un Antonio Baños por la izquierda o un Alejandro Fernández por la derecha, he intentado que, más allá de ser independentistas o no independentistas, la inmensa mayoría de entrevistados fueran personas que no nieguen al otro”.

Por eso Catalunya, on vas? es, en definitiva, como destacó Ferran Casas, una recopilación republicana que enriquece el debate en el contexto de un periodismo que corre el riesgo de convertirse en referencia de la razón de Estado, ya sea para preservarlo o para negarlo. “De una república del rigor, la honestidad, la pluralidad y el respeto a una ciudadanía que queremos crítica”, concluyó.

1 Comment
  1. ninja45 says

    La mayor parte de catalanes, ya no nos sentimos españoles desde el momento que se aporreó vilmente a nuestra gente por el terrible «delito» de querer votar. Para homenajear a las víctimas del ataque terrorista del 17-8-2017 en las Ramblas de Barcelona o a las «trece rosas» republicanas fusiladas por los fascistas en la guerra civil, grandes aspavientos y retórica por un tubo. Contra los independentistas republicanos catalanes, represión a tope y prisión incondicional. Las fuerzas de ocupación de Cataluña formadas por la policía nacional, la guardia civil y la extrema derecha unionista y xenófoba campan a sus anchas con total impunidad y se extrañan de que no sean bien recibidos y se les haga el vacío. Se lo ganaron a pulso el 1-O. Que se vayan a su Spañistán a no tardar. Cuando tenemos presos políticos gracias a la accion partidista y parcial de la abogacía del Estado de Desecho, la Fiscalía que «afina» en manos de la extrema derecha de Vox, una Injusticia Española totalmente parcial y politizada, un Tribunal Inconstitucional anclado en la época de Franco y una monarquía obsoleta a la que nadie ha votado impuesta por el dictador, apaga y vámonos. En Cataluña hemos encontrado la solución para que nuestra basura sea recogida diligentemente de la puerta de nuestras viviendas: La ponemos en bolsas amarillas y los esbirros de C’s. Fachas y el Partido Podrido se encargan de pasar a recogerla. Si me pegan, me divorcio. Som República !!*!!

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